35
REVISTA DE MUSEOLOGÍA KÓ OT , 2024 AÑO 14, n.º 16, ISSN 2078-0664, ISSNE 2378-0664, ISNI 0000 0001 2113 0101
Herrera Reina, Martha Marielba. Aproximación etnográca de la esta patronal del Señor de Ostúa
en Metapán. p. 20-38
El día principal de la esta, los feligreses llegan al templo para participar
en los diferentes actos litúrgicos. Como en toda esta patronal la
feria es un elemento importante, en esta los comerciantes venden los
tradicionales dulces de azúcar, que son cantaritos elaborados con azúcar
blanca y decorados con miel de colores, venden otros dulces de frutas
como zapote y níspero, dulces de leche conocidos en Guatemala como
canillitas, cocadas, entre otros; el precio de las bolsas de dulces es de
un dólar.
Una semana antes de la festividad, llegan los comerciantes guatemaltecos
del pueblo vecino municipio de Concepción Las Minas, cuyo objetivo
es vender sus productos en la feria. Es importante mencionar que en
esta festividad también hay venta de objetos como estampas propias del
Señor de Ostúa y en las canastas de dulces incluyen crucijos del Cristo
Negro de Esquipulas.
Fotos 11-13. Elementos religiosos a la venta junto a los dulces tradicionales
Fotografías: Marielba Herrera Reina.
Una vez terminada la contemplación de la imagen negra del crucicado,
que anuncia el inicio de la Cuaresma, los eles aprovechan para hacer
sus rituales religiosos y disfrutar de la feria, ambos aspectos (sagrado
y profano) son característicos de la religiosidad popular que hemos
registrado brevemente en la comunidad metapaneca. Aunque de nombre
la tradición tiene su origen en la época colonial, en la actualidad, la esta
se realiza en el ámbito local y han desaparecido elementos importantes
como la Cofradía, nos indican la continuidad de la tradición, pero para
sus devotos la imagen justica su fe y les permite expresarla a través de
los cultos populares particulares de cada grupo social.
Comentarios nales
Después de esta breve recopilación de la esta patronal del Señor de
Ostúa, en Metapán, es pertinente detenernos a analizar la tradición
religiosa en la que podemos determinar:
La tradición religiosa católica en Metapán tiene un origen colonial
que con el tiempo retomó elementos de las diferentes etnias que la
mantuvieron hasta nuestros días. Este culto tiene su origen, según la
tradición oral y las fuentes consultadas, en el río, no sabemos si Ostúa
o Langue, en las cercanías de en una hacienda del siglo XVI, la cual que
fue abandonada por las inundaciones provocadas por los ríos cercanos.
Esto permitió el traslado, en su momento, de las imágenes del Señor de
Angue y el Señor de Ostúa a la actual ciudad de Metapán. Es importante
considerar que la diversidad poblacional desde sus orígenes estuvo
conformada por españoles, indios, mestizos y descendientes de africanos
que convivieron en el mismo territorio (para esto basta ver las fuentes de
la época que muestran estos grupos), por lo que la devoción es exclusiva
de un sector poblacional.
Para mantener vigente el culto al crucicado negro, en el siglo XIX
construyó, un santuario para que los metapanecos y descendientes de los
pobladores de Angue y Ostúa pudieran venerar en la Iglesia El Calvario.
Sin embargo, es importante mencionar que, según las crónicas la imagen
del Señor de Angue, es la que se encuentra en ese lugar, mientras que
la tradición oral nos dice que es la imagen del Señor de Ostúa la que se
visita cada semana en esa iglesia. De una u otra forma, el nombre de la
imagen y la imagen misma no representa un conicto para la comunidad
católica metapaneca. En este caso es la fusión del símbolo religioso y
su nombre, los que juegan un papel importante en la continuidad de la
traición, que tuvo su origen en la época colonial, a su vez inuenciada