Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible.
Fase II
Conformación de Cluster de turismo, prueba piloto
en el municipio de Nahuizalco. Sonsonate. El Salvador
Turismo como estrategia de desarrollo local. Caso:
San Esteban Catarina
Migración y ruralidad: el caso del cantón Los Lagartos
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental
en los salvadoreños
Violencia contra las mujeres en El Salvador
Resultados de la tercera fase del proyecto de registro
y reconocimiento de sitios arqueológicos históricos de El Salvador
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana
en El Salvador
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida.
Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
Formación ciudadana en jóvenes y su impacto en el proceso democrático del país
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos
en hospitales de El Salvador
ISSN: 2218-3345
www.utec.edu.sv
Universidad Tecnológica
de El Salvador
Universidad Tecnológica de El Salvador
Calle Arce No. 1020, San Salvador www.utec.edu.sv
REVISTA CUATRIMESTRAL
NÚMERO 51 JULIO 2012
5
Editorial
7
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática
y sostenible. Fase II
Ana Cristina Vidal Vidales
Guillermo Francisco Vásquez
20
Conformación de Cluster de turismo, prueba piloto
en el municipio de Nahuizalco, Sonsonate. El Salvador.
Blanca Ruth Gálvez Rivas
Rosa Patricia Vásquez de Alfaro
Juan Carlos Cerna Aguiñada
Oscar Armando Melgar Nájera
27
Turismo como estrategia de desarrollo local caso:
San Esteban Catarina.
Carolina Elizabeth Cerna
Larissa Mar
José Manuel Bonilla Alvarado
31
Migración y ruralidad: el caso del cantón Los Lagartos.
Elsa Ramos
38
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental
en los salvadoreños.
José Ricardo Gutiérrez Quintanilla
50
Violencia contra las mujeres en El Salvador.
Laura Navarro Mantas
DIRECTOR GENERAL
Dr. José Mauricio Loucel
Rector de la Utec
DIRECTOR EJECUTIVO
Y PRODUCCIÓN
Rafael Rodríguez Loucel
VICERRECTORA
DE INVESTIGACIÓN
Noris López de Castaneda
COMITÉ EDITORIAL
Rafael Rodríguez Loucel
Universidad Tecnológica de El Salvador
Alberto Arene
Universidad Tecnológica de El Salvador
René Portillo Cuadra
Universidad Tecnológica de El Salvador
Blanca Ruth Orantes
Universidad Tecnológica de El Salvador
COLABORADORES
Guillermo Antonio Contreras
María José Monjarás
Aracely de Hernández
DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN
Evelyn Reyes de Osorio
REVISIÓN
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IMPRESIÓN
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REVISTA DE LA UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE EL SALVADOR - NÚMERO 51 - JULIO 2012
entorno
56
Resultados de la tercera fase del proyecto de registro
y reconocimiento de sitios arqueológicos históricos de El Salvador
José Heriberto Erquicia Cruz
62
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana
en El Salvador
José Heriberto Erquicia Cruz
Martha Marielba Herrera Reina
71
Programa psicopreventivo de educación para la vida.
Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
Ana Sandra Aguilar de Mendoza
83
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
Camila Calles Minero
91
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
Edith Ruth Vaquerano de Portillo
Domingo Orlando Alfaro Alfaro
101
Formación ciudadana en jovénes y su impacto
en el proceso democrático del país
Saúl Campos Morán
110
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos
en hospitales de El Salvador
Carolina Lucero Morán
entorno
5
EDITORIAL
La investigación pertinente busca resolver problemas, satisfacer necesidades, aportar al proceso
enseñanza aprendizaje y compartir el conocimiento a la comunidad académica y científica. Por
ello los productos de la investigación científica son diversos y van desde propuestas de solución,
planes piloto, productos creados o innovados, artículos científicos, textos, libros, entre muchos
más. A continuación se detallan algunos de los proyectos que se realizaron durante el proceso
de investigación 2011 en la Universidad Tecnológica de El Salvador, bajo la coordinación de la
Vicerrectoría de Investigación.
Los proyectos de investigación finalizados se desarrollaron en alianzas estratégicas con instituciones
del Estado, como ejemplo, el proyecto conjunto con la Procuraduría General de la República
“Programa psicopreventivo de educación para la vida. Efectividad en adolescentes UTEC-FGR”,
siendo los resultados un diagnóstico del programa y propuesta de intervención con instrumentos
de medición del impacto. En el área de psicología se realizó la investigación “La violencia social
delincuencial asociada a la salud mental de los salvadoreños”; un estudio importante que mide
algunas variables sociodemográficas vinculadas al fenómeno de la delincuencia, temática
relevante que aborda el impacto en la salud mental de los salvadoreños y que, a partir de ello, se
generan fenómenos psicosociales que tienen efectos en la salud y el comportamiento atípico de
la población. De este informe, el rector de la UTEC, Dr. José Mauricio Loucel, hizo entrega de un
ejemplar a la señora ministra de Salud Pública y Asistencia Social, Dra. María Isabel Rodríguez con
el objetivo que los resultados y estrategias propuestas se retomen a la hora de diseñar políticas
públicas y acciones para minimizar los riesgos que implica el fenómeno de la delincuencia en la
sociedad salvadoreña.
En el área social, se presentan los estudios: “Violencia y programación infantil en la televisión
salvadoreña” y “La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños”, los resultados de
estos estudios reiteran el papel que tiene la televisión como transmisora de violencia o valores y
cómo incide en las conductas de la niñez y la juventud.
En el área cultural, el grupo de investigación en historia e identidad cultural desarrolló dos
investigaciones: “El culto a san Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador”
y “Resultados de la tercera fase del proyecto de registro y reconocimiento de sitios arqueológicos
históricos de El Salvador. III Parte”.
El tema “Conformación de clúster de turismo en el municipio de Nahuizalco”, con enfoque
multidisciplinar, aborda el estudio desde el comercio, la administración y las ciencias sociales.
Por ello, se vincula a las temáticas de turismo sostenible, desarrollo cultural y emprendimiento,
orientadas bajo la línea de desarrollo local. Este proyecto se enmarca, al igual que otros, dentro
de la investigación aplicada y el modelo de investigación-acción, que busca brindar propuestas
concretas y factibles a la comunidad, así como intervenir en la población objeto de estudio. En
esta misma línea, se desarrolló la investigación “Turismo como estrategia de desarrollo local. Caso:
6
EDITORIAL
San Esteban Catarina”, en donde se presenta una propuesta lista para implantar, lo que permite
articular la investigación con la proyección social.
Le invitamos a dar lectura a la revista Entorno número 51 en donde encontrará artículos con
resultados de investigación, que aportan al sector académico, a la comunidad científica, a los
tomadores de decisiones en las diferentes áreas del conocimiento en los sectores público y
privado. Sin dejar de mencionar que los contenidos pueden utilizarse como fuente bibliográfica en
las labores de docencia e investigaciones subsiguientes. Además de ser modelo para identificar la
base teórica, método y resultados y discusión a la luz de los postulados teóricos. Para conocer las
investigaciones completas, se le recomienda visitar el sitio http://www.utec.edu.sv/utec.content.
php?sec=invest&acc=proy&an=1.
7
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 7-19, ISSN: 2218-3345
Diseño de un modelo de vivienda
bioclimática y sostenible. Fase II
Ana Cristina Vidal Vidales
ana.vidal@utec.edu.sv
Guillermo Francisco Vásquez
Dirección de Investigaciones, Universidad Tecnológica de El Salvador
Resumen
Con esta investigación se busca retroalimentar la
propuesta de vivienda planteada en la primera fase
de la investigación, por medio de un experimento en
el cual se midieron datos de temperatura y humedad
relativa, en modelos a escala hechos con tres sistemas
constructivos livianos diferentes. De esta forma es
posible determinar, cuál sistema constructivo es más
apto para las distintas condiciones climáticas que se
presentan en el país, de acuerdo con las características
propias de cada sitio. La investigación se complementa
con una profundización de los elementos que deben ser
tomados en cuenta en el diseño de una vivienda que
satisfaga las necesidades básicas y la aplicación del
diseño bioclimático, proponiendo modelos conceptuales
que contienen alternativas tecnológicas, y se analiza su
factibilidad de aplicación.
Palabras clave: Vivienda, desarrollo sostenible,
arquitectura doméstica, arquitectura bioclimática,
diseño bioclimático, confort.
Abstract
This research reviews the house model that was
proposed in the fi rst phase of the investigation, using
an experiment which collected temperature and
relative humidity data in scale models built with three
different lightweight materials. That way it was possible
to determine which material better suits the different
climatic conditions existent in El Salvador according to
the individual characteristics of each site. The research
also includes a deeper study of the elements that should
be taken into account in the design of a house that
satisfi es its inhabitant’s basic needs and the application
of bioclimatic design which is complemented by
the proposal of conceptual models that contain
technological alternatives and their applicability.
Keywords: Dwelling, sustainable development,
domestic architecture, bioclimatic architecture,
bioclimatic design, comfort.
Desde principios del siglo pasado, se ha considerado de suma
importancia el pensar en el futuro más que en el presente
al tratarse de construcciones. Unwin (1902) nos recuerda
esto en lo que podría interpretarse como una manifestación
temprana del concepto de la sostenibilidad, cuando dice
que una vivienda que deba durar cien años o más debe
tener características tales que le permitan realmente existir
y ser funcional por ese período, pues es lógico asumir que
como tal será una vivienda valiosa durante su vida útil. Esto
es fundamental no solo como un tema de justicia fi nanciera
para las generaciones venideras en vista de sus necesidades
futuras, sino también porque estas construcciones deben
8
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
basarse en las condiciones permanentes y esenciales
de la vida y la salud. Estas “necesidades básicas” siguen
presentes, pero los elementos constructivos de algunas
edificaciones que sirven para proteger a las personas de las
amenazas externas al mismo tiempo impiden la entrada del
aire fresco y la luz del sol.
Vitruvio lo dijo desde la época de Augusto: “Los edificios
privados estarán correctamente ubicados si se tiene en
cuenta, en primer lugar, la latitud y la orientación donde
van a levantarse […] Se debe orientar la disposición de los
edificios atendiendo a las peculiaridades de cada región y
las diferencias del clima […] Así, por medio del arte se deben
paliar las incomodidades que provoca la misma naturaleza”
(Vitruvio Polión, 2006).
Modelo conceptual
No existe una sola vivienda bioclimática, sino “viviendas
bioclimáticas” que se adaptan de manera específica a las
particularidades de cada uno de los sitios donde se ubican
(Da Casa Martín, 2007). Sin embargo, sí puede establecerse
una serie de lineamientos o elementos que deben estudiarse,
analizarse y aplicarse al momento de diseñar una vivienda
bioclimática.
Tabla 1.
Componentes propuestos para el modelo conceptual de una vivienda bioclimática y su proceso de diseño
Aspecto Componente Descripción Características
El entorno
Referencias cardinales Primer paso del análisis territorial
- Comportamiento climático
• Elementos climáticos
• Factores climáticos
Naturaleza elemental Georreferencias del sitio
- Puntos focales
- Recursos naturales
disponibles
Programa
arquitectónico
Acondicionamiento
ambiental
Determinación de condiciones de la
vivienda y las características para
cumplir con estas condiciones
- Orientación
- Forma de la edicación
- Ventilación natural
- Iluminación natural
- Control acústico
- Masa térmica
Distribución interna
Disposición de los espacios al interior
de la edicación
- Planta abierta
- Versatilidad de los espacios
- Integración al entorno
- Relación materiales-
naturaleza
9
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Sostenibilidad y
bioclimatización
Requerimientos
rmicos
Estrategias de uso de los recursos y
mecanismos para su control
Sistemas de control solar:
- Aprovechamiento del
sol (iluminación y aporte
térmico)
- Mecanismos de protección
solar
Sistemas de control eólico:
- Sistemas de enfriamiento
pasivo
- Protección contra el viento
- Sistemas reguladores de
masarmica
• Materiales
• Aislantes térmicos
• Colores
• Sombras
Tecnologías alternativas
para la dotación de servicios
sicos
Nota. Elaboración propia con base en La Roche; Mustieles & De Oteiza (2006).
Método
La investigación, en general, consistió en dos etapas, una de
revisión bibliográfica y otra experimental. Productos de la
etapa primera son la recuperación de datos e información
sobre los espacios necesarios en una vivienda, así como un
modelo conceptual de los componentes de una vivienda que
cumple con criterios bioclimáticos y sostenibles (ver tabla
1), que sirvieron para retroalimentar el diseño de vivienda
propuesto en la Fase I.
El objetivo de la fase experimental era verificar el
comportamiento térmico de tres materiales o sistemas
constructivos ligeros para determinar cómo se adaptan
a las condiciones climáticas urbanas de la ciudad de San
Salvador, y así identificar cuál es el más adecuado para
otras condiciones climáticas en el país. Esto se hizo por
medio de tomas de medición de temperatura y humedad
relativa exteriores y al interior de cada uno de los modelos
construidos con los sistemas constructivos seleccionados.
Es necesario enfatizar que en ningún momento se consideró
a un material mejor que otro, pues se sostiene la premisa
de que cada uno tiene sus propiedades y puede responder
mejor a determinadas condiciones climáticas, además de
que han sido probados por cada uno de los distribuidores
especialistas.
Objeto de estudio
El objeto de estudio fueron tres maquetas o modelos a
escala del diseño de vivienda propuesto en la Fase I de la
investigación. La escala utilizada fue 1:10, y para ello se
seleccionaron materiales de construcción ligeros, cuyas
especificaciones técnicas les adjudican propiedades
aislantes, tanto térmicas como acústicas, y que pudieran
aplicarse tanto en la escala real como en la de los modelos.
Los materiales seleccionados para la construcción de
paredes (interiores y exteriores) y entrepisos fueron madera,
10
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
placas de fibrocemento y el sistema constructivo conocido
como Covintec. La finalidad era mantener la escala del
grosor de las paredes, por eso se utilizaron materiales que
no sobrepasaran los 15 mm de espesor.
Figura 1.
Objeto de estudio
Maquetas de prueba utilizadas en el estudio antes de ser colocadas en la
orientación propuesta en el diseño. Fotografía propia.
Madera
La madera es un material de construcción vernáculo
ampliamente utilizado por sus propiedades térmicas y de
resistencia estructural.
La madera es un material reciclable por ser de origen
orgánico. Sin embargo, El Salvador no es un país maderero,
por lo que no es un sistema constructivo muy difundido
y se encuentra principalmente en las áreas rurales y en
arquitectura turística o arquitectura habitacional, pero
de sectores poblacionales con mayor poder adquisitivo.
En referencia a esto, existe también la polémica sobre la
obtención de la materia prima para construir por la potencial
degradación al medio ambiente que esto implica.
A pesar de ello, se consideró para el estudio, por sus
propiedades térmicas y de resistencia, como un referente
ampliamente estudiado y como elemento comparativo para
analizar el comportamiento de los otros materiales.
Se utilizó Plywood de 14 mm de espesor, se cortaron
las piezas permitiendo uniones a 45° y se unieron con
pegamento para madera, y posteriormente se clavaron
entre sí. Los espacios entre las uniones y posibles defectos
se cubrieron con masilla plástica para madera.
Placas de fibrocemento
Según la literatura informativa (Plycem, 2009), las placas
de fibrocemento son láminas de cemento reforzado
que cumplen con requisitos de resistencia, seguridad y
durabilidad para la construcción de edificios, y están hechas
con cemento Portland, carbonato de calcio, fibras celulósicas
y otros agregados menores. Posteriormente, se trata la
superficie de las placas con una emulsión impregnante
que le confiere propiedades impermeabilizantes, por lo que
además son resistentes a los insectos y hongos. El proceso
de fabricación de este sistema constructivo esta normado,
y la planta de fabricación está certificada en las normas
ISO 9001:2004, ISO 14001:2004 y OHSAS 18001:2007. De
acuerdo con la norma ASTM C 1186-07, las láminas son de
tipo B grado I, y con la norma INTE/ISO 8336:2007 son de
tipo B categoría 2.
Estas láminas pueden utilizarse tanto en interiores como
en exteriores, y según su espesor sirven como bases para
techos, losas de entrepisos, paredes y fachadas.
Para la construcción de la maqueta se utilizó el material
llamado Plystone de 14 mm de espesor. El material fue
donado por la empresa Plycem Construsistemas de El
Salvador, y para su construcción se trató igual que las piezas
de madera: las piezas fueron cortadas con ángulos de 45°
en los extremos de unión, atornilladas entre sí, y las juntas
se rellenaron con masilla para paredes de cemento para
formar una unión hermética.
Sistema constructivo Covintec
De acuerdo con el manual de instalación (sistema constructivo
Covintec, 2010), este sistema consiste en una estructura
tridimensional de alambre de acero calibre 14, formado
por armaduras verticales continuas de 76 mm de peralte,
separadas a cada 51 mm con tiras de espuma de poliestireno
expandido de 57 mm de espesor. Las armaduras se unen a
11
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
lo ancho del panel por medio de alambres horizontales de
calibre 14, electrosoldado a cada 51 mm.
Para permitir el agarre de un repello de mortero de concreto,
la retícula de alambre tiene una separación de 9.5 mm del
poliestireno. Este mortero se aplica cuando el panel ya está
colocado en su posición final. Con este material pueden
construirse muros, techos, entrepisos y otros elementos
arquitectónicos.
El muro terminado tiene 100 mm o más de espesor,
consistiendo en el panel con un peralte de 76 mm recubierto
en ambas caras con una capa de 22 mm de mortero de
cemento con arena. Esto da como resultado elementos
de concreto reforzado con propiedades estructurales y
aislantes, tanto térmicas como acústicas.
Para la construcción de la maqueta se contó con la asesoría
del arquitecto Dagoberto Rodríguez Arias, representante
vendedor del sistema constructivo Covintec en el país. El
Arq. Rodríguez envió información técnica sobre el sistema
constructivo y asesoró en la construcción del modelo a
escala construido con él.
Debido a que el material original posee dimensiones
que sobrepasaban el propósito de la investigación,
recomendó una alternativa que consistía en utilizar placas
de poliestireno expandido, de ½” de ancho, cortadas en la
forma de las piezas cubiertas, con malla de trama pequeña
(cedazo metálico de 16x16”), que posteriormente debían
ser repelladas con una mezcla de cemento similar a las
de escala real. Para esta alternativa habría que recurrir al
dominio técnico de un albañil, de manera que el acabado
fuera lo más realista posible. Una vez armada la maqueta,
se repelló con una capa de DecoBlock gris fino ( 0.25 mm).
El resto de los materiales son comunes a todas las
maquetas, simulando los reales propuestos para el diseño
de la Fase I, utilizando lámina calibre 26 para la cubierta
de techos, con una inclinación de 15%; cielos falsos de
poliestireno expandido de ½”; y ventanas de vidrio claro de
2 mm de espesor, sujetadas con silicón transparente. Las
paredes se pintaron de color blanco y el terreno se simuló
con capas de poliestireno expandido pintado de color verde.
Las celosías en forma de “S” se construyeron con madera,
para la maqueta de madera, y con cartón de ilustración base
80 color blanco en las otras dos maquetas.
Instrumentos
Para las mediciones de temperatura se utilizaron
termómetros digitales que arrojan datos simultáneos de la
temperatura y humedad interna y externa. Se colocó uno
dentro de cada maqueta terminada para obtener datos de
su temperatura interior.
Los datos recolectados fueron organizados en tablas, en
Excel de Office 2010, para poder sacar un promedio simple
diario y semanal que permitiera compararlos. También se
realizaron cálculos de las diferencias de temperatura y
humedad diarias.
Procedimiento
Las maquetas o modelos se colocaron dentro de unas
bases de madera de 1.20x1.20 m x0.20 cm de altura, con
la misma orientación propuesta para el diseño original,
y se sometieron a la radiación solar. Las mediciones de
temperatura, tanto del ambiente como del interior de las
maquetas, se hicieron a la sombra, tres veces diarias: a las
10:30, 13:30 y 16:30 horas.
Los datos recolectados se vaciaron en matrices semanales,
se distinguieron la temperatura y la humedad exteriores,
en el modelo de madera, en el de fibrocemento y en el
que simula el sistema constructivo Covintec, etiquetado
como “Concreto”. Por medio de estas matrices se pueden
observar las variaciones entre horas en un mismo día,
así como el promedio diario y semanal. Finalmente, se
colocaron en una nueva matriz los promedios semanales.
Toda esta información se presentó además en forma de
gráficos de líneas para poder apreciar las tendencias de
ambos elementos medidos.
En caso de que, por cualquier motivo, un dato no haya
podido ser recolectado, se duplicaron los datos de la hora
siguiente o del día anterior, según el caso.
12
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Resultados
Las tablas 2 y 3, y figuras 2 y 3 muestran los promedios
semanales de los datos recolectados en las maquetas durante
las primeras diez semanas del experimento. Las mediciones
comenzaron a realizarse a partir del 9 de enero de 2012.
Cabe mencionar que los datos pueden haber sido afecta-
dos por las sombras provocadas por los edificios cercanos
al área donde se colocaron las maquetas, por alteraciones
hechas sobre los modelos por personas externas, y, final-
mente, por error humano al momento de realizar la lectura
de datos.
Tabla 2.
Datos promedio de temperatura (°C) para las primeras diez semanas del experimento
Exterior Madera Fibrocemento Concreto
Primera semana 30.7 31.5 31.2 31.8
Segunda semana 32.9 32.8 32.8 33.2
Tercera semana 29.8 32.0 31.3 32.2
Cuarta semana 31.0 32.2 31.9 32.7
Quinta semana 32.1 33.1 33.8 34.3
Sexta semana 32.1 35.2 35.9 36.7
Séptima semana 31.8 35.1 36.2 37.0
Octava semana 33.3 36.2 37.7 38.2
Novena semana 34.1 36.5 38.1 38.3
Décima semana 35.5 38.2 39.8 39.5
Promedio semanal 32.33 34.28 34.87 35.39
Nota: Elaboración propia. Promedio de los datos obtenidos durante las primeras diez semanas. Puede observarse un incremento en la temperatura
exterior a medida avanzan los meses; las temperaturas más altas comienzan a registrarse en el mes de marzo, que coincide con el perfil climatológico
del país, donde, según García, Zimmermann, Soriano, Pérez, & Ayala (s/f), se presenta un incremento en la temperatura; y hacia el mes de abril se
registran las temperaturas más altas del año.
Figura 2.
Datos promedio de temperatura (°C) para las primeras diez semanas del experimento
Nota: Elaboración propia. Promedio de los datos obtenidos durante las primeras diez semanas. La temperatura al
interior de las maquetas siempre es más alta que la del exterior.
13
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Tabla 3.
Datos promedio de humedad (%) relativa para las primeras diez semanas del experimento
Nota: Elaboración propia. Promedio de los datos obtenidos durante las primeras diez semanas. En cuanto a
humedad relativa se refiere, en general la madera siempre mantiene los valores mayores, excepto cuando comienza
a elevarse la temperatura, que es cuando el concreto presenta los mayores valores. El fibrocemento mantiene
valores de humedad muy similares a los del exterior.
Exterior Madera Fibrocemento Concreto
Primera semana 45 45 41% 42%
Segunda semana 32 38 34% 34%
Tercera semana 43 45 41% 43%
Cuarta semana 37 41 37% 37%
Quinta semana 36 42 36% 37%
Sexta semana 37 42 37% 37%
Séptima semana 34 40 34% 35%
Octava semana 30 40 31% 39%
Novena semana 27 41 30% 44%
Décima semana 25 43 30% 47%
Promedio semanal 35 42 35% 40%
Nota. Elaboración propia. Promedio de los datos obtenidos durante las primeras diez semanas. Puede observarse que en general,
mientras mayor es la temperatura, menor es el porcentaje de humedad.
Figura 3.
Datos promedio de humedad (%) relativa para las primeras diez semanas del experimento
14
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Discusión
Para la primera etapa de la recolección de datos, las tempe-
raturas más bajas se registran en horas de la tarde (16:30),
seguido de las 10:30, y finalmente las 13:30 con las tempe-
raturas más altas durante un día; aunque a partir del aumen-
to de la temperatura exterior, hacia las últimas semanas, las
temperaturas de la mañana y de la tarde son muy similares,
con una tendencia a la alza. Esto indica que el momento del
día en el que se necesita mayor protección de la radiación
solar y mayor ventilación es por la mañana, independien-
temente de la rutina de la familia que habite la edificación,
ya que entre mayor circulación y renovación de aire haya al
interior de la vivienda, más se reducen las probabilidades
de que por la tarde y por la noche las viviendas tengan una
temperatura interior alta.
Otra tendencia de comportamiento de elementos climáticos
que pudo observarse es que a mayor temperatura menor
porcentaje de humedad relativa, tanto en el exterior como
al interior de las maquetas.
Con base en los datos recolectados y las diferencias de
temperatura que se presentaron a lo largo del día, podría
decirse que la madera tiene un comportamiento más estable
ante los cambios de temperatura, pues su variación con
respecto a los otros materiales es menor; incluso representa
prácticamente la mitad de la variación de temperatura en el
exterior. Le sigue el fibrocemento y finalmente el concreto,
que presenta una variación de temperatura mayor a lo largo
del período de monitoreo. Como la variación en ningún
caso es mayor a la del exterior, podría decirse que todos
los materiales, al menos para el período estudiado, pueden
proporcionar un ambiente interior relativamente estable en
cuanto a temperatura. En todos los casos la variación de
humedad relativa al interior de las maquetas es mayor que
la exterior.
Sin embargo, la capacidad de los materiales de mantener
un ambiente interior estable debe complementarse con
la capacidad de mantener temperaturas lo más cercano
posible, o en su defecto, más abajo que la del ambiente
exterior, porque en el país el clima suele ser caluroso.
De acuerdo con los datos recolectados, para el período
analizado, el fibrocemento es el material cuyos datos para
temperatura y humedad relativa se aproximan más a la
temperatura del exterior.
Debe recordarse que el grado de humedad es una
condicionante de la percepción de la temperatura. De
acuerdo con la gráfica bioclimática de Olgyay (2002), el
cuerpo humano se encuentra más cerca del confort antes
del 50% de humedad relativa. Si la humedad relativa es
mayor, la temperatura debe reducirse.
Sin embargo, varios autores que presentan sus rangos de
confort para climas como el de El Salvador (ver tabla 4)
presentan datos distintos. Cabe mencionar que los datos de
humedad recolectados en el experimento están dentro de
ambos parámetros, pero los de temperatura son mayores.
Tabla 4.
Rangos de temperatura y humedad óptimas o aceptables en climas tropical-húmedos,
de acuerdo con dos autores
Bazant (2009) C.E.P. Brooks
Temperatura Humedad Temperatura Humedad
23-29 °C 50%-85% 23.3-26.7 °C 30%-70%
Nota: Datos tomados de Bazant (2009) y Olgyay (2002).
15
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Conclusiones y recomendaciones
1. Los elementos y los factores climáticos funcionan
como un sistema, cuyos elementos se interrelacionan
y en general determinan mutuamente. Debido a esto,
deben de ser estudiados y tratados como tal.
2. Se recomienda continuar las mediciones para identificar
el comportamiento climático a lo largo del año y cómo
este afecta la temperatura interior de las maquetas
de cada uno de los distintos materiales. Sin embargo,
por el momento puede concluirse que, para el período
analizado, el fibrocemento funciona donde se presentan
altas temperaturas y altos porcentajes de humedad
relativa, ya que la humedad al interior de la maqueta
tiende a ser un poco menor que la del ambiente y el
material logra mantener temperaturas cercanas a las del
exterior. La madera puede funcionar en lugares donde
se presentan bajos porcentajes de humedad relativa
y altas temperaturas, porque la temperatura interior
tiende a ser moderada y los porcentajes de humedad
muy altos. El concreto puede funcionar mejor en climas
frescos, porque logra acumular calor y mantener una
humedad cercana a la del ambiente.
3. Debido a los resultados del experimento, para el
diseño propuesto inicialmente, se propone cambiar
las dimensiones de las paletas tipo sifón, haciéndolas
simétricas por medio de la prolongación del elemento
de traslape exterior, con lo que se alarga el espacio
de entrada en la zona de alta presión de aire (fachada
este) y se hace más eficiente el efecto de enfriamiento
y circulación al interior de la vivienda, por medio del
incremento de la velocidad del aire. Se recomienda
también la colocación de malla entre las celosías para
proteger el interior de la vivienda de insectos y roedores.
4. Debido a que en los datos recolectados se pudo observar
que las temperaturas al interior de las maquetas son
mayores que la exterior, se propone ubicar una abertura
más en la parte superior del pasillo de la segunda planta,
que comunique con la losa del techo verde. El grado
de esta abertura podrá controlarse por medio de una
celosía de madera. Esto permitirá que el aire caliente
salga por la parte superior de la vivienda, contribuyendo
a mantener un ambiente fresco en su interior.
5. Los árboles que se recomiendan para la fachada sur son
de hoja perenne, de una altura máxima de 5 m, ubicados
a una distancia entre los 1.5 y 3 m, dependiendo de la
forma y las dimensiones del follaje y la ubicación final
de la cisterna enterrada. De esta manera producirán
sombra, trabajando junto con el alero, al mismo tiempo
que aportan humedad al aire y refrescan el ambiente.
6. Independientemente del material constructivo que se
utilice, se recomienda, siempre que sea posible, usar
dos capas de material (una interior y otra exterior),
permitiendo una cámara de aire entre ambas capas.
Bajo este principio, es posible además agregar otra
estrategia de ventilación y renovación del aire dentro
de las habitaciones, aprovechando las presiones del
aire, dejando aberturas en las partes superior e inferior
de los muros.
7. Haciendo uso de los principios de la masa térmica, y
tomando en consideración que la tierra tiene poca
conductividad térmica, se utiliza un desnivel en el
terreno para contribuir a la estabilidad térmica al
interior de la vivienda propuesta, aportando además un
porcentaje de humedad relativa.
8. El modelo de vivienda propuesto se recomienda para
zonas de carácter semiurbano donde la temperatura
del ambiente oscile entre los 28 y 32 °C, ubicadas en
terrenos relativamente planos, y dispuestas de tal
manera que se permita la circulación libre del aire entre
las fachadas este y oeste. Esto implica que, en caso
de que su producción sea masificada, la organización
del conjunto será dispersa, por lo que la densidad
habitacional deberá ser baja, dando como resultado
un mayor espacio para la integración con el medio
ambiente, y a la vez permitirá mayor interacción entre
los habitantes del conjunto. Sin embargo, el diseño
propuesto puede adaptarse a áreas urbanas, como
vivienda independiente (es decir, sin ser construido el
diseño como producto de un conjunto de viviendas),
siempre y cuando el tamaño y características del
lote permitan las condiciones necesarias para el
funcionamiento adecuado del diseño. Es importante
recalcar que lo anterior no sustituye el estudio integral y
sistemático de los elementos climáticos de la localidad
donde se construirá la vivienda.
16
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Propuesta
Nota: Elaboración propia.
Figura 4.
Estrategias bioclimáticas utilizadas en la vivienda propuesta
17
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Figura 5.
Esquema conceptual del sistema de celdas fotovoltaicas para la vivienda propuesta
Nota: Elaboración propia.
18
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Figura 6.
Esquema conceptual del sistema de abastecimiento de aguas lluvias y reciclaje
de aguas negras para la vivienda propuesta
Nota: Elaboración propia.
19
Diseño de un modelo de vivienda bioclimática y sostenible. Fase II
Referencias
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20
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 20-26, ISSN: 2218-3345
Conformación de Cluster de turismo,
prueba piloto en el municipio de
Nahuizalco. Sonsonate. El Salvador
Blanca Ruth Gálvez Rivas
bruth@utec.edu.sv
Rosa Patricia Vásquez de Alfaro
Juan Carlos Cerna Aguiñada
Óscar Armando Melgar Nájera
Escuela de Negocios, Universidad Tecnológica de El Salvador
Resumen
En los últimos años del presente siglo, el tema de los “clus-
ter” ha empezado a escucharse con más frecuencia, sien-
do ésta una ventaja competitiva que se adquiere por me-
dio de la localización. Esto permite que las comunidades
o regiones alcancen mayores niveles de crecimiento y de-
sarrollo económico.
Para el levantamiento de datos de la investigación se con-
sideró a personas de ambos géneros, determinándola a
través del muestreo dirigido. Los instrumentos utilizados
fueron: guía de entrevista dirigida, guía de observación
y cuestionario; se requirió información para identifi car el
mapeo empresarial, redes, asociaciones y documentar vi-
sualmente aspectos relacionados a la actividad turística.
Como resultado del procesamiento de datos, se identifi -
caron cuatro purezas turísticas en el municipio de Na-
huizalco: cultural, arquitectónica, natural y artesanal. Las
empresas que conformen el cluster deben cooperar para
mejorar la competitividad, la economía y el desarrollo del
municipio.
Esta investigación se realizó con la colaboración de
Fusades, organización referente en materia de estudios
de competitividad en la región y emprendedurismo. Se en-
marca en la modalidad de investigación-acción, pues se
propone un modelo de cluster de turismo.
Palabras clave: Análisis de cluster, conglomerados, aso-
ciatividad, redes de empresas, comercio turístico, turismo.
Abstract
In the last years of this new century, we have been listening
more frequently about the term cluster, being this last a
competitive advantage gained through the location, that
will allow communities and regions reach higher levels of
economic growth and development.
To carry out the research data we consider people of
both genders, determining it through purposive sampler,
the instruments we used were: directed interview
guide, observation guide and questionnaires, it required
information to identify the business mapping, networks,
associations and visually documenting aspects related to
tourism.
As a result of processing data information, we identifi ed
four tourism sources on Nahuizalco´s municipality:
cultural, arquitectonic, natural and handcraft. The
companies that work in the cluster should cooperate to
improve competitiveness, economy and development of
Nahuizalco´s municipality.
This research was made with the cooperation of
Fusades, this organization leads in the development of
competitiveness and entrepreneurship studies in the
region. It is framed in the form of research-action, proposing
a model of tourism cluster.
Keyword: Cluster analysis, conglomerates, associativity,
business networks, touristic, trade, tourism.
21
Conformación de Cluster de turismo, prueba piloto en el municipio de Nahuizalco. Sonsonate. El Salvador
Introducción
En el departamento de Sonsonate se encuentra el municipio
de Nahuizalco, pueblo con una connotada trayectoria
de tradiciones indígenas, siendo este el primer lugar
que se puede visitar de la “Ruta de las flores”, a solo 4
km de la cabecera de Sonsonate y a 70 de San Salvador.
Se localiza en un pequeño valle al pie de la colina Loma
Larga o Guayactepec, del que topónimo nahuat significa
“Lugar de los cuatro izalcos” (Proesa, 2006). Nahuizalco,
cuyo letardo económico se puede visualizar por el nivel
de pobreza extrema en el que se encuentra la mayoría de
asentamientos que lo conforman, según informe del PNUD,
requiere orientar su desarrollo local activando la riqueza
natural, cultural, arquitectónica y artesanal que posee.
Cluster es un concepto que nace a principios de la década de
los años 90, como herramienta para el análisis de aquellos
factores que permiten a una industria específica incorporar
nuevos eslabones en su cadena productiva, factores que
determinan el uso de nuevas tecnologías en sus procesos y
los factores determinantes de la generación de actividades
de aglomeración. Según la definición formulada por Michael
E. Porter, profesor de la Universidad de Harvard, las empresas
están interconectadas: proveedores especializados, pro-
veedores de servicios, empresas en sectores próximos e
instituciones asociadas (como por ejemplo, universidades,
agencias gubernamentales, asociaciones empresariales,
etc.) en ámbitos particulares, que compiten pero que
también cooperan.
La importancia de un cluster reside en hacer explícita la
construcción de redes de cooperación y colaboración entre
empresas de sectores aparentemente divergentes para
promover el crecimiento económico de una región, en las
industrias en que es naturalmente competitiva, resaltando
la participación de todos los agentes relevantes del cluster,
que van más allá de las cadenas productivas principales.
La formación de los cluster permite generar economías de
escala y de integración funcional, a través de las cuales se
busca tener ventaja competitiva sostenible y generar mayor
valor. Por lo que el presente informe es el resultado de la
investigación basada en el planteamiento que hace Porter,
en el “Diamante de la competitividad” (Porter, 2000), donde
manifiesta que el desarrollo económico de un determinado
lugar o región tiene que ver con su capacidad para generar
conglomerados de empresas afines, en las que existan
factores de producción altamente desarrollados, sectores
auxiliares capaces de proveer bienes y servicios de calidad,
demanda local fructífera y exigente, y, finalmente, una
competencia local intensa que impulse la innovación, fuente
indispensable para alcanzar ventajas competitivas.
En la última década del siglo XX, El Salvador le apostó mucho
al sector turistico; se considera que es una parte de la
riqueza que permitirá al país desarrollarse económicamente;
y si ello se ve desde la óptica de los cluster, con mucha
más ventaja fortalecerá el crecimiento económico no
solo como fuente de ingreso a escala regional, sino como
impulsadores de generación de nuevas fuentes de trabajo en
pequeñas comunidades, mejora de la capacidad instalada y
fundamentalmente en la innovación y generación de nuevos
productos.
Aunque en nuestro país ya se ven algunos augurios sobre
el desarrollo del turismo, como se puede visualizar en el
municipio de Suchitoto, el apoyo del sector empresarial
es insuficiente; requiere de una mayor intervención y
compromiso para enfrentar los retos de la tan mencionada
globalización.
La investigación se enmarcó en el modelo de investigación-
acción, proponiendo un modelo de cluster turístico. Es
de vital importancia conformar la estructura del cluster
de turismo y evaluar el clima para la competitividad de la
actividad turística en el municipio de Nahuizalco, así como
presentar la evolución de la industria del turismo en El
Salvador. Nahuizalco posee las cuatro purezas: cultural,
arquitectónica, natural y artesanal, convirtiéndolo en un
potencial turístico que puede generar desarrollo local a
través de las economías de escala.
Método
Para el desarrollo de la investigación se optó por el diseño
metodológico de tipo no experimental descriptivo, ya que
este reseña las características de un fenómeno existente.
Se diseñaron tres instrumentos para el levantamiento de
información: una guía de entrevista que la conformaba
22
Conformación de Cluster de turismo, prueba piloto en el municipio de Nahuizalco. Sonsonate. El Salvador
dos partes; en la primera se identifican ocho preguntas
relacionadas al mapeo de redes y asociaciones, en la
segunda, igual que la primera, se identificaban ocho
preguntas relacionadas al mapeo empresarial e institucional;
además, un cuestionario con diez preguntas cerradas dos
de ellas con opción a explicar, es decir, semi-abiertas. Este
instrumento se administró a personas que desarrollan
actividades relacionadas con ell turismo, mayores de edad,
de ambos géneros; y en la guía de observación se detallan
aspectos visibles que intervengan con el desarrollo turístico
del lugar, obteniendo de esta forma los elementos de análisis
para la investigación.
Por ser un estudio de suma importancia, la muestra se
determinó a través del muestreo dirigido o intencional,
donde se seleccionaron personas que proporcionaran
información adecuada y necesaria para este estudio.
Este tipo de muestreo se caracteriza por un esfuerzo
deliberado de obtener muestras representativas, en donde
el investigador selecciona directa e intencionadamente los
individuos de la población, según su propio juicio, (Estrada;
Vargas, 2010). Se han considerado sujetos de estudio a
personas mayores de edad, entre 18 y 65 años, de ambos
sexos, con ocupaciones empresariales, en condiciones de
salud aceptables, partiendo de problemas como audición,
habla y sordera debido a la edad avanzada o de nacimiento.
Esta investigación se realizó con la colaboración de
Fusades, organización referente en materia de estudios de
competitividad y emprendedurismo en la región, a través
del Programa de Promoción de Inversión y Diversificación
de Exportaciones, (Fusades, 2011).
Esta investigación comprende la utilización primaria y
secundaria a partir del uso de bibliografía, reportajes,
documentales, sitios Web, entre otros. Así como también el
uso de instrumentos de recolección de información creados
para tal fin.
Resultados
A partir de los resultados obtenidos de las diversas
actividades de recopilación de información, se pueden
señalar los siguientes hechos que afectan el nivel de
competitividad del municipio y sustentar la necesidad de
un enfoque diferente de desarrollo a través del modelo
de clúster y sus implicaciones para su implantación; se ha
considerado dos áreas importantes: sectores directamente
relacionados y sectores de apoyo y conexos
ÁREA DE SECTORES DIRECTAMENTE RELACIONADOS
Subárea Hallazgos
Hospedaje
Nahuizalco no cuenta actualmente con ningún hostal o casa de huéspedes, pues
durante este tiempo ha sido un lugar de paso, que atrae solo por las artesanías, como
parte de la “Ruta de las Flores”.
Relación con tour
operadores
La relación con los tour operadores no es estratégica, ya que no hay promoción de los
lugares turísticos que posee el municipio, y esa es la razón por la cual solo se ve como
un lugar donde comprar artesanías y de visita al primer municipio que conforma la
“Ruta de las Flores”.
Condiciones de
transporte
El transporte para los lugareños y público en general es limitado. Solo hay una ruta de
buses, la 53 D, que hace su recorrido de Sonsonate a Nahuizalco y, además, tiene pocas
unidades. Un grupo limitado de residentes posee su propio medio de transporte.
23
Conformación de Cluster de turismo, prueba piloto en el municipio de Nahuizalco. Sonsonate. El Salvador
Actividades turísticas
Nahuizalco posee una variedad de actividades que son de interés al turista, con lo cual
se demuestra que no solo se reduce a las artesanías. Estas actividades se agrupan en
cuatro categorías denominadas “purezas”: cultural, arquitectónica, natural y artesanal.
Pureza cultural. En términos generales incluye productos de la tierra y ganado y
diferentes cofradías que se desarrollan en fechas determinadas.
Pureza arquitectónica: Toma la riqueza arquitectónica ubicada en el municipio, dentro
de ella se encuentran: iglesia parroquial, ubicada en el centro del municipio, que data
desde el siglo XVIII y la fuente de la plaza central
Pureza natural. Nahuizalco posee lugares naturales muy relevantes, desde la óptica
ecoturística, de las cuales se pueden mencionar algunos: el ecoparque Tatalpa, la
cascada Las Golondrineras, la planta Cucumacayán, las cascadas del Caracol y la poza
Las Monjas.
Pureza artesanal. La principal artesanía de Nahuizalco es el petate con letras de colores.
Otras artesanías que se podrán encontrar son: muebles, libreras, comedores, etc.
En Nahuizalco, además de las cofradías, se cuenta con el “mercado nocturno”, el cual
funciona todos los días de 4:00 a 9:30 p.m.
Nota: Elaboración propia, 2011
ÁREA DE SECTORES DE APOYO Y CONEXOS
Subárea Hallazgos
Relación con el Ministerio
de Turismo
Nahuizalco es objeto de seminarios educativos. El lugar donde se realizan es las
instalaciones del Cedar, con capacidad para cien personas. No posee visita de viaje de
familiarización por parte de la prensa u operadores de turismo.
Promoción del
municipio
Las únicas formas de promoción de Nahuizalco son a través del “boca a boca” de los
visitantes, familiares de los lugareños que residen fuera del municipio y a través del blog,
que lo hace un grupo de personas interesadas en promover Nahuizalco.
Actividades de
promoción
No hay papelería para la promoción del municipio.
24
Conformación de Cluster de turismo, prueba piloto en el municipio de Nahuizalco. Sonsonate. El Salvador
Relación con Corsatur
Corsatur promueve Nahuizalco como parte de la “Ruta de las Flores” y destino de
artesanías
Relación con ONG
En Nahuizalco se reconoce la activa participación para su desarrollo turístico de
instituciones como Fusades, Proesa, Fundación Círculo Solidario, Usaid, PNUD,
siempre orientada al desarrollo de la artesanía y actividades agrícolas (Proesa, 2006).
Asociaciones y
gremiales del sector
En Nahuizalco existen dos asociaciones, las cuales tienen que ver con actividades
específicas del sector. Esta son: Asociación de Pequeños Productores Originarios del
Municipio de Nahuizalco (Asoppmnahui). y la Asociación Cooperativa de Carpinteros
de Nahuizalco (Ascanuhi).
Formación profesional
turística
El nivel educativo de los empresarios es limitado a estudios básicos y de bachillerato,
en algunos casos.
Respecto a la educación para los lugareños en materia de turismo, se destaca que en
Sonsonate se encuentra la Escuela Superior Franciscana Especializada de Agape con
un Técnico en Gestión y Desarrollo Turístico.
En cuanto a formación emprendedora, existe a través de Conamype, la cual es
orientada al desarrollo de las artesanías en cuestiones básicas sobre producción y
administración.
Infraestructura
En relación con la infraestructura vial, ocasionalmente le dan mantenimiento. En
cuanto a la señalización, no hay una correcta ni actualizada.
Sistema financiero
La única representación del sistema financiero en el municipio es Fedecredito, la cual
no posee líneas de crédito para el turismo.
Telefonía
Hay presencia de empresas de telefonía como Claro y operadoras con tarjeta de
prepago, pero solo en el ámbito del casco urbano.
Internet
En el municipio hay acceso a Internet, pero solo en el casco urbano.
25
Conformación de Cluster de turismo, prueba piloto en el municipio de Nahuizalco. Sonsonate. El Salvador
Discusión
La actividad turística en Nahuizalco no es tan dinámica
como en otros municipios aledaños a la “Ruta de las Flores”.
Sobre esa base se concluye lo siguiente:
- Para las actividades relacionadas con la atención
del turista, se registra una tendencia, al nivel de
competitividad, de suficiencia, en las que se observa
que existe una clara evidencia de desarrollo de la
actividad, que puede ser un atractivo si se le da un
mayor fomento.
- Los sectores de apoyo y conexos registran un
nivel de competitividad de insuficiencia, ya que
algunos hechos confirman que existe insipiencia
en el desarrollo de ciertas actividades. No
obstante, al darle una mejor atención, información
y participación pueden contribuir de manera
significativa al desarrollo de la actividad turística.
- Se puede afirmar categóricamente que Nahuizalco
es un municipio con un desarrollo latente, pero que,
por la falta de una cohesión y coordinación entre
los sectores que apoyan la actividad turística, no se
ha logrado explotar el potencial que posee, como
son las riquezas cultural, natural y arquitectónica,
principales fortalezas del municipio en el ámbito
de la actividad turística (especialmente las tres
últimas), puesto que se ha inclinado más al fomento
de la actividad artesanal, sector que cada vez es
más competitivo y de difícil comercialización, que
además evidencia la falta de un enfoque asociativo
efectivo.
Seguridad
A pesar de hechos violentos a mediados del 2011, existe un programa a través de
la USAID y la alcaldía del municipio denominado “Seguridad contra la violencia”
(proyecto del RTI). Se cuenta con la presencia de la PNC en el municipio, pero no a
de Politur, que está solo en el centro de Sonsonate.
Salubridad
Las condiciones de salubridad del municipio son deficientes, lo que no lo hace un sitio
en el cual se desee permanecer por mucho tiempo.
Nota: Elaboración propia, 2011.
- Es importante destacar que para llegar a un diagrama
de la composición e interacción del cluster debe
existir un desarrollo, es decir, desde el nivel básico
hasta el de mayor adelanto, ya que, al considerar
la evaluación del nivel de competitividad, hay
muchos sectores de apoyo y algunas actividades
directamente relacionadas con el turista que están
en fase incipiente o de interacción nula. Es así como
el desarrollo del cluster comprende una serie de
cuatro fases por las cuales el cluster debe pasar,
de acuerdo con el especialista de la Cepal Martine
Dirven (2006), a fin de garantizar su evolución (ver el
gráfico).
Figura: Fases de desarrollo del clúster
Nota: Elaboración propia, 2011. Basado en conferencia de Martine Dirven (2006).
26
Conformación de Cluster de turismo, prueba piloto en el municipio de Nahuizalco, Sonsonate, El Salvador
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27
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 27-30, ISSN: 2218-3345
Turismo como estrategia
de desarrollo local.
Caso: San Esteban Catarina.
El Salvador
Carolina Elizabeth Cerna
carolina.cerna@utec.edu.sv
Larissa Martí
José Manuel Bonilla Alvarado
Escuela de Negocios, Universidad Tecnológica de El Salvador
Resumen
San Esteban Catarina es un municipio en el paracentral
departamento de San Vicente, en El Salvador, muy
peculiar por la marcada fuerza que posee en el arte, la
cultura, las artesanías y muchos elementos de identidad,
cuya peculiaridad es única en aquel departamento. Lo
anterior lo hace muy característico en la zona, donde
además se levanta majestuoso el volcán Chichontepec,
en cuyas faldas se desplaza armoniosamente el valle
Jiboa, los cuales se ven de una forma espectacular desde
este municipio.
Lo natural y lo cultural se funden en completa armonía
para haber trabajado con agudeza técnica este tema,
que abordó lo indispensable para obtenerlineamientos
para un desarrollo local a través del turismo en este
municipio.
Se hace alusión a los hallazgos más importantes y a
las propuestas técnicas, acordes a esos hallazgos, y a
las principales posturas de las tendencias turísticas,
las cuales tienen su operatividad de manera general en
cuatro programas, denominados así no por formar parte
Abstract
San Esteban Catarina is a municipality in the paracentral
department of San Vicente, in El Salvador, with a very
strong force market by art, culture, crafts and many
identity elements, whose peculiarity is unique in
that one department. The previous elements makes
very characteristic in the zone, where in addition
Chichontepec volcano raises majestic, in whose
skirts the Jiboa valley moves harmoniously, creating a
panoramic and spectacular from this municipality.
Nature and culture view fusion is achieved complete
harmony subject, that it approached the indispensable
thing to obtain strategically for a local development
through tourism in this municipality.
The technical proposals, come from to those fi ndings
and the main positions of the tourist tendencies; This a
strategy of four programs emerge the proposal is four as
divided in programs a way to group actions, which could
denominate projects.
28
Turismo como estrategia de desarrollo local. Caso: San Esteban Catarina. El Salvador
Introducción
San Esteban Catarina comprende un casco urbano además
de seis cantones y celebra sus fi estas patronales en honor
de San Esteban Mártir, Santa Catarina, Santa Cecilia (patrona
de los músicos) del 10 al 27 de diciembre.
En San Esteban Catarina nacieron el educador Marcelino
García Flamenco, el exarzobispo de San Salvador Arturo
Rivera y Damas, y los músicos Esteban Servellón, Cecilio
Orellana, Domingo Santos y Gabriel Melara.
San Esteban Catarina es conocido en El Salvador como “el
pueblo de la melcocha, la música y el globo”.
El municipio tiene una extensión de 78.14 km² y una
población de 5,998 habitantes, de acuerdo a una estimación
de 2007 y se encuentra ubicado a una altura de 770 metros
sobre el nivel del mar.
El municipio cuenta con una raigambre histórica, artística,
artesanal y cultural que muy pocos municipios poseen.
Una tradición musical única, con una escuela de música;
es la cuna del globo artesanal y, como si fuera poco, es el
municipio donde de manera artesanal se elabora la confi tería,
sobre todo las famosas “melcochas”. Estas características
están allí y subyacen en la población, la que al parecer no se
da cuenta del valor incalculable que posee, sobre todo en el
plano turístico. Esto es lo que la investigación trató en casi
nueve meses de presencia en el municipio, con el respaldo
del turismo cultural como tipo de turismo, así como también
de las teorías del desarrollo local y de la cultura como
base para el desarrollo. Estas tres posiciones teóricas, se
entrecruzaron en el desenvolvimiento investigativo con una
enfoque turístico en lo sociocultural, sin perder en ningún
momento la parte del benefi cio económico del turismo; lo
que hace que la propuesta, si bien es cierto es netamente
técnica, recoge la certeza de un desarrollo local sostenible
e integral.
Metodología de la investigación
La investigación se realizó con las modalidades tanto
cualitativa como cuantitativa. Se considera cuantitativa
por la utilización de las técnicas, como la encuesta y
el cuestionario como instrumento y, además, por los
aspectos tan diversos de índole teórico abordados. En el
mismo orden que el anterior, en la modalidad cualitativa,
se impulsó abordar el tema, muy poco explorado como
tal, profundizando en las características que identifi can
y hacen ser y parecer al municipio, así como penetrar en
aquellas más representativas de su población. Dicho de otra
manera, la investigación no fue la tradicional “recopilación”
de encuestas o las simples entrevistas. Se puede ver un
detenimiento mayor; sin menospreciar estas técnicas, se
abordaron otras de índole cualitativa como el taller y el
grupo focal, en los cuales se detectaron las expectativas,
temores, puntos de vista de los sujetos en estudio. Un
registro fotográfi co y audiovisual recoge de forma evidente
el trabajo realizado
de un plan preconcebido, o prediseñado, si no, por el
contrario, para impulsarlo a través de ellos.
De igual forma, la propuesta, dividida en programas
es una manera de agrupar acciones, que podrían
denominarse proyectos, los que sin lugar a dudas
pertenecen congruentemente a un solo programa.
Palabras clave: Turismo, desarrollo rural, artesanías,
cultura y arte, desarrollo local, productos artesanales,
San Esteban Catarina.
Key Words: Tourism, rural development, crafts, culture
and art, local development crafts, San Esteban Catarina.
29
Turismo como estrategia de desarrollo local. Caso: San Esteban Catarina. El Salvador
Principales hallazgos relativos
a las inclinaciones de los pobladores
hacia el turismo
La encuesta arrojó el grado de conocimiento de la
población hacia el desarrollo partiendo del turismo, de
las potencialidades turísticas que el municipio posee, así
como también de aquellos recursos de los que dispone;
por ejemplo, el 94% de las personas representantes de
las comunidades que conforman el municipio, consideran
que este tiene atractivo para los turistas, y un 6% que lo
considera no muy atrayente para el turista. El mismo
porcentaje (el 94%) es de la opinión de que los elementos
de identidad del municipio como la melcocha, los globos
y la música son valiosos para la cultura y el turismo. Esto
demuestra el convencimiento de que el turismo es una vía
para el desarrollo.
La investigación con la modalidad cualitativa, a través de
los talleres y los grupos focales, proporcionó discusiones
y conclusiones interesantes, como la definición de los
papeles en cuanto a la participación en la formulación de
planes turísticos y culturales en el municipio; papeles claros
como el de las autoridades locales como pioneros o líderes
en la materia de desarrollo local. El liderazgo convencional
y tradicional que estos tienen en el municipio es muy
determinante a la hora de la planificación.
Lo anterior, aparte de tener un claro panorama para las
propuestas, demuestra que cuando la población es tomada
en cuenta, para proyectos a su beneficio, puede participar
de forma espontánea y consciente.
No se encontró temores de carácter negativo en los sujetos
en el estudio. Por el contrario, los procesos de participación
de los sujetos en la investigación siempre mostraron un
valioso interés por su propio desarrollo, por el impulso
ordenado y planificado del turismo como clave para el
desarrollo del municipio a partir del arte y de la cultura.
Discusión
En total armonía con los postulados de la teoría abordada
y utilizada en la investigación, la propuesta técnica es
factible de ejecutarse, toda vez que se ponga el empeño y
la voluntad necesarias, sobre todo por parte de autoridades
municipales locales, puesto que los pobladores a través de
sus líderes han manifestado y demostrado que su desarrollo
es factible por medio de su participación activa en las
decisiones que atañen a su desarrollo.
Una propuesta técnica
capaz de ejecutarse
La investigación, a manera de planteo de resultados,
expone la realización de cuatro grandes programas, los
cuales podrán formar parte de un solo plan de desarrollo
turístico. La propuesta de manera general se divide en
cuatro programas, denominados así no por formar parte de
un plan preconcebido o prediseñado, si no, por el contrario,
para impulsarlo a través de ellos.
Programa 1
“Creación y fortalecimiento de un comité de turismo local,
con el apoyo delos gobiernos tanto municipal como central”.
Se concibe este programa indispensable para la ejecución
del resto de ellos. Y como su nombre lo indica, destaca la
participación de las personas en su propio desarrollo desde
sus inicios. Lo más destacado en este punto, como labor de
este comité, es la creación del museo local de antropología.
Programa 2
“Reestructura, rediseño y lanzamiento de la Escuela de
Música”. Es una institución ya creada en el municipio, y la
que le proporciona ese criterio único..
Programa 3
“Vinculación del turismo con los procesos artesanales
de las artesanías de globos y la melcocha”. El municipio
cuenta —como ya se ha expresado— con estos procesos
artesanales propios, y este programa los recoge para su
impulso a través del turismo.
Programa 4
“Reacomodo y mejoramiento de la infraestructura física
del casco municipal, nomenclatura y señalización con fines
turísticos”. De manera integral, este programa retoma
30
Turismo como estrategia de desarrollo local. Caso: San Esteban Catarina. El Salvador
elementos colaterales que contribuyen al desarrollo
turístico, y tiene que ver con todo lo que la población puede
ofrecer en materia turística.
Referencias
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Francia,
31
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 31-37, ISSN: 2218-3345
Migración y ruralidad:
el caso del cantón Los Lagartos
1
Elsa Ramos
eramos@utec.edu.sv
Dirección de Investigaciones Universidad Tecnológica de El Salvador
El Salvador en la actualidad puede ser considerado como
un país de migraciones a partir de tres hechos: en primer
lugar, porque más de un tercio de su población reside fuera
de las fronteras nacionales. Así, de acuerdo con los datos
proporcionados por el Mapa de las migraciones salvadoreñas
(PNUD, 2011), son 2.950.126 salvadoreños diseminados
en diferentes partes del mundo, y, de ellos, solo en los
Estados Unidos de Norteamérica (EE.UU.) residen 2.587.767.
En segundo lugar, porque cuenta con un considerable
número de personas migrantes residiendo en el país, y que
en su mayoría son de origen nicaragüense, hondureño y
guatemalteco, y, por último, a través del territorio nacional
transitan anualmente cientos de migrantes de diferentes
nacionalidades. Otro hecho no menos importante es
que anualmente el país recibe miles de salvadoreños
deportados, tanto vía aérea como terrestre. Así, de acuerdo
con datos del Ministerio de Justicia y Seguridad, en el año
2010 fueron deportadas 18.905 personas vía aérea y 10.265
vía terrestre provenientes de México, que es la principal ruta
para llegar a los EE.UU.; y para el año 2011, de acuerdo con
“Departamento 15” de La Prensa Gráfi ca, vía aérea fueron
deportadas 17.062 personas, 10% menos que en el 2010.
Importante es señalar que tanto las personas deportadas
vía aérea como terrestre inician a los pocos días de su
1
En este artículo se realiza una serie de aseveraciones en cuanto a la interrelación, los procesos de desarrollo económico del país y las dinámicas
migratorias internas y externas, las cuales se deben de ver, por el momento, más que todo como una hipótesis de trabajo, que se desarrollará en la
investigación en curso, en el 2012, titulada: “Historia de las migraciones en El Salvador”.
Resumen
En este artículo se presenta una retrospectiva sobre la
interrelación entre las trasformaciones en la agricultura
y los procesos migratorios internos y externos para
desembocar en los cambios ocurridos en el cantón Los
Lagartos como producto de las migraciones, reforma
agraria y la aplicación del neoliberalismo en el país.
Palabras clave: Migraciones, desarrollo local, desarrollo
rural, desarrollo económico y social, reforma agraria,
cantón Los Lagartos, .
Abstract
This article presents a retrospective on the
interrelationship between the evolution changes in
agriculture and the migratory processes internal and
external that led to changes occurred happened in the
canton Los Lagartos as a product of migration, agrarian
reform and the implementation of neoliberalism in the
country.
Keywords: Migration, local development, rural develop-
ment, economic and social development, rural land
reform, Canton Los Lagartos.
32
Migración y ruralidad: el caso del cantón Los Lagartos
ingreso al país un proceso de remigración hasta que logran
llegar a los EE.UU.
Las migraciones (emigración e inmigración) en el país
no son nuevas. La población salvadoreña, en el período
precolombino, fue conformada paulatinamente a través
de diferentes corrientes migratorias venidas del norte,
especialmente de lo que hoy es México. El arribo de las
huestes que llegaron de la España del siglo XVI implicó la
conquista militar e inmediata colonización. Así, el actual
territorio salvadoreño se pobló con la población española
propiamente dicha y de judíos, moriscos y población africana
(Ramos, 2000). A finales del siglo XIX y principios del XX
ocurre de nuevo una oleada importante de inmigrantes de
origen europeo con la introducción del café a gran escala
en el país y población del Cercano Oriente (palestinos
y libaneses, principalmente), que se les conocieron
popularmente como “turcos”, pues portaban pasaportes
de Turquía, ya que esos países en ese momento formaban
parte del Imperio turco (Chinchilla, 2011). La inmigración
ha proseguido a lo largo del siglo XX, pero no ha tenido
la misma intensidad que en los períodos ya mencionados.
No es sino hasta principios del siglo XXI y sobre todo con
el proceso de dolarización, que se ha producido en el país
el ingreso de nicaragüenses, hondureños y guatemaltecos,
principalmente.
En cuanto a los movimientos internos de la población
salvadoreña, han sido constantes en los diferentes
momentos históricos y han obedecido a razones de tipo
económico, político, social y medioambiental. Al inicio del
período colonial, cuando los españoles se asentaron en
el actual territorio salvadoreño, al no encontrar minerales
preciosos, se vieron obligados a sobrevivir de la agricultura,
encontrando que el cacao cultivado por la población indígena
bien se podría transformar en un producto de exportación
de donde adquirir divisas y sustentar la economía de ellos;
pero al no conocer los secretos de este cultivo (Browning,
1999), lo dejaron enteramente en manos de sus cultivadores
nativos, ello implicó que la población indígena no fue
removida de sus asentamientos tradicionales. Sin embargo,
el comercio del cacao muy prontamente cayó por diferentes
razones, y los españoles se vieron obligados a reemplazar el
cacao por otro cultivo que les rindiera mayores beneficios
económicos. Ese producto de sustitución fue el añil.
Con el cultivo del añil, para fines de exportación, la situación
de la población indígena cambió, ya que el cultivo de esta
planta requiere mayor cantidad de mano de obra temporal
durante la cosecha y extracción del tinte, y permanente
para darle mantenimiento a la plantación antes de levantar
la cosecha. Lo anterior condujo a que se estableciera
un régimen de trabajos forzados para las comunidades
indígenas circundantes a las haciendas añileras. El resultado
a los pocos años fue una grave escasez de mano de obra
(Browning, 1999), pues se produjo una gran mortandad
de hombres producto de las condiciones insalubres que
producía el bagazo del añil ya procesado, por inanición y
extenuación por lo duro de las jornadas laborales. También
murieron de hambre muchas mujeres y sus hijos, producto
de que sus esposos, al verse obligados a trabajar en las
haciendas añileras, ya no trabajaban las milpas y frijolares,
dieta básica de la población indígena. La explotación del añil
es un ejemplo claro de cómo los cambios en la agricultura
cambian las instituciones económicas (se pasa de la
encomienda a haciendas privadas), y también la migración
de la mano de obra de sus lugares nativos a estas nuevas
instituciones económicas, o sea, es la demanda de mano de
obra la que obligó a una migración interna forzada.
Durante la presidencia de Rafael Zaldívar (1876-1884/1884-
1885), se realiza la mayor cantidad de medidas legales
para introducir el cultivo de café a gran escala en el país y
para sustituir el cultivo de añil, que ya no era rentable pues
su precio había declinado a escala internacional. Quizá la
medida más importante fue la ley de extinción de las tierras
ejidales y comunales (1881-1882) para consumar el proyecto
del café. La Ley de extinción de tierras ejidales y comunales
en la práctica fue una reforma agraria que benefició a los
grupos mas favorecidos de la sociedad salvadoreña de
aquel entonces.
La introducción del cultivo del café a gran escala en el país
tiene una importancia histórica especial, pues transformó a
la sociedad salvadoreña (Browning, 1999; Dalton, 1979; Arias,
2011): se implantó un modelo capitalista tardío agrario; una
economía monoexportadora; surge la oligarquía cafetalera,
que más tarde el poeta Roque Dalton de forma icónica
llamará las “catorce grandes familias”. Se creó todo un
sistema de leyes coercitivas (en contra de la vagancia) para
asegurar tener la suficiente mano de obra que trabajara en
33
Migración y ruralidad: el caso del cantón Los Lagartos
los cafetales de forma permanente y no permanente en la
temporada de la corta del café; se quemaron día y noche los
bosques para poder sembrar el café y los árboles de sombra
necesarios para poder obtener la preciosa cosecha. En
cuanto a la mano de obra, esta se debió adaptar a cosechar
en la pequeña parcela, propia o alquilada, los granos básicos
para la subsistencia y trabajar en las cortas de café, lo que
los obligó a emigrar de forma temporal o permanente a
diferentes municipios, de acuerdo con las necesidades de
la producción del café.
Otro punto importante en la evolución económica del país y
que significó grandes cambios en el sector agrario nacional
y que implicó la necesidad de emigrar de la población a
escala interna y externa fue la finalización de la Segunda
Guerra Mundial, cuando se empieza a implantar el modelo
de sustitución de importaciones, impulsado por la Comisión
Económica para América Latina (Cepal), que propulsaba
que, a partir de la diversificación agrícola, se pudiera dar un
proceso de acumulación de capital suficiente para invertir
en la industrialización de los paises latinoamericanos. Casi
a la par de esta diversificación agrícola, y para darle curso
al proceso de industrialización y de integración económica
centroamericana, se dio el proceso de creación del Mercado
Común Centroamericano (MCCA).
Así, los gobiernos de El Salvador de ese período se
adhirieron a dicha política y se inició la diversificación
agrícola, introduciendo el cultivo a gran escala de algodón y
caña de azúcar, siendo las planicies costeras las tierras más
apropiadas para dichos cultivos, dando inicio a la expulsión
de aquella población, que a su vez había inmigrado a esos
lugares al no encontrar en dónde vivir al ser expulsados
de sus lugares de origen desde la expropiación de las
tierras ejidales y comunales y otros sucesos vinculados a
persecuciones políticas a simpatizantes de los movimientos
opositores. Estos grupos humanos habían encontrado un
lugar en donde trabajar en esas tierras ociosas por no poder
sembrar en ellas cafetales. Se inicia así, de nuevo, un proceso
de inmigración del campo a la ciudad, especialmente a San
Salvador, en donde se habían instalado fábricas nacionales
y extranjeras. Mucha de la población, al no encontrar
trabajo en el país, decidió a emigrar hacia Honduras
principalmente a trabajar en las grandes plantaciones
fruteras o a roturar tierras vírgenes en aquel país. De nuevo,
las transformaciones económicas en el agro, y esta vez
en el contexto de industrialización, dio lugar a un proceso
de movilidad humana a escala interna y hacia afuera. La
emigración hacia Honduras, con los años, se transformará
en un suceso trágico en la historia de estos dos países
hermanos que desembocó en la llamada “Guerra de las cien
horas” (14 de julio de 1969), que dio lugar a la expulsión de
miles de salvadoreños del territorio hondureño.
El siguiente período de intensa movilidad humana en el país
es a partir de la década de los 70 y 80, o sea, el período de
preguerra y de guerra, cuando la represión al movimiento
social promovió grandes desplazamientos poblacionales del
campo a los cascos urbanos; empezaron a crecer de forma
desordenada y aumentar los cinturones de miseria alrededor
de las cabeceras departamentales. El traslado de estos
grupos humanos a los alrededores de los centros urbanos
no los liberó de la persecución política, por lo que optaron
por la emigración extraregional en calidad de refugiados
políticos; huyeron en primer lugar a Honduras, Nicaragua,
Guatemala, Costa Rica, Panamá, México y los EE.UU. En
el período mencionado, la migración extraregional de
salvadoreñas y salvadoreños es proveniente principalmente
de las zonas rurales, y prevalece una migración masculina
(PNUD, 2005).
Como se observa en los párrafos anteriores, los grandes
hitos en el proceso de desarrollo económico del país
incidieron en los movimientos o migraciones internas
de la población trabajadora, o sea, las transformaciones
económicas propias del país incidieron para que se dieran
movimientos migratorios internos, ya fueran estos por la
fuerza bruta o a través de leyes, y, eso, a su vez trasformó
la ruralidad del país. Pero a partir de las décadas de los
70 y 80 del siglo XX, cuando se inicia un proceso masivo
de migración internacional de personas salvadoreñas
a varias partes del mundo, pero principalmente hacia
los EE.UU. Se empieza a observar que la ruralidad
salvadoreña ya no sólo se transforma por los cambios
económicos internos, sino que también bajo el influjo del
fenómeno social de las migraciones internacionales de la
población salvadoreña.
34
Migración y ruralidad: el caso del cantón Los Lagartos
Es bajo este contexto precisamente que se analiza
en el presente artículo las transformaciones que ha
experimentado la comunidad del cantón Los Lagartos.
2
El cantón Los Lagartos está ubicado en el municipio de San
Julián, del departamento de Sonsonate. En la actualidad no
se cuenta con datos estadísticos certeros que indiquen la
cantidad exacta de pobladores de dicho cantón. De acuerdo
con testimonios de informantes claves, se calcula que tiene
entre 9 y 10 mil habitantes.
El cantón Los Lagartos está dividido en los siguientes
caseríos:
- Casco Hacienda,
- Casa Blanca,
- Camándula,
- Huascalío,
- Salitrillo,
- Cruzado,
- Cujinal,
- Los Ángeles,
- El Olvido (I y II).
- Parcelación San José, y
- Las Mercedes.
3
Este cantón tiene larga data de existir, las primeras
referencias históricas que se tienen señalan que ya existía
en el siglo XVII con el nombre de Hacienda San Antonio Los
Lagartos (Escalante Arce, 2011). La vocación de las tierras
de Los Lagartos siempre ha sido la agricultura y la ganadería.
En los diferentes períodos históricos se han criado animales
de tiro, ganado vacuno; ganado menor, y se ha cultivado añil,
granos básicos, zacate vetiver para la industria perfumera
europea, café y caña de azúcar, o sea, la economía local se
ha adaptado a los cambios económicos generales ocurridos
en el país.
Esta comunidad creció y se desarrollo en el siglo XX bajo las
reglas de una hacienda cafetalera, y más tarde cafetalera
y cañera, en donde el jornalero que se portaba bien era
admitido como colono de la hacienda, recibiendo así su lote
en donde podía construir su vivienda. El patrono prohibía
estrictamente hacer desórdenes y consumir bebidas
alcohólicas. Para mantener el orden contaba con un puesto
de la Guardia Nacional.
La hacienda Los Lagartos fue muy prospera, a tal punto,
que en el periodo de la corta de café y la zafra de caña, el
dueño de la hacienda se veía en la necesidad de contratar
jornaleros de fuera de la hacienda para poder salir avante.
Signo de esa prosperidad es que contaba con su propio
beneficio de café e ingenio de azúcar. Sin embargo, en la
década de los 70 del siglo XX, al parecer la hacienda tuvo
contratiempos económicos, a tal punto que tanto el ingenio
azucarero como el beneficio de café dejaron de funcionar. Es
en ese contexto que, en 1980, se da el proceso de reforma
agraria.
El proceso de reforma agraria inicia su desarrollo en el
preludio de la guerra civil. Así, el 5 de marzo entra en vigencia
el Decreto N°. 153 así como el Decreto N°. 154, que ordena
la intervención de propiedades mayores de 500 hectáreas
(Prisma, 1998). Este decreto afectó a la hacienda Los
Lagartos, que fue transformada en cooperativa, que hoy se
llama Asociación Cooperativa de Producción Agropecuaria
Los Lagartos de R.L. Según Alegrett, la reforma agraria en El
Salvador fue inicialmente una de las reformas no socialistas
más amplias, y se la puede considerar como una reforma
agraria marginal pues su objetivo era disminuir la presión
social, moderar el sistema latifundista sin aniquilarlo.
El proceso de reforma agraria en el país no contempló,
dentro de los decretos que la echaron a funcionar, que era
necesario implantar un proceso de capacitación para los
campesinos que de forma intempestiva se transformaban en
cooperativistas, no se diseñaron programas de capacitación
en administración del nuevo ente económico y tampoco
se diseñaron planes crediticios para la compra de semillas,
maquinarias y demás. Todo lo anterior desembocó en que
un gran porcentaje de cooperativas cayeran en mora, y ese
fue el caso de la cooperativa de Los Lagartos, la cual hasta
2
Todos los datos que se utilizan sobre el cantón Los Lagartos son producto de la investigación Mujer y remesas: administración de las remesas, aún no publicado.
3
En algunos informes se incluye como parte del Cantón Los Lagartos la comunidad El Milagro.
35
Migración y ruralidad: el caso del cantón Los Lagartos
el año 2011 canceló la deuda millonaria que había adquirido
con un banco privado. Este hecho contribuyó para que la
cooperativa perdiera su capacidad productiva y a la vez
dejara de generar empleos suficientes para la comunidad
del cantón.
En general, en el país, al finalizar la década de los 80 del
siglo XX, se inició a aplicar medidas de tipo neoliberal.
Entre esas medidas se puede considerar que se dejaron
1978 1990 2006
Agropecuario
29,0 17,4 11,0
Industria
28,4 25,6 27,8
Servicio
42,6 57,0 62,2
Nota: Tabla propia, en base a gráfica de César Alvarado.
de aplicar políticas sectoriales; el sector de la agricultura
fue uno de los más afectados (Rivera, 2006). En la tabla 1,
que a continuación se muestra, se puede observar cómo el
porcentaje de participación de la agricultura en la economía
nacional ha disminuido. Así, si para el año 1978, cuando aún
no se había implantado la reforma agraria y las medidas
neoliberales, la contribución de la agricultura alcanzaba un
29%, pero ya para el año 2006 esa participación se redujo a
apenas un 11%.
Tabla 1.
Estructura productiva de El Salvador (%)
(1978, 1990, 2006)
Tabla 2.
Estructura del PIB en El Salvador (%)
Primario Secundario Terciario Total
1997
8,7 16,1 75,2 100
1998
7,5 16,1 76,4 100
1999
5,7 16,3 78,0 100
2000
10,1 28,2 61,7 100
Promedio 8,0 19,2 72,8 100
Fuente: FAO. En: http://www.fao.org/DOCREP/003/Y2784503.htm
En la tabla 2 también se observa que la contribución del
sector agrícola en el PIB ha mermado sustancialmente, de
tal forma que, si para el año de 1997 la agricultura contribuía
con un 8,7%, para el año 2000 se redujo a un 8%. Estas dos
tablas reflejan de forma visible la transformación de la
economía salvadoreña en las últimas décadas, lo cual a su
vez deja claro también que el país se ha transformado en
una economía terciaria. En la tabla 1, para el año de 1978,
el sector terciario en porcentajes sumaba el 42,6% y para el
año 2006 se elevó al 62,2%.
La falta de apoyo gubernamental a la agricultura trajo consigo
serios desbalances en la economía nacional. Por un lado,
se cerraron fuentes de trabajo en el sector agropecuario,
y por otro, crearon una insuficiencia alimentaria. Esto
implica que los precios de los productos de la canasta
36
Migración y ruralidad: el caso del cantón Los Lagartos
básica al consumidor sufrieron un alza, lo que empeoró las
condiciones de vida de la población en general. Esos dos
elementos se han convertido en causas que han impulsado
a la población salvadoreña a emigrar.
En el contexto que se ha planteado, al observar la historia
migratoria del cantón Los Lagartos no es reciente. Según
Echeverría (2010), el primer emigrante que se conoce
partió del cantón en 1959; se masifica en el período de la
guerra civil (1980-1992), y a la fecha continúa. De acuerdo
con lo expresado por el alcalde de San Julián, el señor
Gabriel Serrano, al realizarle una entrevista, considera que
actualmente un 35% de la población del municipio está
fuera del país. Según los datos de Echeverría (2010), solo del
caserío Salitrillo, el 21% de la población está fuera del país.
Las causas principales que están generando la migración en la
comunidad son la falta de empleo para todos los segmentos
de la población, aunada a la falta de oportunidades para los
jóvenes.
Se considera que los problemas de la cooperativa, entre
ellos los económicos, recién en el año 2011 lograron
saldar la deuda agraria que tenían con un banco; la falta de
capacitaciones para sus miembros; la falta de modernización
en los cultivos, prosiguen sembrando caña de azúcar
principalmente; café pero en menor escala, pues la caída
de los precios a escala internacional, por la introducción del
café vietnamita (Lang, 2001), los desmotivó a sembrarlo a
gran escala ,y se puede observar que hay grandes plantíos
a los que ya no se les da mantenimiento, y se prosigue
cultivando granos básicos; tampoco hay esfuerzos para
reconstruir el beneficio y el ingenio; probar los cultivos
orgánicos y otros. La dependencia de la directiva de las
decisiones del gerente de la cooperativa y del ingeniero de
enlace de la Central Izalco y otras hace que la cooperativa
no funcione, no genere empleos en cantidad y calidad,
que no haya diversificación de los empleos; no ofrecen
programas de becas para los adolescentes, para emplearlos
en las diferentes necesidades de la administración, la
producción en la cooperativa y otros. Lo anterior ha obligado
a la comunidad a buscar empleo fuera de la cooperativa.
Al principio, en los municipios cercanos; después, fuera de
Sonsonate, o sea, un proceso de inmigración; y al agotar
todas esas posibilidades emprenden el camino hacia los
EE.UU. o Canadá, que es en donde se encuentra la mayoría
de lagartenses.
El proceso constante de migración crea el otro lado de la
moneda de las migraciones, que son las deportaciones.
Relata un informante clave que trabaja en un programa de
personas migrantes que son deportadas entre quince y veinte
personas mensualmente; estas regresan al cantón, se toman
un breve descanso y emprenden de nuevo la ruta. O sea, se
está produciendo el fenómeno de la remigración, que ya es
una constante entre todas las personas migrantes a escala
nacional. Durante el tiempo de trabajo en la comunidad
del cantón los Lagartos, solo se tuvo conocimiento de tres
personas deportadas que no habían emprendido el viaje de
regreso porque, al parecer, habían cometido faltas graves y
tienen restringido su ingreso a territorio estadounidense, so
pena de afrontar penas mayores.
Al observar cómo se está desarrollando el fenómeno de las
migraciones en la comunidad de Los Lagartos, vale la pena
también cuestionarse: ¿Está surgiendo una comunidad
transnacional?
La respuesta sería afirmativa en un estado incipiente, pero
en pleno desarrollo. En ese sentido, se puede mencionar
que existen familias cuyos miembros están divididos por
residencia entre El Salvador y EE.UU.; entre Canadá y El
Salvador. Se está hablando de familias transnacionales, con
doble nacionalidad, con miembros nacidos en cualquiera
de los tres países mencionados. Aparte de las remesas
familiares, se reciben las remesas sociales, que estarían
representadas en el envío de regalos como teléfonos
celulares, cámaras filmadoras, ropa, zapatos, bisutería,
electrodomésticos y otros. Las comunicaciones se realizan
vía teléfono fijo, o teléfono móvil; y con la instalación de
ciber cafés en la comunidad ya se están comunicando por
chat y Skype. En parte de esa comunidad transnacional
en desarrollo, se puede mencionar el surgimiento de
asociaciones de lagartenses en el exterior y el envío de
remesas comunitarias. Ejemplo de las asociaciones en
el exterior es la Asociación “Los Lagartos Unidos”. Estas
asociaciones están al pendiente de las necesidades más
urgentes de la comunidad, y se ayuda. Así, por ejemplo,
cuando ocurrieron los terremotos del 2001 se recibió ayuda
37
Migración y ruralidad: el caso del cantón Los Lagartos
de emergencia para las personas damnificadas. Más tarde
contribuyeron a la construcción de la iglesia de la parroquia
San José los Lagartos, que quedó completamente destruida.
Cada fin de año se realiza una celebración dedicada a las
personas adultas mayores en donde se les brinda una cena
acompañada de una pequeña aportación monetaria como
una especie de aguinaldo. Han colaborado en la instalación
del centro infantil de nutrición y en la celebración del Día
del Niño en el centro educacional “Eugenio Aguilar”. Todos
estos elementos mencionados están cambiando a la
comunidad, se están estableciendo nuevos vínculos, nuevas
tradiciones que no existieran si no fuera por la existencia de
la comunidad organizada de lagartenses en el exterior.
En conclusión, se podría afirmar que las grandes
transformaciones sociales y económicas, especialmente en
el sector agropecuario, que han sido la columna vertebral
de la economía en casi toda la historia nacional, han sido
detonantes tanto directos como indirectos de las diferentes
corrientes migratorias internas y externas, que las
comunidades con altos índices de migración están siendo
transformadas por las migraciones, y, por ende, se puede
afirmar que se están transnacionalizando.
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38
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 38-49, ISSN: 2218-3345
La violencia social delincuencial
asociada a la salud mental
en los salvadoros
José Ricardo Gutiérrez Quintanilla
ricardo.gutierrez@utec.edu.sv
Dirección de Investigaciones.
Universidad Tecnológica de El Salvador
Resumen
El presente estudio tiene como objetivo general
determinar si existe una relación de la violencia social
delincuencial con la salud mental en la población
salvadoreña. Para ello se operacionalizó y construyó
un instrumento que midiese el estrés y la ansiedad
delincuencial, como indicadores de afectación de la
salud mental en la población víctima de la violencia
delincuencial. En el estudio se utilizó un muestreo
probabilístico por conglomerados a escala nacional en
una muestra de 1.143 personas, de estas 605 (52,8%)
son mujeres y 538 (47,1%) son hombres. El grupo de
edad mayoritario está entre 26 a 35 años (26,8%). Es
un estudio que puede ser tipifi cado como multimodal
(Hernández, Fernández y Baptista, 2006). También
podría nominarse ex post facto (Montero y León, 2007),
con un diseño retrospectivo y transeccional. Las técnicas
utilizadas para la recolección de información fueron la
encuesta y la entrevista en profundidad. Se construyeron
y validaron para medir las variables del estudio la Escala
de estrés y ansiedad delincuencial (ESAD) y la Escala
de ambiente familiar (ESAF); se adaptó el Cuestionario
Abstract
This study aimed to determine whether there is a
relationship between social criminal violence and mental
health in the Salvadoran population. For this purpose,
an instrument was built and operationalized so it would
measure the crime stress and anxiety as indicators
of impaired mental health in the victims of criminal
violence. The study used a random, national sample of
1.143 people. Of these 605 (52,8%) were women and 538
(47,1%) were men. The majority age group is between
26 to 35 years (26,8%). The study type is multimodal
(Hernandez Fernandez and Baptista, 2006). It can also
be named ex post facto (Montero and León, 2007),
with a retrospective transversal design. The techniques
used for collecting information were surveys and in-
depth interviews. To measure the variables of the study
of stress and anxiety, the scale crime (ESAD) and the
family environment scale (ESAF) were constructed, and
the General Health Questionnaire, GHQ-12 was adapted
(Golbert, 1970). All these instruments have reliability
and validity in El Salvador. The study reveals that there
is increased incidence of crime stress and anxiety, and
39
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
Introducción
La violencia social delincuencial es defi nida como el contexto
comunitario donde vive una sociedad, caracterizado
por la frecuente presencia de diferentes tipos de delitos
como: homicidios, lesionados, extorsiones, robos, asaltos
y secuestros, cometidos por grupos delincuenciales,
por ejemplo: las pandillas, los narcotrafi cantes, grupos
de sicarios, etc. En general, estos tipos de delitos son
cometidos en las colonias, los barrios, en los autobuses, en
las calles, en las plazas y parques; eventos que con el paso
del tiempo van afectando la estabilidad emocional y mental
de las personas que los experimentan; sus efectos pueden
manifestarse en temor, fobias, insomnio, estrés, ansiedad,
depresión, y en algunos casos llegar a estrés postraumático
y otras alteraciones mentales.
En el año 2009 ocurrieron 4.382 homicidios, mientras que
en el año 2010 hubo 3.985 homicidios (Policía Nacional Civil.
PNC, 2010), siendo la población general salvadoreña víctima
constante del acecho de estos grupos delincuenciales. Es
por ello que el investigador se trazó como objetivo general
determinar si el contexto social delincuencial en que viven
los salvadoreños está relacionado con la salud mental y otras
variables, como el ambiente familiar, el consumo de drogas
y alcohol, entre otras. Este contexto de violencia social
delincuencial en que vive permanentemente la población
salvadoreña motivó al equipo a formularse algunas hipótesis
generales sobre el problema. Entre ellas se tienen: La
violencia social delincuencial es un factor que está asociado
a la sensación de inseguridad y a la pérdida de confi anza
en el sistema”, “El contexto de violencia social delincuencial
está relacionado con los niveles de estrés social de la
población”, “el estrés social delincuencial está asociado
con la ansiedad, la salud mental, la estabilidad emocional
familiar y comunitaria de la población salvadoreña”.
En estudios realizados en la población salvadoreña se ha
encontrado alta incidencia (arriba del 50%) de alteraciones
mentales, como ansiedad, disfunciones sociales y trastornos
psicosomáticos (Gutiérrez, 2010). Estos problemas mentales
fueron asociados a variables sociodemográfi cas como la
edad, el sexo, lugar de residencia (urbano o rural), nivel
educativo, entre otras. En este mismo sentido, en los últimos
cinco años El Salvador ha vivido en un contexto de violencia
social delincuencial que, de alguna forma, podría estar
relacionado con los problemas y la falta de salud mental
que presenta la población. El estrés social que experimenta
la población es el resultado de factores psicosociales
como el desempleo, la falta de oportunidades, la violencia
delincuencial, la insatisfacción de sus necesidades básicas,
que son variables que están vinculadas a la salud mental. En
de salud general, GHQ-12 (Golbert, 1970). Todos estos
instrumentos gozan de fi abilidad y validez en El Salvador.
El estudio revela que existe mayor incidencia de estrés
y ansiedad delincuencial, y pobre salud mental, en
las mujeres y en los residentes urbanos. El modelo
de regresión logística demuestra que la ansiedad
delincuencial en la población salvadoreña es explicada
en un porcentaje importante por las variables: estresor
delincuencial, violencia sociocultural, deterioro de la
salud mental y el sexo de la muestra.
Palabras clave: Salud mental, violencia social delitos,
estrés-ansiedad delincuencial, conducta colectiva,
funcionamiento familiar.
poor mental health in women and urban residents. The
logistic regression model shows that crime anxiety in
the Salvadoran population is explained in a signifi cant
percentage by the variables: criminal stressor, cultural
violence, deterioration of mental health and sex of the
sample.
Keywords: Mental health, social violence crimes, criminal
Stress-anxiety, collective behavior, family functioning.
40
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
consecuencia, los resultados de la violencia delincuencial
podrían estar incrementando en la población salvadoreña
las alteraciones como ansiedad generalizada, temor, fobias,
signos de depresión e insomnio; síntomas que pueden ser
el resultado de la exposición contante a un estrés social
delincuencial. En este estudio se pretende establecer si
existe el estrés social delincuencial, y si está asociado con
indicadores de problemas de salud mental en la población
salvadoreña.
La violencia y la salud mental
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS. 2003), la
prevención de la violencia ha sido un tema prioritario en
los últimos años, de tal manera que debe ser abordada
desde el enfoque de la salud pública, lo que implica un
tratamiento desde diversos ámbitos para reducir sus niveles
de incidencia. Cada año, en el mundo, más de 1.6 millones
de personas pierden la vida de forma violenta y muchas
otras sufren lesiones no mortales como resultado de la
violencia, sea esta autoinfligida, interpersonal o colectiva.
Las modernas concepciones de salud fueron reunidas en la
década de los setenta a través de la OMS y formuladas a raíz
de la Conferencia de Alma-Atá. A partir de este momento
se define la salud como una yuxtaposición de grados
de bienestar en los campos psíquico, físico y social, y no
solo como ausencia de enfermedad. Los diferentes grados
de salud permanecen vinculados a variables biológicas,
psicológicas y del entorno. Se podría pensar que la atención
a la salud y a la enfermedad mental sigue centrada en la
patología del cerebro y del sistema nervioso. Sin embargo,
existen grades aportes de la psicología en sus diferentes
especialidades y de la sociología. Reyes (2007), en su estudio,
considera que tener una enfermedad mental es un hecho que
influye en las reacciones violentas. Resulta interesante que
los pacientes, familiares y los vecinos allegados expresan
que sí influye la condición de estar enfermos en la aparición
de la violencia; esto surge por la dificultad que presenta la
persona en la represión de sus impulsos, pero señalan que
paradójicamente son más agredidos los enfermos que lo
que ellos son capaces de agredir, estos se reconocen como
víctimas porque, a pesar de estar enfermos, tienen que
seguir interactuando en la sociedad con sus limitaciones.
En el estudio MacArthur (1998) se observaron dos
predictores de la conducta violenta: uno, la psicopatía, y
dos, el haber sido víctima de malos tratos durante la infancia.
Este mismo estudio encontró que la tasa de violencia fue
significativamente superior en los esquizofrénicos y en
aquellos que eran consumidores de sustancias psicoactivas
y/o alcohol. La enfermedad mental ha sido un factor
asociado tradicionalmente a la delincuencia (Núñez y
López, 2009) pues existen determinados comportamientos
criminales que pueden relacionarse o atribuirse a anomalías
mentales. Es preciso tener en cuenta que no todo
criminal o delincuente es un enfermo mental, ni que todo
enfermo mental comete actos delictivos, aunque exista un
diagnóstico clínico debe existir una relación de causalidad
con el acto (Sánchez Gutiérrez, 2000). Garrido y López (2006)
afirman que el hecho de que alguien desafíe los principios
esenciales que regulan nuestra vida social, forjados a lo
largo de siglos, no es prueba o razón suficiente para pensar
que sean locos, enfermos o degenerados. A pesar de los
numerosos estudios llevados a cabo para relacionar la
delincuencia y los trastornos psicopatológicos, no pueden
extraerse conclusiones definitivas, debido a que muchas
de estas investigaciones se han realizado con delincuentes
privados de libertad, circunstancia que puede favorecer la
aparición de ciertos trastornos mentales, como alteraciones
emocionales, trastorno límite de la personalidad y trastornos
disociativos (Luberto, Zavatti y Gualandri, 1997).
Estrés general
El estrés supone un hecho habitual de la vida del ser
humano, ya que cualquier individuo, con mayor o menor
frecuencia, lo ha experimentado en algún momento de
su existencia. El más mínimo cambio al que se expone
una persona es susceptible de provocárselo. Tener estrés
es estar sometido a una gran presión, sentirse frustrado,
aburrido, encontrarse en situaciones en las que no es fácil
su control, tener problemas conyugales, etc. El origen del
término estrés se encuentra en el vocablo distres, que
significa en inglés antiguo “pena o aflicción”; con el uso
frecuente se ha perdido la primera sílaba. El vocablo ya
era usado en física por Selye (1936), aludiendo a la fuerza
que actúa sobre un objeto produciendo su destrucción al
superar una determinada magnitud. En 1936, Hans Selye
introdujo el término estrés como un síndrome específico
41
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
constituido por cambios inespecíficos del organismo
inducidos por las demandas del entorno. Para este autor,
el estrés es una respuesta inespecífica del organismo
ante una diversidad de exigencias. Se trata de un proceso
adaptativo y de emergencia, siendo imprescindible para
la supervivencia de la persona, este no se considera una
emoción en sí mismo, sino que es el agente generador de
las emociones. En todo caso, el estrés es una relación entre
la persona y el ambiente, en donde el sujeto percibe en qué
medida las demandas ambientales constituyen un peligro
para su bienestar, si exceden o igualan sus recursos para
enfrentarse a ellas (Lazarus y Folkman, 1984).
Desde esta perspectiva, los autores manejan diversos datos,
unos se relacionan más con la rama de la Fisiología, y otros,
con la Psicología, siendo esta última la que engloba un
mayor número de manifestaciones en el sujeto, dado que
los individuos responden a cualquier demanda del entorno,
incluyendo las de naturaleza psicosocial. Si el sentimiento
de carácter negativo aparece de forma constante en el
sujeto y no es tratado adecuadamente, puede conducir
a un bajo rendimiento en la vida cotidiana, debilitando la
salud (Olga y Terry, 1997). Casi todas las personas han oído
hablar del estrés, pues es este un término que utilizan por
igual profesionales de la salud y profanos en la materia; para
unos es sinónimo de sobresalto, para otros hace referencia
a malestar, y, para la mayoría, un generador de tensión para
el sujeto. No obstante, en todos estos casos, el estrés es
entendido como algo negativo, perjudicial o nocivo para el
ser humano, ya que produce dolores de cabeza, indigestión,
resfriados frecuentes, dolor de cuello y espalda e infelicidad
en las relaciones personales más cercanas (Olga y Terry,
1997); además, el estrés puede incapacitar al individuo en
el ámbito laboral, provocar crisis nerviosas recurrentes,
depresión, ansiedad o incluso dar lugar a la muerte por
un ataque al corazón. La vivencia del estrés como positivo
o negativo dependerá de la valoración que realiza el
individuo de las demandas de la situación y de sus propias
capacidades para hacerles frente. Según esto, el ser humano
se enfrenta continuamente a las modificaciones que va
sufriendo el ambiente, percibiéndolas y reinterpretándolas
con el objeto de poner en marcha conductas en función
de dichas interpretaciones. Hay ocasiones en las que la
demanda del ambiente es excesiva para el individuo, por lo
que su repertorio conductual para hacer frente a la situación
generadora de estrés es insuficiente, al igual que cuando se
enfrenta a una situación nueva para él (Olga y Terry, 1997).
La ansiedad
Los estudios sobre la ansiedad se han desarrollado a lo
largo de la historia con dos problemas fundamentales:
la ambigüedad conceptual del constructo de ansiedad y
las dificultades metodológicas para abordar los estudios.
Estos problemas dieron lugar a que las distintas corrientes
psicológicas (psicodinámica, humanista, existencial,
conductista, psicométrica y la cognitiva-conductual) se
ocuparan del abordaje de la ansiedad y de las similitudes
y diferencias con otros conceptos, dada la gran confusión
terminológica con la angustia, el estrés, el temor, el miedo,
la tensión arousal, entre otros. Esta confusión conceptual ha
sido objeto de diversos estudios (Ansorena, Cobo y Romero,
1983; Bermúdez y Luna, 1980; Borkovek, Weerts y Berstein,
1977; Casado, 1994; Cattell, 1973; Lazarus, 1966; Miguel-
Tobal, 1985). En la práctica actual dichos términos se siguen
utilizando indistintamente.
En la actualidad es difícil mantener dichas diferencias, ya
que dentro del concepto de ansiedad agrupamos tanto los
síntomas psíquicos, o cognitivos, como los conductuales y
físicos. Además, en el DSM-IV (Manual de clasificación de
trastornos psicopatológicos) el trastorno de ansiedad se
denomina trastorno de angustia, resaltando, entre otras
características, la presencia de crisis de angustia recidivantes
e inesperadas (American Psychiatric Association, 1994).
Durante la década de los años cincuenta, y posteriormente
en los sesenta, la investigación psicológica estaba centrada
en el trastorno mental de la esquizofrenia; mientras que en
los años setenta el interés se dirigió a la evaluación de los
estados de ánimo, especialmente la depresión. Sin embargo,
en 1985 dos psicólogos norteamericanos, Husain y Maser,
afirmaron que la década de los años ochenta pasaría a la
historia como la década de la ansiedad; y es a partir de
entonces cuando esta pasa a ocupar un lugar preferente
que perdura hasta nuestros días. En esta época, las neurosis
de ansiedad se caracterizan por una preocupación ansiosa
exagerada que llega hasta el pánico y va acompañada a
menudo por síntomas somáticos. La neurosis de ansiedad
(al contrario que la neurosis fóbica) puede producirse en
cualquier circunstancia y no está limitada a situaciones
42
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
u objetos específicos (DSM II, 1986). Actualmente, los
trastornos de ansiedad ocupan el primer lugar a escala
mundial entre los trastornos del comportamiento más
prevalentes.
Las relaciones entre ansiedad y salud mental parecen estar
bastante bien establecidas, sobre todo en la adolescencia
(por ejemplo, Axelsson y Ejlertsson, 2002; Bagley y Mallick,
2001; Chamberlain y Haaga, 2001). Los autores coinciden en
señalar que la ansiedad afecta de modo directo a la salud
mental de las personas que la sufren. Se han encontrado
relaciones entre la ansiedad y los estilos de vida que
promocionan la salud (Johnson, 2002). Además, la ansiedad
se ha revelado asociada al riesgo de desarrollar ciertas
patologías, como por ejemplo, la hipertensión en las mujeres
(Adler y Matthews, 1994), o como factor de riesgo de la
sobremortalidad cardiovascular (Hansen, 2003). En estudio
realizado recientemente a escala nacional (Gutiérrez, 2010)
se encontró prevalencia de ansiedad de 53,6% y alteraciones
psicosomáticas de 60,0%. Además de la existencia de casos
de psicopatología en 35,1% de la población general. Son
estos hallazgos y demás factores psicosociales los que
han motivado al estudio de las variables predictoras de la
falta de salud mental; entre estas se pueden mencionar:
el estrés social, la ansiedad, la violencia delincuencial, el
ambiente familiar, el contexto sociocultural, el consumo
de drogas y alcohol y la salud mental de la población.
Ante los potenciales efectos psicológicos y emocionales
de la violencia delincuencial en la salud mental de los
salvadoreños surgen los interrogantes: ¿Existirá una
relación del contexto de violencia social delincuencial con
la salud mental de la población salvadoreña? ¿Qué tipos
de violencia delincuencial afectan más la salud mental
de los salvadoreños? ¿Habrá algún tipo de relación de
las variables socioculturales con la salud mental de los
salvadoreños? ¿Existirá alguna asociación de las variables
sociodemográficas con la estabilidad mental y emocional
de los salvadoreños? Con la finalidad de sistematizar el
desarrollo del presente estudio y responder algunas de
las preguntas antes señaladas, se plantean los siguientes
objetivos de investigación:
1. Determinar si existen diferencias significativas al
comparar el estrés-ansiedad delincuencial, la salud
mental en función del sexo y el lugar de residencia
de la población.
2. Determinar si existe una asociación del estrés y la
ansiedad delincuencial con la salud mental de los
salvadoreños.
Método
Participantes
En este te estudio se seleccionó una muestra probabilística
representativa de las ciudades más importantes del país.
Para ello, se adopto una estimación de error del 3% y un
nivel de confianza del 95%, obteniéndose una muestra de
1.143 personas a escala nacional. La muestra fue distribuida
de forma proporcional al número de habitantes en cada
departamento. El presente estudio es de tipo multimodal
(Hernández, Fernández y Baptista, 2006); también podría
nominarse ex post facto (Montero y León, 2007), con un
diseño retrospectivo y transeccional. Entre las técnicas
para la recolección de información fueron utilizadas: la
encuesta y la entrevista con profundidad. En el estudio
fueron encuestadas 538 (47,1%) hombres y 605 (52,9%)
mujeres. Siendo esta una muestra que está en sintonía con
el universo de la población salvadoreña. En cuanto a la
edad, el mayor porcentaje está entre 25 a 36 (26,8%) años.
En relación con la variable lugar de residencia 807 (70,6%)
fueron urbanas y 336 (29,4%) rurales, las variables como el
nivel educativo, estado civil, lugar de residencia.
Instrumentos
Escala de estrés y ansiedad delincuencial (ESAD).
Tras la construcción de la escala, se procedió a administra la
prueba a una muestra de 300 personas, siendo este el primer
estudio de cara a los análisis psicométricos de la prueba.
Originalmente la escala quedó integrada por diecisiete ítems.
Tras las pruebas psicométricas mediante el Análisis Factorial
Exploratorio (AFE) este arrojó dos factores integrados por: el
estresor delincuencial y ansiedad delincuencial. El primero
era evaluado con los primeros cinco ítems (1, 2, 3, 4, 5), y el
segundo con los ocho ítems siguientes (6, 7, 8, 9, 10, 11, 12,
13). También se aplicó el análisis de consistencia interna;
sus alfa de Cronbach fueron superiores a 0,75, indicando
adecuados criterios de fiabilidad y validez de constructo
en ambas dimensiones. Quedando un instrumento con
43
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
buenas propiedades psicométricas para evaluar el estrés
y ansiedad delincuencial en una población salvadoreña.
Posterior al estudio dos realizado a escala nacional, se
procedió a repetir los mismos análisis psicométricos
encontrándose los resultados siguientes; en el Análisis
Factorial Exploratorio mediante el análisis Kaiser-Maye-
Olkin (KMO = 0,86) con la prueba de esferidad de Bartlett
(X
2
78 = 5235; p = 0,000) indicaron la adecuación de los
datos para este tipo de análisis. Siguiendo el procedimiento
prefijado en dos factores con rotación Varimax, resultando
una solución de dos factores que explican el 49,99% de
la varianza total explicada, presentando todos los ítems
valores de saturación superiores a 0,40; siendo el primer
factor: Estresor delincuencial con seis ítems (1, 2, 3, 4, 5,
6), su alfa de Cronbach es de 0,77; y el segundo factor:
ansiedad delincuencial, con siete ítems (7, 8, 9, 10, 11, 12,
13), el alfa de Cronbach es de 0,82, indicando que la prueba
posee adecuadas propiedades psicométricas para evaluar
este constructo o variable latente.
Cuestionario de salud general, GHQ-12. (Golbert, 1970)
Este es un instrumento de screning (filtrado) o de tamizaje
de salud mental en la población que evalúe salud mental
y bienestar psicológico. La prueba posee adecuadas
propiedades psicométricas de fiabilidad y validez. En el
estudio cubano se obtuvieron los indicadores de consistencia
interna alfa de Cronbach de 0,89 para las dos escalas; en
el estudio en muestra española se obtuvieron índices de
consistencia interna de 0,82 y 0,85. En el estudio cubano,
la validez se logró mediante la correlación con la escala
de depresión de Beck, y esta fue de 0,92; y con el Idare de
0,85. Similares resultados se encontraron en países como
Japón, EE.UU. e Inglaterra. Lo anterior indica que la prueba
posee adecuadas propiedades psicométricas para evaluar
bienestar psicológico (salud mental) y funcionamiento
social. En el presente estudio, las pruebas de consistencia
interna alfa de Cronbach obtenidas fueron superiores a
0,77 en ambas dimensiones, indicando que la prueba posee
adecuadas propiedades psicométricas en El Salvador.
Resultados
El análisis descriptivo se desarrollará, en un primer
momento, del estrés-ansiedad delincuencial resultado de
la violencia delincuencial en relación con el sexo y el lugar
de residencia (urbano, rural) de la muestra; en un segundo
momento, de los indicadores de salud mental/bienestar
psicológico, comparado por sexo y lugar de residencia.
Asimismo, en función de sí ha sido víctima de violencia
delincuencial o no. Posteriormente se presentarán las
incidencias de víctimas de violencia, lugar de cometimiento
del delito, el contexto sociocultural de la violencia; y el
consumo de drogas y alcohol, las razones y motivaciones
del consumo, la frecuencia y tipos de drogas, entre otras
variables relacionadas.
A continuación se presentan las frecuencias y porcentajes
de la muestra que frecuentemente presentan estrés y
ansiedad delincuencial comparándose por sexo. En este
primer momento, se enfatiza en aquellos indicadores que
revelaron diferencias estadísticamente significativas entre
hombres y mujeres. En relación con la pregunta si en el
último año un pariente suyo fue víctima de la violencia
delincuencial: lesión u homicidio: 409 personas (36,0%)
expresaron que frecuentemente; de estos, 174 (42,5%)
son hombres, mientras 235 (57,5%) son mujeres, indicando
diferencias significativas; mientras 26,6% de la muestra
acepto haber sido víctima de la delincuencia en el último año.
En cuanto a si consideran que las noticias que se transmiten
por televisión, prensa escrita y radio, sobre la violencia
delincuencial (lesionados, muertos, extorsiones) afectan su
estado emocional y mental, 868 (76,5%) manifestaron que
frecuentemente; de este total 387 (44,6%) son masculinos y
481(55,4%) son femeninos.
Se preguntó si siente temor de transitar por algunas calles
o zonas de la ciudad (colonias, barrios o pueblo) 922 (81,3%)
expresaron que frecuentemente, de estos 415 (45,0%) son
masculinos y 507 (55,0%) son del sexo femenino. En relación
con sí el contexto de violencia social delincuencial en que
viven los salvadoreños le produce ansiedad y estrés (pánico,
miedo, agitación, boca seca, inquietud, taquicardia) 866
(76,4%) manifestaron que frecuentemente; de este total,
392 (45,3%) son masculinos y 474 (54,7%) son femeninos,
encontrándose diferencias significativas entre ambos
grupos, presentando mayores dificultades de salud mental
las mujeres que los hombres (ver tabla 1). Referente a sí
el ambiente de violencia social delincuencial que viven los
salvadoreños le produce nerviosismo e inseguridad, 961
44
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
(84,8%) dicen que frecuentemente, del total, 436 (45,4%)
son masculinos y 525 (54,6) son femeninos. Al preguntarle a
la población si considera usted que la situación de violencia
delincuencial que vive el país le afecta el sueño, 751 (65,9%)
refieren que frecuentemente; de estos, 326 (43,4%) son
del sexo masculino y 425 (56,6%) son femeninos. Si hay
diferencias significativas entre ambos grupos, estando más
afectadas las mujeres.
Tabla 1.
Frecuencias y porcentajes de la muestra que frecuentemente presentan estrés y ansiedad delincuencial,
comparados por sexo
No.
Ítems
Total
(%)
Hombres
(%)
Mujeres
(%)
Χ²
1
¿En el último año, algún pariente suyo fue víctima de la
delincuencia (Ej.: robo, hurto, extorsión)?
498
(43,8)
233
(46,8)
265
(53,2)
0,017
2
¿En el último año, algún amigo o conocido suyo fue víctima de la
delincuencia (Ej.: robo, hurto, extorsión)?
656
( 57,5 )
324
(49,4)
332
(50,6)
3,756†
3
¿En el último año, algún pariente suyo fue víctima de la violencia
delincuencial (Ej.: lesión u homicidio)?
409
(36,0)
174
(42,5)
235
( 57,5 )
5,316*
4
¿Usted ha pensado en cambiar su lugar de residencia como
producto de la violencia delincuencial?
427
( 37,9 )
191
(44,7)
236
(55,3)
1,812
5
¿Algún familiar, amigo o conocido ha cambiado su lugar de
residencia como resultado de la violencia?
574
(50,9)
274
(47,9 )
299
(52,1)
0,233
6
¿En su casa, se han implantado algunas medidas de seguridad
(Ej.: cerrar temprano la puerta, no estar en la calle)?
859
(76,4)
399
(46,4)
460
(53,6)
0,639
7
¿Considera usted que las noticias que transmiten por televisión,
prensa escrita y radio sobre la violencias delincuencial (Ej.:
lesionados, muertos, extorsiones) afectan su estado emocional
y mental?
868
(76,5)
387
(44,6)
481
(55,4)
9,317**
En cuanto a sí el contexto de violencia social delincuencial
que se vive en El Salvador está afectando su estabilidad
emocional y mental, 807 (70,7%) expresan que frecuen-
temente; de estos, 347 (43,0%) son hombres y 460 (57,0%)
son mujeres. En los indicadores restantes, si bien no hay
diferencias estadísticamente significativas entre hombres y
mujeres, la prevalencia de estrés y ansiedad delincuencial
siempre es mayor en la mujer.
45
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
8
¿En el último año, ha modificado su vida cotidiana debido a la
violencia delincuencial (Ej.: Llegar temprano a casa, no salir de
noche)?
855
(75,6)
397
(46,4)
458
(53,6)
0,376
9
¿Siente temor de transitar por algunas calles o zonas de la
ciudad (colonias, barrios o pueblo)?
922
(81,3)
415
(45,0)
507
(55,0)
7,848**
10
¿El contexto de violencia delincuencial que se vive en El Salvador
le produce ansiedad y estrés (nico, miedo, agitación, boca
seca, inquietud, taquicardia)?
866
(76,4)
392
(45,3)
474
(54,7)
5,135*
11
¿El ambiente de violencia delincuencial que se vive en El
Salvador le produce nerviosismo e inseguridad?
961
(84,8)
436
(45,4)
525
(54,6)
7,119**
12
¿Considera usted que la situación de violencia delincuencial
que vive el país le afecta el sueño?
751
(65,9)
326
(43,4)
425
(56,6)
11,506**
13
¿El contexto de violencia delincuencial que se vive en El
Salvador afecta su estabilidad emocional y mental?
807
(70,7)
347
(43,0)
460
( 57,0 )
17,511***
*p < 0,05; **p < 0,01; ***p < 0,001
Con respecto a las frecuencias y porcentajes de la muestra
que manifestaron que frecuentemente presentan estrés y
ansiedad delincuencial en función del lugar de residencia
(urbano, rural), en el presente análisis se considerarán
aquellos indicadores que su prevalencia total encontrada
fue superior al 75%. Uno de los primeros indicadores es: en
su casa se han implantado algunas medidas de seguridad,
como cerrar temprano la puerta, no estar en la calle, 859
(76,4%) expresaron que frecuentemente lo hacen; de
estos, 613 (71,4%) son urbanos y 246 (28,6%) son rurales.
En relación con que sí consideran que las noticias que se
transmiten por televisión, prensa escrita y radio, sobre la
violencia delincuencial (lesionados, muertos, extorsiones)
afectan su estado emocional y mental, 868 (76,5%) del
total manifestaron que frecuentemente; de este total, 614
(70,7%) son urbanos y 254 (29,3%) son rurales. También se
preguntó si en el último año ha modificado su vida cotidiana
debido al contexto de violencia delincuencial, Ej.: llegar
temprano a casa, no salir de noche; 855 (75,6%) refieren que
frecuentemente lo hacen; de estos, 599 (70,1%) son urbanos
y 256 (29,9%) son rurales (ver tabla 6). Por otra parte, 866
(76,4%) de la muestra del estudio expresaron que el contexto
de violencia social delincuencial que se vive en El Salvador
les produce ansiedad, estrés, pánico, miedo, agitación, boca
seca, inquietud y taquicardia; de este total, 614 (70,9%) son
urbanos y 252 (29,1) son rurales. Asimismo, 961 (84,8%)
consideran que el ambiente de violencia delincuencial que
se vive en El Salvador les produce nerviosismo e inseguridad;
de estos, 674 (70,1%) son urbanos y 287 (29,9%) son rurales.
Todos los indicadores de estrés y ansiedad delincuencial,
tanto los antes señalados como el resto no mencionados,
presentan una rotunda mayoría de prevalencia en la personas
que residen en las ciudades en contraste con las personas
que residen en las zonas rurales, indicando claramente que
los efectos directos de la violencia social delincuencial son
los problemas de salud mental y bienestar psicológico en
la población salvadoreña, con mayor significancia en los
residentes de la ciudad que en los residentes rurales.
46
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
Tabla 2.
Frecuencias y porcentajes de la muestra que frecuentemente presenta estrés y ansiedad delincuencial,
comparando los que residen en zonas urbanas y rurales
No. Ítems Total
(%)
Urbano
(%)
Rural
(%)
Χ²
1
¿En el último año, algún pariente suyo fue víctima de la delincuencia
(Ej. robo, hurto, extorsión)?
498
(43,8)
360
(72,3)
138
( 27,7 )
0,983
2
¿En el último año, algún amigo o conocido suyo fue víctima de la
delincuencia (Ej. robo, hurto, extorsión)?
656
( 57,5 )
475
(72,4)
181
( 27,6)
2,173
3
¿En el último año, algún pariente suyo fue víctima de la violencia
delincuencial (Ej. lesión o homicidio)?
409
(36,0)
293
(71,6)
116
(28,4)
0,186
4
¿Usted ha pensado en cambiar su lugar de residencia como
producto de la violencia delincuencial?
427
( 37,9 )
318
(74,5)
109
(25,5)
4,469*
5
¿Algún familiar, amigo o conocido ha cambiado su lugar de
residencia como resultado de la violencia?
574
(50,9)
423
(73,7)
151
(26,3)
5,902*
6
¿En su casa, se han implementado algunas medidas de seguridad
(Ej.: cerrar temprano la puerta, no estar en la calle)?
859
(76,4)
613
(71,4)
246
(28,6)
0,847
7
¿Considera usted que las noticias que transmiten por televisión,
prensa escrita y radio sobre la violencias delincuencial (Ej.:
lesionados, muertos, extorsiones) afectan su estado emocional
y mental?
868
(76,5)
614
(70,7)
254
(29,3)
0,047
8
¿En el último año, ha modificado su vida cotidiana debido a la
violencia delincuencial (Ej. Llegar temprano a casa, no salir de
noche)?
855
(75,6)
599
(70,1)
256
(29,9)
0,989
9
¿Siente temor de transitar por algunas calles o zonas de la ciudad
(colonias, barrios o pueblo)?
922
(81,3)
664
(72,9)
258
(28,0)
2,987
47
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
En relación con los indicadores de problemas de salud
mental y bienestar psicológico que frecuentemente presenta
la muestra comparados por género, seguidamente se
presentan las frecuencias y porcentajes más representativos
del indicador de salud mental. En este sentido, se evalúa
sí las preocupaciones le han hecho perder mucho sueño;
301 (26,4%) expresaron que frecuentemente; de estos,
142 (41,2%) son masculinos y 177 (58,8%) son femeninos.
Con relación a sí se ha sentido agobiado y con tensión, 345
(30,5%) manifestaron que es frecuente; de estos, 143 (41,4%)
son masculinos y 202 (58,6%) son del sexo femenino. Por
otra parte, se preguntó si ha sentido que no puede superar
sus dificultades; 347 (30,6%) refieren que frecuentemente;
de este total, 160 (46,1%) son masculinos y 187 (53,9%)
son femeninos. En este mismo sentido, se evaluó si ha
sido capaz de hacer frente a sus problemas, 917 (80,7%)
dicen que frecuentemente; hay 19,3% que no pueden
con sus problemas. Del total, 439 (47,9%) son masculinos
y 478 (52,1%) son femeninos. Con respecto a si se ha
sentido poco feliz y deprimido, 244 (21,5%) expresaron que
frecuentemente; del total, 104 (42,6%) son masculinos y 140
(57,4%) son femeninos. En todos los indicadores de salud
mental comparados por sexo se encontraron porcentajes
mayores en las mujeres que en los hombres, lo que indica
que existen más dificultades de salud mental/bienestar
psicológico en las mujeres.
En cuanto a si las preocupaciones le han hecho perder
mucho sueño, 301 (26,4%) expresaron que frecuentemente;
de estos, 202 (67,1%) son urbanos y 99 (32,9%) son rurales.
Referente a sí se ha sentido constantemente agobiado
y con tensión, 345 (30.5%) manifestaron que sí; de este
total, 252 (73,0%) son residentes urbanos y 93 (27,0%)
son residentes rurales. Al preguntarles si han sentido que
no pueden superar sus dificultades, 347 (30,6%) refieren
que frecuentemente; de estos, 230 (66,3%) son urbanos y
117(33,7%) son rurales. Por otra parte, se preguntó sí se han
sentido poco feliz y deprimido 244 (21,5%) expresaron que
frecuentemente, de este total, 161 (66,0%) son residentes
urbanos y 83 (34,0%) son residentes rurales. En cuanto
a si se sienten razonablemente felices, considerando
todas las circunstancias, 756 (67,1%) manifestaron que
frecuentemente; de estos, 537 (71,0%) son urbanos y 219
(29,0%) son rurales. Este último indicador refiere entonces
que el 32,9% de la muestra del estudio no se considera
feliz, considerando todas las circunstancias. En un sentido
general, se puede apreciar que en todos los indicadores de
salud mental y bienestar psicológico de la población, en
función del lugar de residencia, existe mayor incidencia de
dificultades de salud mental en la muestra de residentes
urbanos que en la muestra de residentes rurales,
duplicando los porcentajes en casi todos los indicadores.
10
¿El contexto de violencia delincuencial que se vive en El Salvador
le produce ansiedad y estrés (nico, miedo, agitación, boca seca,
inquietud, taquicardia)?
866
(76,4)
614
(70,9)
252
(29,1)
0,001
11
¿El ambiente de violencia delincuencial que se vive en El Salvador
le produce nerviosismo e inseguridad?
961
(84,8)
674
(70,1)
287
(29,9)
0,965
12
¿Considera usted que la situación de violencia delincuencial que
vive el país le afecta el sueño?
751
(65,9)
535
(71,2)
216
(28,8)
0,306†
13
¿El contexto de violencia delincuencial que se vive en El Salvador
afecta su estabilidad emocional y mental?
807
(70,7)
571
(70,8)
236
(29,2)
0,018
*p < 0,05
48
La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
Discusión
Para elaborar la discusión de los resultados en este informe
se hará énfasis en aquellos hallazgos más destacados y que
estén en sintonía con los objetivos del estudio. En un primer
momento, se tiene que más de una tercera parte (36,0%) de
la muestra estudiada manifestó que un pariente suyo fue
víctima de la violencia delincuencial (lesionado o asesinado)
en el último año. Estos resultados están en sintonía con los
encontrados por el Centro de Investigación de la Opinión
Pública Salvadoreña (Ciops, 2011), que informó que la
organización criminal y los tipos de delitos que se cometen
en el lugar de residencia por la delincuencia (pandillas) es
de 30,9%; los tipos de delitos son 23,5% hurtos y robos,
y el 18,8% dijo que era la extorsión. Así mismo, un 36,1%
manifestó haber sido víctima de robo en la calle. Por otra
parte, el estudio revela que una inmensa mayoría de la
población salvadoreña (76,5%) considera que las noticias
que se transmiten por televisión, prensa escrita y la radio,
sobre la violencia delincuencial (lesionados, muertos, robos,
extorciones, etc.) afectan su estado emocional y mental. La
población expresa tener miedo y temor (81,3%) de transitar
por algunas calles, colonias, barrios y pueblos, de ser víctima
de la violencia social delincuencial. En esta misma dirección,
más de tres cuartas partes (76,4%) de la muestra evaluada
manifestó que el contexto de violencia social delincuencial
en que vive le produce ansiedad y estrés (pánico, miedo,
agitación, boca seca, inquietud y taquicardia). Hay que
destacar también que el ambiente de violencia social
delincuencial que viven los salvadoreños les produce
nerviosismo e inseguridad (84,8%). De igual forma, esta
situación les afecta el sueño (65,9%). El contexto sociocultural
de violencia delincuencial que viven los salvadoreños está
afectando su estabilidad emocional y mental (70,7%). En
todas las variables se encontró una prevalencia de estrés
y ansiedad delincuencial mayor en las mujeres que en
los hombres. Los resultados anteriores coinciden con la
descripción del estrés que hace Seyle (1936), como un
síndrome específico constituido por cambios inespecíficos
del organismo, inducidos por las demandas del entorno. El
estrés es una respuesta inespecífica del organismo ante una
diversidad de exigencias. Se trata de un proceso adaptativo y
de emergencia, siendo imprescindible para la supervivencia
de la persona. Lazarus y Folkman (1986) describen que el
estrés es una relación entre el individuo y su entorno, que es
evaluado por aquel como amenazante, y que pone en peligro
su bienestar. Un indicador importante de señalar en este
análisis es que existe una prevalencia más alta de estrés
y ansiedad delincuencial en la población que reside en las
ciudades, en comparación con las personas que residen en el
área rural. Sin embargo, hay que señalar que el contexto de
violencia social delincuencial afecta significativamente a la
población general, pero de forma más pronunciada a los que
residen en las ciudades. En consecuencia, lo antes señalado
conformaría un factor psicosocial que afecta la salud mental
y bienestar psicológico en la población salvadoreña.
Estos hallazgos coinciden con los encontrados por
Lederbogen, Kirsch,
Haddad,
Streit, Schuch, Tost… Meyer-
Lindenberg (2011), quienes expresan que las personas que
viven en la ciudad, a diferencia de otras personas, tienen
más probabilidades de sufrir más estrés y enfermedades
mentales. Estos resultados se basan en la investigación
alemana que compara patrones de actividad cerebral
en respuesta al estrés social de los habitantes urbanos y
rurales. Los autores plantean que estudios anteriores han
demostrado que los problemas de salud mental, tales
como esquizofrenia, ansiedad y trastornos del humor,
son generalmente más comunes en personas que viven
o crecen en las ciudades. El equipo investigador informó
que anteriores estudios epidemiológicos han demostrado
que los residentes urbanos tienen un riesgo mucho mayor
de trastornos psicológicos, incluyendo los trastornos de
ansiedad, depresión y esquizofrenia. La salud mental. En este
estudio se encontró que más de una cuarta parte (26,4%)
de la muestra en estudio refiere que las preocupaciones le
han hecho perder mucho sueño; en esta misma dirección,
30,5% expresa que se ha sentido agobiado y con tensión,
una prevalencia similar (30,6%) siente que no puede superar
sus dificultades; cerca de una quinta parte (19,3%) dice que
ha sido incapaz de hacer frente a sus problemas.
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La violencia social delincuencial asociada a la salud mental en los salvadoreños
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50
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 50-55, ISSN: 2218-3345
Violencia contra las mujeres
en El Salvador
Laura Navarro Mantas
laurana@ugr.es
Universidad de Granada, España
Resumen
El presente artículo es una revisión teórica del problema de
la violencia de género en El Salvador, y tiene el propósito
de aproximarse a una construcción social del fenómeno
desde la realidad del país en el que se enmarca. No en
vano, la violencia contra las mujeres en El Salvador supone
un grave problema de salud pública y derechos humanos.
En concreto, resulta particularmente alarmante teniendo
en cuenta el clima de violencia y discriminación social
de la mujer que se conjugan entre sí, dando lugar a una
situación de absoluta desprotección para ellas tanto fuera
como dentro de sus hogares. En la actualidad, la violencia
contra las mujeres supone a su vez uno de los más graves
problemas políticos y sociales del país, que se une a las
serias carencias que, además, sufren las mujeres en
aspectos básicos como la alimentación, la educación y
la higiene. Sin embargo, a pesar de la evidente magnitud
del problema, en la actualidad no existen datos reales que
permitan tener un conocimiento ajustado y preciso del
fenómeno de cara a una mayor sensibilización y abordaje
desde las políticas públicas y una adecuada asistencia a
las víctimas. Finalmente, se concluye incidiendo en la
importancia de llevar a cabo más investigaciones sobre
este tema que permitan una mayor visibilización de la
violencia contra las mujeres en El Salvador.
Palabras clave: Violencia de género, El Salvador, problema
social, investigación social, políticas, violencia contra la mujer.
.
Abstract
This article is a theoretical review of the problem of gender
violence in El Salvador, and is intended to make a social
construction of the reality of the phenomenon of the
country in which it is framed. Not surprisingly, violence
against women in El Salvador is a serious public health
and human rights problem. This is particularly alarming,
given the combination of a climate of violence and social
discrimination against women, resulting in a situation
of an absolute lack of protection for them, both outside
and inside their homes. Today, violence against women
has become one of the most serious political and social
problems of the country, in addition to serious defi ciencies
that are also suffered by women in the fulfi llment of basic
issues, such as food, education and hygiene. However,
despite the apparent magnitude of the problem, there
are currently no real data to allow for a close and precise
knowledge of the phenomenon facing the increased
awareness and approach from public policy and adequate
assistance to victims. Finally, the article conclude stressing
the importance of conducting more research on this issue
to allow greater visibility of the violence against women in
El Salvador.
Keywords: Gender violence, El Salvador, social problem,
social research policies, violence against women.
51
Violencia contra las mujeres en El Salvador
Violencia contra las mujeres en El Salvador
El Salvador es uno de los países con mayor tasa de
homicidios de América Latina. Junto con Colombia,
Guatemala y Jamaica, forma parte del grupo de países más
violentos de este continente (Buvinic et al., 1999). El hecho
de haber sufrido una larga guerra civil, de la que aún en la
actualidad arrastra las consecuencias de la posguerra, y un
presente marcado por una realidad social unida al fuerte
fenómeno migratorio, las padillas y el narcotráfico, lo hace
especialmente vulnerable a experimentar una violencia
generalizada que se expresa a todos los niveles de la
sociedad. El fácil acceso a las armas, la extrema desigualdad
social y los altos niveles de pobreza de gran parte de la
población, son factores que contribuyen al mantenimiento
de estos altos índices de violencia.
La cultura, por otro lado, es otro de los factores responsables
de la proliferación de la violencia en América Latina en
general. La cultura establece unas normas y patrones
de funcionamiento social que aprueban la violencia en
determinados contextos. Es por ello que los valores
culturales en la sociedad de El Salvador, eminentemente
machista, adquieren una importancia fundamental en la
proliferación y el mantenimiento de uno de los problemas
más graves del país en la actualidad: la violencia contra
las mujeres. Unas normas de funcionamiento social
fundamentadas en los rígidos papeles de género siguen
respaldando el “derecho” del marido de controlar y corregir
a su pareja; y le da autoridad, por tanto, para hacer uso de
la violencia contra ella (Buvinic et al., 1999; Hume, 2008).
Gran parte de estas ideas tradicionales sitúan a la mujer en
una posición de complementariedad y subordinación del
hombre, conformando una identidad femenina a la que se
le otorga la condición de “naturaleza”; un papel de género
femenino fundamentado en unos pilares básicos que son
la maternidad, la afectividad, el cuidado a los demás y una
sexualidad heterosexual y monógama donde la virginidad
aún sigue siendo un valor considerado socialmente
(Garaizabal y Vázquez, 1994).
Las mujeres salvadoreñas, por tanto, han sido tradicional-
mente las principales víctimas, tanto de la violencia social
como de la que se produce en el ámbito privado. Desde
la inseguridad ciudadana, en la que son especialmente
vulnerables en unas ciudades donde los espacios públicos
están hechos para los hombres y donde la mujer es relegada
a lo privado y al cuidado del hogar y la familia, hasta el
maltrato del que es víctima en la intimidad de su contexto
más cercano. Así, la “mujer pública” tiene una connotación
negativa y coloca a la mujer en una situación de riesgo en
los espacios públicos urbanos, manifestándose a través de
la delincuencia, el acoso laboral o la agresión sexual, entre
otros (Massolo, 2005). Por otro lado, el maltrato a la mujer por
su pareja es una práctica muy común en El Salvador, y está
muy enraizado en la cultura y sociedad salvadoreñas, hasta
el punto de que en muchos entornos está considerado como
un hecho “normal” (Hume, 2004). Como consecuencia, la
mujer salvadoreña se encuentra en una situación de especial
vulnerabilidad en el seno de sus hogares donde la violencia
es bastante aceptada (Hume, 2008). Existe, por tanto, una
fuerte complicidad social con este comportamiento y, en
general, se considera que es un asunto privado en el que
nadie debe inmiscuirse, e incluso que es un derecho del
marido. La sospecha sobre la mujer que es maltratada de
que ella haya hecho algo para merecérselo es una creencia
muy extendida, lo cual permite justificar el maltrato y
alimenta el propio sentimiento de culpabilidad de la mujer
que está siendo víctima de violencia (Garaizabal y Vázquez,
1994). La sociedad salvadoreña asume la supremacía del
hombre y, por tanto, acepta su derecho a hacer mantener
su dominación como justificación del maltrato. Se considera
que, de no hacerlo, iría contra el bienestar familiar, poniendo
en riesgo la misma institución del matrimonio y la familia, lo
que sería sancionado socialmente (Gaborit, 2005).
Por otra parte, esta idea generalizada de que el maltrato
hacia la mujer es necesario, e incluso merecido, acarrea
consecuencias graves en la autoestima de la mujer en la
medida en que no se siente buena madre y esposa, y le
genera importantes sentimientos de culpabilidad. La religión,
a su vez, tiene un gran peso en la sociedad salvadoreña,
y se constituye en una ideología que suele estar basada
en un fuerte sentimiento de culpa, lo que alimenta aún
más este sentir en la mujer en El Salvador (Garaizabal y
Vázquez, 1994). Por ende, los líderes religiosos dictan unas
normas muy estrictas de comportamiento que modulan las
relaciones entre mujeres y hombres. Para muchas mujeres
salvadoreñas, la religión puede suponer una vía de escape y
un refugio, pero, para otras muchas, es un sistema de presión
52
Violencia contra las mujeres en El Salvador
más que mantiene los papeles de género bien diferenciados
y alimenta el mencionado sentimiento de culpabilidad.
La violencia contra la mujer, en todas sus manifestaciones,
ocurre en el marco de una cultura de estilo patriarcal que,
al ensalzar los valores masculinos sobre los femeninos,
obstaculiza la concienciación social sobre la problemática
y, por tanto, la legislación al respecto y la asistencia a
las víctimas. Como consecuencia, tampoco existe una
estimación más o menos aproximada de la incidencia real
de los casos de violencia y muerte de mujeres a manos
de sus parejas. Muchos datos son ocultados, ignorados o
disfrazados bajos otros tipos de violencia (Massolo, 2005).
No obstante, a pesar de la escasez de datos reales, sí existen
algunas cifras orientativas que ofrecen algunos informes
de instituciones públicas, organizaciones internacionales o
asociaciones no gubernamentales del país.
Algunos datos de prevalencia de violencia de
género en El Salvador
Una dificultad añadida al esfuerzo de cuantificación de casos
reales de violencia de género en El Salvador es el enfoque
que se emplea desde las instituciones públicas y privadas,
el cual, como señala el PNUD (2011), a menudo adolece de
perspectiva de género. Así, la diversidad de terminología
empleada no adecuada al problema social que estamos
tratando no otorga la importancia y la especificidad de la que
se hace necesario su abordaje. De esta forma, empleando
términos como violencia intrafamiliar o violencia sexual se
ocultan en muchos casos el maltrato físico, psicológico y/o
sexual que sufre la mujer que está siendo maltratada por
su pareja, que a su vez es un tipo de violencia de género
cuya definición más global es la que la Organización de
Naciones Unidas (ONU) (1995) dicta como “todo acto de
violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que
tiene o puede tener como resultado un daño físico, sexual o
psíquico para la mujer, así como las amenazas de tales actos,
la coacción o la privación arbitraria de libertad, ya sea que
ocurra en la vida pública o en la privada”. Así, como señala
la ONU, se trata de una violencia que sufren las mujeres por
el mero hecho de ser mujer, es decir, por su pertenencia
al género femenino, y que por definición sería diferente a
la violencia intrafamiliar, que es toda violencia que se da
dentro del núcleo familiar y hacia cualquier miembro de la
unidad familiar.
Sin embargo, a pesar de las mencionadas dificultades para
rescatar los casos de violencia de género de las estadísticas
globales, el PNUD (2011) informa que en los últimos cinco
años las cifras promedio de violencia intrafamiliar, cuyas
víctimas han sido mujeres, superan el 90%. Por otra parte,
se puede afirmar que la mayoría de las víctimas de crímenes
violentos en El Salvador son mujeres, y se estima que unas
1.000 han sido asesinadas entre 1999 y 2005, según un
estudio de una coalición de organizaciones que combaten la
violencia contra las mujeres financiada por Oxfam América
(Oxfam Internacional, 2005). Este estudio informa que, en los
primeros cuatro meses de 2004, se registraron 1.054 casos
de violencia doméstica en la Oficina de Asuntos de la Mujer.
De ellos, casi un 94% de las víctimas eran mujeres, y solo
un 20% de los casos fueron llevados a los tribunales. Otros
organismos públicos, como ISDEMU (Instituto Salvadoreño
para el Desarrollo de la Mujer), informan que el 60% de
las 7.582 denuncias registradas entre la segunda mitad de
2004 y la primera mitad de 2005, corresponden a violencia
intrafamiliar, de las cuales el 93,23% fueron interpuestas
por mujeres. A su vez, en relación con las denuncias de las
mujeres por violencia intrafamiliar, se registró durante el
período de 2005 un incremento del 22% con respecto al año
anterior (ISDEMU, 2005). Esta misma fuente gubernamental
sostiene que siguen en aumento los casos, como evidencia
las 3.804 denuncias por violencia intrafamiliar de 2002
frente a las 6.711 de 2009, siendo un 97,5% de las denuncias
de este último año en las que las víctimas fueron mujeres.
Las estadísticas disponibles del Instituto de Medicina Legal
de la Corte Suprema de Justicia de El Salvador evidencian
que la mayoría de los casos de violencia física intrafamiliar
contra las mujeres son cometidos por el esposo, compañero
o excompañero de vida. Así lo refleja el 68,2% de los casos
registrados en el año 1999, y el 70,7% un año después.
Isdemu, por su parte, identifica a la pareja masculina
como maltratadora en el 85,8% de los casos registrados
entre 2001 y 2003; y Ormusa (2009), el 87% de los casos
registrados entre enero y septiembre de 2009. En torno a
un tercio de las lesiones mostradas por las mujeres fueron
manchas o señales en la piel como consecuencia de los
golpes; cerca de un 10% sufría heridas de diversa índole,
y aproximadamente un 5% mostró hematomas (Gaborit,
53
Violencia contra las mujeres en El Salvador
53
Violencia contra las mujeres en El Salvador
2005). En un estudio publicado recientemente, se encontró
que las mujeres salvadoreñas que eran maltratadas
físicamente eran víctimas de una gran variedad de
agresiones, incluyendo los niveles más graves. Así, un 18,4%
declaró haber sido amenazada con algún arma por parte de
su pareja, y un 17,2% había necesitado asistencia médica
por las lesiones sufridas (Sierra et al., 2009). Por otro lado,
parece ser que son las mujeres salvadoreñas más jóvenes el
foco principal de violencia en el hogar. La Encuesta Nacional
de Salud Familiar (2002-2003) identificó que el 54,9% de las
víctimas eran mujeres de edades comprendidas entre los
15 y 29 años. La Policía Nacional Civil, por su parte, informó
que más de la mitad de los casos de violencia investigados
fue contra mujeres menores de 30 años. En cualquier caso,
son las mujeres que aún están estudiando, las que tienen un
bajo nivel educativo y las analfabetas las más vulnerables a
sufrir violencia. Pero son, sobre todo, las amas de casa las
mujeres que con más frecuencia reciben maltrato en sus
hogares, como argumenta Isdemu, con una tasa del 65,3%
de mujeres atendidas sin un trabajo remunerado (Gaborit).
Sensibilización social del problema de la
violencia de género
La Asociación de Mujeres por la Dignidad y la Vida de El
Salvador (2006) llevó a cabo una investigación donde se
analizó el tratamiento que la prensa le daba al problema de
la violencia contra de la mujer en el país. Se encontró que
el 87,2% de los casos de violencia de género registrados
eran homicidios y casos de violencia sexual, y la prensa solo
dio cobertura a los casos de extrema violencia, pasando
por alto los casos de violencia física y psicológica. Con
estos datos, esta asociación de mujeres denuncia que la
falta de información sobre estadísticas reales respecto a
la violencia contra las mujeres en El Salvador obstaculiza
la visibilización de la verdadera magnitud del problema.
A su vez, desde distintos sectores feministas, llaman la
atención sobre el hecho de que los datos ofrecidos por
los organismos públicos a menudo difieren mucho de los
recopilados por asociaciones y movimientos de mujeres no
gubernamentales, tanto nacionales como internacionales,
que constatan una mayor gravedad del asunto.
Por otro lado, no son menos sorprendentes los resultados
obtenidos en un sondeo nacional realizado por el Instituto
Universitario de Opinión Pública de la Universidad
Centroamericana José Simeón Cañas (2005), que en el año
1999 revelaba datos alarmantes sobre las actitudes hacia la
violencia y el desconocimiento de las medidas adoptadas
por parte de la población salvadoreña. Por ejemplo, un 32%
de la población femenina consideraba que es el maltrato
o la violencia intrafamiliar el problema que más afecta a
las mujeres del país. Sin embargo, el 84,2% reconocía no
conocer servicios del gobierno dirigidos a mujeres; y un
29,3% consideró que estos servicios eran poco efectivos. El
41,8% reconoció no saber dónde acudir en caso de tener
que hacer una denuncia sobre la violación de algún derecho
como mujer. Con respecto a las actitudes hacia el marido,
el 70,4% consideraba que la mujer debe estar dispuesta
siempre a complacer a su marido; y el 63,6% indicaba que
la mujer debe conformarse con lo que el compañero le
da. Finalmente, más de la mitad de la población (el 53,7%)
manifestaba que la violencia en la casa es un asunto privado
en el que nadie debe inmiscuirse.
En consonancia con la opinión pública general y las actitudes
que muestra la población hacia la violencia contra las
mujeres, existe una importante falta de sensibilización sobre
este problema social también en el ámbito gubernamental
salvadoreño, como evidencian la escasez de medidas
políticas específicas para atajar el problema y el deficiente
sistema de recopilación de estadísticas. Aún así, algunas de
las acciones que se han llevado a cabo a escala nacional en
los últimos años fueron la aprobación, en 1995, de la Ley
contra la Violencia Intrafamiliar que contempla medidas
cautelares y preventivas para proteger a las víctimas de
violencia en el hogar, ya sean mujeres, niños o ancianos.
Ese mismo año, El Salvador participó en el acuerdo firmado
por la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y
Erradicar la Violencia contra la Mujer (Convención de Belem
do Pará), que regula de forma explícita las medidas tomadas
para combatir la violencia contra la mujer. Tres años después
se suscribió a la Comisión para la Eliminación de todas las
formas de Discriminación contra la Mujer, donde los estados
miembros se comprometieron a poner en marcha los
mecanismos legislativos, judiciales y administrativos para
acabar con la discriminación de la mujer (Urquilla, 2005);
y más recientemente estos esfuerzos culminan con la
aprobación, el 25 de noviembre de 2010, de la Ley Especial
Integral para una Vida Libre de Violencia para las Mujeres.
54
Violencia contra las mujeres en El Salvador
No obstante, si estos compromisos internacionales no
van acompañados de otras medidas legales y políticas en
el ámbito nacional con una evidente concienciación de
género corren el riesgo de perder su eficacia. Y este hecho,
a menudo, tiene un claro reflejo en la insuficiente respuesta
de las instituciones salvadoreñas hacía las víctimas de
violencia de género, o al tratamiento que se le da a estos
casos desde los medios de comunicación. Así, por ejemplo,
la policía, que, frecuentemente, es la primera en intervenir
en los casos de violencia, tiene una respuesta inadecuada,
siendo muy extendidos el uso de estereotipos y mitos de
tipo machista entre dichos profesionales. La resistencia al
cambio y la falta de aplicación de los nuevos procedimientos
legales convierten en ineficaces las medidas tomadas para
hacer frente al problema (Sagot, 2005).
Conclusiones
A pesar de lo alarmante de las cifras expuestas a lo largo
de este artículo, aún en la actualidad la violencia contra
las mujeres en El Salvador no es considerada un problema
grave por la población general del país (Madrigal y Tejeda,
2009). Bien sabido es que la guerra civil tuvo graves
consecuencias para la población salvadoreña y que el alto
grado de violencia se mantuvo durante los años de la pos-
guerra; sin embargo, el presente no es más alentador. La
violencia sigue estando a la orden del día, y la crisis mundial,
el fenómeno tan extendido de la emigración y la pobreza
afectan gravemente al país. Tanto es así que se ha registrado
un mayor índice de asesinatos en 2005 que el de 1989. Y
aunque existen por lo general más muertes de hombres
que de mujeres, se ha observado un considerable aumento
del número de asesinatos de mujeres entre los años 2001 y
2004 (Madrigal y Tejeda).
En síntesis, los datos a los que se ha hecho referencia en
este artículo pretenden orientar sobre el grave problema
que la violencia contra la mujer supone actualmente
para la sociedad salvadoreña y para la salud pública de
este país. Sin embargo, resultan limitados para conocer
en mayor profundidad la magnitud real del fenómeno y
las consecuencias que supone para las mujeres y para la
población general y el desarrollo social, político y económico
en El Salvador. De ahí la necesidad urgente de llevar a
cabo más investigaciones en esta línea que aumenten
el conocimiento sobre la medida en que esta violencia
contra las mujeres ocurre y en qué circunstancias se da,
de forma que permita visibilizar el problema desmontando
los mitos existentes en torno al mismo y sensibilizando a la
sociedad salvadoreña sobre su gravedad. Por otra parte, los
datos señalados sí desprenden algunas pistas en relación
con las deficiencias del sistema para hacer frente a dicha
problemática y la falta de presupuestos y recursos dirigidos
a asistir y recuperar la salud y el bienestar psicológico de
las víctimas. Es por todo ello que se hace indispensable y
oportuno intervenir en este problema social desde la base, es
decir, desde la ideología, y a todos los niveles de la sociedad,
involucrando en esta empresa a todos los agentes sociales
y capacitando de forma específica a los profesionales que
van a trabajar directamente con estos casos. En definitiva,
es necesario que toda la sociedad en su conjunto asuma
su responsabilidad y actúe en consecuencia, solo de esta
forma se logrará atajar el grave problema de la violencia de
género desde la de raíz y se caminará hacia una sociedad
más justa y libre de violencia.
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Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 56-61, ISSN: 2218-3345
Resultados de la tercera fase
del proyecto de registro
y reconocimiento de sitios
arqueológicos históricos
de El Salvador
José Heriberto Erquicia Cruz
jose.erquicia@utec.edu.sv
Universidad Tecnológica de El Salvador
Resum en
Este artículo muestra los resultados de la tercera fase
de documentación de sitios arqueológicos históricos
de El Salvador. En la actualidad un sinnúmero de sitios
se encuentran a la espera de ser evidenciados desde
la arqueología; con ello, la rica historia colonial y
republicana del actual territorio salvadoreño necesita
ser conocida y estudiada no solamente por la historia,
sino también por los vestigios que aún hoy en día
guardan estos diversos parajes. Fundamentado en la
base teórica, se construyó una concepción y defi nición
del término arqueología-histórica que encajara en el
contexto histórico-geográfi co salvadoreño y que más se
acercaría a los objetivos propuestos por este proyecto. El
tipo de estudio es arqueológico e histórico, cuya técnica
de investigación es a partir de las fuentes documentales
y la prospección superfi cial en arqueología. A partir
de la fi nalización de la investigación se registraron y
documentaron obrajes de añil de haciendas de la época
colonial y de la primera mitad del siglo XIX, localizados
en los departamentos de La Paz y San Vicente.
Palabras clave: Patrimonio arqueológico e histórico
Época colonial, obrajes de añil, arqueología, sitios
históricos, añil.
Abstract
This article shows the results of the third stage of
historical documentation of archaeological sites in
El Salvador. Currently many sites are waiting to be
evidenced from archeology, with it’s rich colonial
history and current territory of Salvadorian Republic
needs to be known and studied, not only history but
also by the vestiges even today keep these various
places. Based on the theoretical basis built a concept
and defi nition of the term historical archeology, which fi t
into the historical-geographical context Salvadoran and
more, would come to the objectives proposed by this
project. The type of archaeological and historical study,
whose research technique is based on documentary
sources and surface prospecting in archeology. After
the completion of the investigation was recorded
and documented in indigo plantations of the colonial
era and the fi rst half of the nineteenth century in the
departments of La Paz and San Vicente.
Keywords: Archaeological and historical heritage
colonial period, indigo production, archeology,
historic sites, indigo.
57
Resultados de la tercera fase del proyecto de registro y reconocimiento de sitios arqueológicos históricos de El Salvador
Introducción
El hallazgo de añil en los territorios hispanoamericanos fue
de gran interés comercial para España. Así, el tinte que se
obtenía del xiquilite se encontraba entre los productos de
mayor aprecio para la exportación durante la época colonial,
a tal grado que llegó a conocerse como el “oro azul”. Durante
los siglos coloniales de la provincia de San Salvador, el añil
se convirtió en el principal producto de exportación hasta el
fin de la época. A mediados del siglo XVIII, dicha provincia
contaba con un estimado de más de seiscientos obrajes que
servían para beneficiar el añil.
La denominada Fase III-2011 del proyecto pretendía darle
continuidad a la base de datos actualizada del patrimonio
arqueológico histórico de El Salvador. En la actualidad se
cuenta con el Registro Nacional de Sitios Arqueológicos
de El Salvador; con ello, este proyecto pretende apoyar,
fortalecer y abonar en gran medida a ese plan permanente
de registro y reconocimiento de lugares con valor cultural,
vistos desde la arqueología histórica.
La investigación se enmarca en el estudio de los sitios
arqueológicos históricos que están referenciados por
las fuentes etnohistóricas, documentales, archivos y la
oralidad, los cuales se reconocieron y evidenciaron en el
campo a través de las técnicas de la metodología de campo
en arqueología.
En términos generales, esta investigación pretendía registrar
y documentar obrajes de añil de las haciendas de la época
colonial y primera mitad del siglo XIX, localizados en la zona
paracentral de El Salvador en los departamentos de La Paz y
San Vicente. Además, la elaboración de una ficha de registro
de sitios arqueológicos históricos de cada uno de los lugares
visitados y documentados.
El registro arqueológico se elaboró del 06 de junio al 12 de
julio de 2011. Se visitaron más de una veintena de lugares
previamente propuestos por este proyecto como posibles
zonas de hallazgo de los inmuebles históricos, de los cuales
17 arrojaron datos e información de vestigios arqueológicos
en donde se mostraban los restos de antiguos obrajes que,
en su momento, sirvieron para la producción de tinta de
xiquilite o añil.
Metodología de la investigación
La investigación consistió en un estudio de carácter
exploratorio y descriptivo, a través de visitas de campo, la
recolección superficial de materiales culturales, obteniendo
el registro fotográfico, ubicación, mapeo preliminar, descrip-
ción y análisis de los artefactos culturales y de los datos
obtenidos en campo. El tipo de estudio es arqueológico
e histórico. La técnica de investigación es a partir de
las fuentes documentales y la técnica arqueológica de la
prospección superficial.
El método de prospección superficial consiste en buscar
los restos (materiales) más prominentes del paisaje, sobre
todo los vestigios de estructuras o construcciones de
yacimientos y patrones de asentamiento (Renfrew y Bahn,
1998; Roskams, 2003).
La inspección superficial en arqueología incluye dos métodos
de identificación de yacimientos (sitios arqueológicos); uno
es la consulta de fuentes documentales y el otro la evidencia
toponímica (Renfrew y Bahn, 1998). Antes de prospectar en
campo es fundamental obtener la información existente
sobre la zona de estudio. Las fuentes bibliográficas
multidisciplinarias son de suma importancia, pues los
estudios arqueológicos anteriores, etnografías, cartografías,
toponimias, catastros, fotografías aéreas, consultas con las
personas de la zona y demás fuentes permiten tener una
idea clara del lugar (Martínez, 2009).
La prospección superficial en la práctica radica en delimitar
la región o sitio arqueológico que se debe investigar, sus
fronteras naturales, culturales o arbitrarias (Renfrew y
Bahn, 1998). Para este estudio se realizó una prospección
superficial asistemática, la cual consiste en un recorrido a
pie por la zona, la recolección de artefactos superficiales y
el registro de su localización junto con la de las estructuras
que hubiese (Renfrew y Bahn, 1998).
El componente de la investigación histórica fue fundamental
para el proyecto, por lo que se realizó la recolección de datos
históricos en bibliotecas y archivos públicos y privados.
58
Resultados de la tercera fase del proyecto de registro y reconocimiento de sitios arqueológicos históricos de El Salvador
La provincia añilera de San Salvador
La principal área de cultivo del añil en Centroamérica se
extendía desde las zonas costeras de Escuintla (Guatemala),
a través del actual El Salvador, hasta el área de las tierras
bajas del oeste del pacífico nicaragüense (Browning, 1998).
San Salvador, durante la mayor parte del período colonial,
estuvo conformado por las demarcaciones de San Salvador,
San Vicente, San Miguel y Santa Ana; estos comprenden
el actual El Salvador con todos los departamentos,
exceptuando los actuales departamentos de Sonsonate y
Ahuachapán.
La concentración geográfica, los suelos ligeros, fértiles y bien
drenados de los valles y laderas bajas (Browning, 1998) eran
las condiciones propicias para el cultivo y explotación del
añil. Tómas Gage, religioso y viajero, hacia la primera mitad
del siglo XVII, se refiere así de la provincia de San Salvador:
Es el más rico de los países que dependen de
esta ciudad (Guatemala), porque allí se fabrica la
mayor parte del añil que se manda de Honduras
(Puerto Caballos) a España, teniendo además un
gran número de ricas haciendas de ganado, que
se hallan en todo este país, cuyo terreno es fértil
y muy útil a sus habitantes por el comercio que
hacen (Gage, 2010, p. 313).
Hacia 1620, en las vecindades de la provincia de San
Salvador, se tenían más de doscientos obrajes para
beneficiar añil (Escalante, 1998). Para 1740, Gálvez Corral
(1935), en su “Relación Geográfica de la Provincia de San
Salvador”, describe que existen 267 haciendas, dentro
de las cuales existen 618 obrajes. Con dicha cantidad de
obrajes, la provincia de San Salvador era por mucho la
mayor productora de la tinta de añil del Reino de Guatemala.
La importancia de la producción de añil en las provincias
sansalvadoreñas llevarían, en 1635, a fundar el pueblo de
San Vicente de Lorenzana, el cual se elevó a la categoría
de villa en 1658, con la designación de San Vicente de
Austria. Esta villa habría de surgir para congregar a familias
peninsulares y criollas (Escalante, 1998), las cuales se
dedicaban a la producción de la tinta de añil.
Hacia 1750, los precios del añil se habían multiplicado,
convirtiéndose la producción de añil en una actividad
fundamental de la economía del Reino de Guatemala. Este
producto se comerciaba a partir de ferias, en la Provincia
de San Salvador. Así, las principales ferias añileras eran las
de Apastepeque, San Vicente, Chalatenango, San Miguel,
Sensuntepeque y Zacatecoluca (Amaya, 2006). Para la
regulación de precios en las ferias, se estableció en 1782 el
Real Montepío de Cosecheros de Añil, el cual tuvo funciones
de una banca refaccionaria y con adelantos de dinero para
que los añileros pudieran cultivar la hierba y procesarla
como créditos de avío (Escalante, 1998). Sin embargo, y para
remate de los cosecheros de la provincia de San Salvador,
los precios los dictaminaban los comerciantes de Santiago
de Guatemala, los que a su vez se encontraban relacionados
con las grandes casas importadoras en España. De esa
manera, al final era Cádiz el que aplicaba su voluntad al añil
procedente del área centroamericana (Escalante, 1998).
Como contraparte al monopolio guatemalteco del Montepío,
los productores salvadoreños crearon la Sociedad de
Cosecheros de Añil, la que prestaba dinero para la cosecha
y comercialización del añil (Amaya, 2006).
A finales del siglo XVIII, describía Domingo Juarros y
Montúfar (2000), en su Compendio de la Historia de la
Ciudad de Guatemala, sobre la provincia de San Salvador,
afirmando que es la más rica del Reino de Guatemala debido
a la producción del añil o índigo, y que aunque el jiquilite se
da en la mayor parte del Reino, no se compara con el que se
trabaja en la provincia de San Salvador.
Sin duda, la producción de añil definió el marco económico
de las provincias de San Salvador. Hacia 1770, Cortés y
Larráz describe, refiriéndose a la provincia de San Salvador
que:
“Toda la tierra de las haciendas es llana y sin más
arboledas que las que hay con bastante espesura
en los causes de los arroyos…todo el territorio es
muy fértil para todo género de frutas… y tintas;
éstas se cogen en mucha abundancia, porque se
llevan todo el cuidado y afición de los dueños de las
haciendas (Cortés y Larráz, 2000, p. 101).
A finales del siglo XVIII, los añileros se consideraban víctimas
de los comerciantes. Esto llevó a las autoridades coloniales
a intentar favorecer a los productores salvadoreños, con las
claras intenciones de debilitar a los poderosos comerciantes,
59
Resultados de la tercera fase del proyecto de registro y reconocimiento de sitios arqueológicos históricos de El Salvador
estableciendo el Montepío, que ayudaría a los añileros con
sus créditos. Estos y otros hechos, como el traslado de la
feria del añil de Guatemala hacia San Vicente, crearon en
las provincias un conflicto de poder, el cual nunca pudo ser
resuelto durante el período colonial (Lindo-Fuentes, 2002).
Hacia los inicios del siglo XIX, en la provincia de San Salvador,
cuando se forman los movimientos en contra del status
quo, la elite criolla añilera se concibió, por vez primera,
como diferente de la guatemalteca, entendiendo que sus
intereses estaban en contraste a los de Guatemala (López
Bernal, 2006). De ahí en adelante vendrían los cambios en
las estructuras de poder que llevarían a los movimientos de
independencia, y, estos a su vez conformarían los procesos
que al final del siglo XIX provocarían las nuevas naciones
centroamericanas.
Análisis y discusión de los resultados
Esta tercera fase del proyecto registró y documentó
diecisiete obrajes de añil de la época colonial y primera
mitad del siglo XIX, localizados en la zona paracentral de El
Salvador, específicamente en los departamentos de La Paz y
San Vicente. Muchos de los cuales se pueden definir como
artesanales o de Pilón, Reales de tres o dos pilas en desnivel
y los hidráulicos con la variedad de proceso de producción
vertical u horizontal, que parecen ser más escasos para las
muestras estudiadas de México y Guatemala, pero que para
El Salvador aparecen con más regularidad, tal y como se
documentaron en este proyecto.
La mayoría —16 de 17—, de los obrajes registrados por esta
investigación se encuentran dentro de las áreas de acción
de ocho haciendas, las cuales aparecen mencionadas en la
obra citada de Gutiérrez y Ulloa (1962), Estado General de
la Provincia de San Salvador: Reyno de Guatemala (Año de
1807). Por lo tanto, se teoriza que son parte de los muchos
obrajes que las haciendas añileras poseían.
La Hacienda añilera El Marquesado, que en su momento,
hacia 1807, era propiedad de Pedro Vidaurre, se
documentaron tres obrajes uno de tipo hidráulico de varias
pilas y con línea de producción horizontal, y los otros dos
de los denominados Reales, con dos pilas escalonadas
en desnivel y producción en línea vertical. En la hacienda
añilera Achichilco, propiedad de Esteban Yndice a inicios del
siglo XIX, se documentaron tres obrajes para beneficiar añil
uno hidráulico de proceso de producción en línea vertical
y dos más de tipo Real, de pilas en desnivel y proceso de
producción en línea vertical.
En las haciendas Achiotes y San Andrés Achiotes, propiedad
de los herederos Velázquez, se documentaron dos obrajes
de añil, los cuales pertenecen a la tipología de obrajes
Reales de dos pilas en desnivel. Por su parte, el registro
de los obrajes de añil de la Hacienda Concepción Ramírez,
propiedad del señor Marqués de Aycinena, constituye
una muestra importante dos obrajes hidráulicos; uno de
producción en línea vertical y otro en línea horizontal. Otra
de las propiedades del Marqués de Aycinena fue la hacienda
añilera de San Marcos, en la cual se documentaron los
restos de un obraje, el cual se encontró en deplorable
estado de conservación, por lo que no se pudo determinar
su tipología. Jalponga era una hacienda añilera propiedad
de Dorotea González, en la cual se documentó un obraje de
añil que pudo haber sido hidráulico, pero debido a que en su
mayor parte se encuentra bajo tierra no se logró determinar
a qué tipo de obraje pertenecía.
La propiedad de don Antonio Guzmán y sus socias era
la hacienda añilera La Labor, en la cual se pudieron
documentar dos obrajes para beneficiar el añil; uno del tipo
Real, pero con la excepcionalidad de estar hecho/excavado/
esculpido dentro de una capa de tierra sólida, compacta y
arcillosa conocida como talpetate; y el otro es un obraje
hidráulico de cuatro pilas con un sistema de producción
en línea vertical. En la hacienda añilera de Juan Francisco
Quintanilla, denominada Rosario, se documentó un obraje
de tipo Real de dos pilas en desnivel y en muy mal estado
de conservación. Por último, el obraje de añil de El Paraíso
es un obraje de tipo Real con dos pilas; una de batido y la
otra de remojo en línea de producción vertical; se encuentra
contiguo a la hacienda la Labor, por lo tanto, podría ser parte
de la misma hacienda propiedad de Quintanilla, que, al igual
que las anteriores, fueron documentadas hacia 1807 por
parte de don Antonio Gutiérrez y Ulloa (1962).
La historia de la extracción, comercio y exportación de la
tinta de añil ha estado arraigada a la sociedad salvadoreña
desde los tiempos coloniales. La provincia colonial de San
Salvador, que incluía doce de los actuales departamentos
60
Resultados de la tercera fase del proyecto de registro y reconocimiento de sitios arqueológicos históricos de El Salvador
de El Salvador, a excepción de Ahuachapán y Sonsonate,
era la región más rica en producción de tinta del Reino de
Guatemala. A inicios del siglo XIX existían 447 haciendas de
tinta y ganado, según lo refería el Intendente de la Provincia
de San Salvador Antonio Gutiérrez y Ulloa (1962).
En su mayoría, los vestigios arqueológicos que esta
investigación ha documentado constituyen un segmento del
rico patrimonio cultural colonial de los siglos XVIII y XIX con
que cuenta el actual territorio salvadoreño. Los obrajes para
beneficiar añil de las haciendas coloniales salvadoreñas
formaban parte de esa cadena de producción de la tinta de
añil, la cual era parte fundamental de la economía colonial
local y regional de exportación.
El estudio del patrimonio arqueológico-histórico edificado es
de fundamental interés para el conocimiento y comprensión
de la historia de las sociedades del pasado. Investigar,
estudiar y entender el papel que jugaron los obrajes
en la producción de la tinta de añil es fundamental para
comprender la economía de las haciendas, las dinámicas
territoriales y la construcción de identidades que se
dieron en el entorno a San Salvador colonial. Es tratar de
entender las dinámicas de una sociedad dividida en castas,
de carácter multiétnico —indios, mulatos, negros, ladinos,
mestizos, criollos y españoles—, por ende, multicultural, que
revelaba ya los malestares en contra del régimen colonial y
las autoridades del Reyno de Guatemala, a consecuencia de
las trabas comerciales que se les imponía a los cosecheros
y productores de añil, la imposición de nuevos y más altos
estancos, así como la negativa de Guatemala de conceder
a San Salvador el camino en convertirse en Obispado y no
depender de las autoridades eclesiásticas guatemaltecas
para los fines clericales, entre otros factores.
Durante gran parte del siglo XIX, el cultivo del añil siguió
desarrollándose como el producto de exportación de
mayor importancia de la provincia de San Salvador, luego
República de El Salvador, esto a pesar del aparecimiento
de los tintes sintéticos en Europa. Se puede situar a 1880
como el comienzo de la supremacía del café como principal
fuente de riqueza de El Salvador, y el punto de partida de la
declinación del cultivo del añil, que durante mucho tiempo
habría sido el sostén de la economía Centroamericana.
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61
Resultados de la tercera fase del proyecto de registro y reconocimiento de sitios arqueológicos históricos de El Salvador
Figura 1.
Se muestra parte de los muros y paredes de las pilas de añil del obraje tipo Real del sitio El Marquesado II, San Vicente.
Figura 2.
Se muestra parte de los muros y paredes de las pilas de añil del obraje tipo del hidráulico, sitio Concepción Ramírez II,
Tecoluca, San Vicente.
62
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 62-70, ISSN: 2218-3345
El culto a San Benito de Palermo,
elementos de la herencia africana
en El Salvador
Resumen
Numerosos elementos culturales en El Salvador tienen su
origen en un pasado que poco a poco se va revelando.
Tal es el caso del culto a San Benito de Palermo, que
se encuentra en la zona oriental del país. Esta región,
desde la época colonial estuvo conformada por diversas
comunidades étnicas que le dieron forma a muchas
expresiones que se practican hoy en día. Este articulo
muestra cómo la identidad y los elementos culturales
de los afrodescendientes se mantienen vigentes en la
actualidad en el país.
Palabras clave: Religiosidad popular, afrodescendientes,
relaciones étnicas, asimilación cultural, San Benito de
Palermo.
José Heriberto Erquicia Cruz
jose.erquicia@utec.edu.sv
Martha Marielba Herrera Reina
Dirección de Investigaciones y Escuela de Antropología
Universidad Tecnológica de El Salvador
Abstract
Many cultural elements in El Salvador have their origin
in a past that slowly reveals itself, as in the case of the
cult of San Benito de Palermo that is located in the east
of the country. This region, from the colonial period
consisted of various ethnic communities that have
shaped many expressions that are practiced today. This
article shows how the identity and cultural elements of
afro-descendants still exist today in the country.
Keywords: Popular religiosity, african descent, ethnic
relations, cultural assimilation, San Benito de Palermo.
Introducción
La diversidad étnica y cultural del actual territorio
salvadoreño es el resultado de la fusión de elementos de
los distintos grupos étnicos que cohabitaron en la región.
Para el caso de la zona oriental, en departamentos como
Usulután y San Miguel, se mantienen vigentes prácticas y
tradiciones de los afrodescendientes que se asentaron en
dicha zona, esto debido a la cantidad de haciendas añileras
y ganaderas que adquirían esclavos negros y que tenían
también como sus trabajadores a los hijos de estos nacidos
en las mismas haciendas. De esta forma, la religiosidad
63
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador
se impone creando un abanico de creencias que fueron
adoptadas y apropiadas por los afrodescendientes de esa
zona, misma que en la actualidad conserva ese mundo
religioso creado desde la época colonial.
La investigación permite mostrar que la identidad y los
elementos culturales de los afrodescendientes se mantienen
vigentes en nuestro país. Esta investigación es parte de
las “etnografías de rescate” que pretenden el salvataje, la
puesta en valor y la difusión de las tradiciones, las prácticas,
los ritos, los conocimientos del presente y los ancestrales
de las diversas comunidades que coexisten en El Salvador
del presente.
El abordaje de la diversidad étnica en El Salvador ha sido
un tema de bajo perfil, pues por generaciones se ha dicho
y sustentado, desde el Estado y las instituciones, que tal
diversidad no existe, pues “todos somos mestizos”. Sin
embargo, no se puede obviar la existencia de la diversidad
de grupos étnicos que han habitado a través de los
siglos en el actual territorio salvadoreño. Así, los grupos
afrodescendientes aparecen desde el siglo XVI a la llegada
de los europeos al territorio nacional. Los censos coloniales
no dejan mentir sobre la clara e importante presencia de
esclavos negros, negros libres, mulatos, pardos, zambos,
panunes y otras categorías de ascendencia africana.
Dicha presencia se negó por parte de los gobernantes e
intelectuales liberales de finales del siglo XIX e inicios
del XX, construyendo un Estado salvadoreño “libre de
negros”, en una clara negación a su pasado multiétnico
y a una idealización del “blanqueamiento de las razas”,
volviéndose una sociedad racista en aras del progreso y la
modernización.
El objetivo general de la investigación fue registrar
las expresiones religiosas y los elementos identitarios
afrodescendientes de la fiesta a San Benito de Palermo a
través del método etnográfico y las fuentes históricas en la
zona oriental de El Salvador. Este se vincula con las preguntas
problema que orientaron esta investigación. Estas son: a)
¿Cuáles son los orígenes del culto a San Benito de Palermo
en la zona oriental de El Salvador? b) ¿Qué grupos étnicos
influyeron en la práctica a San Benito de Palermo? c) ¿Cuáles
son los motivos del cambio de patronazgo en Ereguayquín?
d) ¿Qué cambios ha tenido el culto a San Benito de Palermo
desde sus orígenes hasta la actualidad? e) ¿Cuáles son los
elementos de los grupos afrodescendientes en las prácticas
vigentes en el culto a San Benito de Palermo?
La metodología empleada estuvo bajo el enfoque cualitativo,
donde el método comparativo y el etnográfico permitieron
tener un acercamiento de primera mano de los datos que
asintieron la comprensión del fenómeno estudiado. En cuanto
a las técnicas operativas de la investigación cualitativa, se
empleó la entrevista semiestructurada a los practicantes
y creyentes del culto, así como la observación directa
con participación moderada, pues se trata “de observar
reflexivamente y críticamente los procesos sociales y no
de condenar o elogiar” (Sánchez, 2001). En este aspecto, se
utilizaron recursos como cámara fotográfica digital, cámara
de video, grabadora y diario o libreta de campo.
Cultos cristianos de africanos esclavizados
y afrodescendientes en América
La cristianización en África se ubica en el Reino del Congo,
a mediados del siglo XV y a inicios del XVI, cuando los
portugueses buscaban romper el monopolio árabe de las
especias, que surtía el Mediterráneo. En esas fechas se
construyeron iglesias, entre ellas las de Nuestra Señora de
las Victorias, Santiago el Mayor, Nuestra Señora del Rosario,
Concepción, Santa Cruz, San Juan Bautista, San Miguel
Arcángel y la Santa Isabel. Entre las órdenes religiosas
que se asentaron en África estuvieron la Orden de Cristo,
carmelos, jesuitas y capuchinos, quienes se dieron a la tarea
de evangelizar esas tierras (Cáceres, 2008), en donde la
principal actividad de los misioneros era el bautismo, tanto
de los lugareños como de los esclavos que desde regiones
más lejanas eran llevados a las costas y posteriormente
obligados a migrar a lugares lejanos.
Establecidas las colonias en América, la necesidad de
esclavos se hizo mayor, eso trajo consigo la idea de
cristianizarlos, esta era una manera de incorporarlos e
integrarlos de forma dócil al sistema productivo. Para ellos
se crearon normas de evangelización que emanaron de
cédulas reales. De estas, la más temprana aparece en el año
1537, donde se declara que los que han de ir a la doctrina
cada día son los indios, negros y mulatos que sirven en las
casas ordinariamente. Esta debía de prorrogarse de por
64
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador
vida, es decir, abarcaba a toda la población negra y mulata
que estaba asentada en tierras americanas. A ella debían
asistir los negros y mulatos durante una hora los domingos
y días de fiesta, así mismo, se establecieron como lugares
de catequesis (preferentemente) parroquias en las ciudades
y ermitas o iglesias de las haciendas y los ingenios en las
zonas rurales, entendiéndose que estas eran las zonas con
mayor población negra y mulata debido a las actividades
económicas en las que participaban, aunque una de los
limitantes al inicio fue la lengua que hablaban los esclavos;
posteriormente, los descendientes de estos ya no tendrían
ese problema (Vila, 2000).
Según Vila (2000), estas formas de llevar la misión de
salvación de almas de los no cristianos en la época colonial
traía consigo la enseñanza de los sacramentos, como:
bautismo, penitencia, eucaristía, confirmación, extrema
unción, matrimonio y orden sacerdotal, es este último
el único sacramento vedado a los negros hasta fines del
siglo XVIII, como consecuencia del Concilio de Trento, que
prohibió ordenar a gente de procedencia ilegítima y que
tuvo repercusión en el segundo Concilio Limense.
1
que
cierra la puerta del sacerdocio a indios y mestizos y, por
supuesto, a negros y mulatos. Finalmente, se les permite su
ingreso al sacerdocio.
Cada uno de estos jugaron un papel importante en
la población; además, debían tener conocimiento del
padrenuestro, credo, mandamientos de la ley de Dios y
de la Iglesia, y los pecados capitales; también importante
era la participación en las devociones, fiestas y cofradías,
que suponían para ellos (negros y mulatos) un espacio de
libertad y una forma de expresar sentimientos que estaban
más acordes con su cultura, con todo esto se les inculcó
la idea de que a través de esto podían llegar a la salvación
de sus propias almas (Vila, 2000). De una u otra forma, los
mecanismos de cristianización en América lograron que
tanto indios como esclavos negros y sus descendientes
se convirtieran en fieles bajo una advocación de un santo
o de un misterio. Los africanos lograron, con el paso del
tiempo, relacionar la nueva religión con las creencias de
sus antepasados. Esto paulatinamente dio origen a cultos
y religiones sincréticas que se mantienen hasta hoy en día.
San Benito de Palermo
La devoción a San Benito de Palermo tiene a sus fieles en
diversos países como España, Italia, México, Guatemala, El
Salvador, Nicaragua, Venezuela, Argentina, Colombia y otros
países de América Latina. Según las crónicas franciscanas
2
, se dice que San Benito de Palermo nació en un pueblecito
de Mesina (Sicilia, actualmente isla mediterránea que
pertenece a Italia). Sus padres, esclavos manumitidos,
aunque oriundos de moros, eran muy buenos cristianos.
Caritativos con los pobres, fieles cumplidores de las leyes de
la Iglesia, estaban de administradores de un rico señor, que
les prometió dar libertad a sus hijos si los llegaban a tener;
desde joven las curaciones milagrosas, la multiplicación de
los alimentos y el discernimiento de los espíritus vinieron
a ser en él familiares y comunes. Recibió los últimos
sacramentos, y el 4 de abril de 1589 expiró a la edad de
63 años. Su culto se difundió ampliamente y vino a ser el
protector de los pueblos negros. Fue canonizado por Pío VII
el 24 de mayo de 1807 (Franciscanos, 2011).
En este caso, las imágenes sagradas y la religiosidad popular
de los iconos adoptados y adaptados en la comunidad
afrodescendiente se identificaron con el origen del santo,
es decir, toman su imagen y la adaptan a su realidad. Entre
los aspectos humanos que los identifican encontramos,
además del color de la piel, los trabajos que tuvo que
realizar en el campo, ya sea en el pastoreo o la agricultura,
mismos que los esclavos en América tenían que realizar
en las haciendas o ingenios donde los habían llevado. En
el caso de México, este culto se ubicaba en el siglo XVI,
cuando se funda la Cofradía de San Benito; se constituyó
por fieles de ambos sexos, sin importar su arte u oficio ni
su calidad de libres o de esclavos. Reunidos alrededor de
la figura del santo patrón, escuchaban misas y sermones,
rezaban responsos por el alma de sus hermanos difuntos,
aprendían el catecismo, celebraban sus fiestas dentro del
calendario litúrgico, recibían los sacramentos, realizaban
1
Concilio realizado en Lima, a finales de la década de 1560, en donde siempre se mantiene la idea de la evangelización de los indios y esclavos, legisla sobre la organización,
reforma visitas de las doctrinas; en especial indica y da medios para combatir la idolatría. Fueron convocados los obispos de Charcas, Paraguay, Popayán, la Imperial,
Santiago de Chile, Cuzco, Quito, Panamá y Nicaragua.
2
Tomado del sitio web: http://www.franciscanos.org/santoral/benitopalermo.htm
65
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador
actividades religiosas y adoptaban conductas y actitudes
dirigidas por un sistema de valores hispánicos y católicos
(Roselló, 2008).
Por un lado, el ingreso a la cofradía les permitía tener
derechos que les brindaban seguridad material y espiritual,
y por otro, tenían obligaciones que les daban oportunidad
de sociabilizar, dar santa sepultura y organizaría misas y
responsos que aseguraban la salvación directa del alma,
se comprometían a cuidar de los huérfanos y las viudas
de todos los miembros de la corporación. Esta les permitía
discutir problemas comunes a su condición étnica, el acceso
a servicios de asistencia social para ellos y sus familiares,
la posibilidad de interactuar socialmente con otras
corporaciones, así como la adquisición de una personería
jurídica y oficial. También se evidencia el aspecto festivo de
la tradición religiosa; nos dice que los tambores de cuero
de buey, las sonajas, los cantos, bailes, risas y carcajadas
solían acompañar las procesiones de sujetos que no podían
olvidar la herencia de su pasado africano (Roselló, 2008).
Es la existencia de estos espacios asociativos, y no la mera
presencia de población de origen africano, la que favoreció
y dio continuidad a sus distintas manifestaciones. Esta
situación de representaciones culturales afrodescendientes
puede ser que se repita en varios países donde, en la
actualidad, se les ha negado e invisibilizado, es decir, donde
su presencia está vigente, sin que la población tenga el
conocimiento de sus orígenes.
En todos los casos, los africanos y afrodescendientes se
reunieron en torno a un santo y a su respectiva cofradí. En
palabras de Gutiérrez (2011):
Quedaron estructuradas en cierto modo siguiendo
líneas tribales o étnicas, en ello influyó el ambiente
social de la pureza de sangre y la estratificación por el
color que dominaba en la sociedad, así encontramos
entre sus miembros a negros, mulatos, pardos,
esclavos y libres pertenecientes a diferentes etnias
africanas, preferentemente varones, aunque hubo
cofradías que admitieron mujeres. Las cofradías, según
línea étnica, fueron particularmente preferidas en el
siglo XVI (Gutiérrez, 2011, p. 2).
Y agrega que es:
Lógico que sus miembros fueran esclavos o libres que
tuvieran cierto nivel socioeconómico como los esclavos
domésticos, jornaleros o conocedores de algún oficio
debido a que eran los únicos con algún tiempo libre y
con recursos suficientes para dedicarse activamente a
estas prácticas religiosas (Gutiérrez, 2011, p. 3).
Entonces, en este caso, los miembros de la cofradía tenían un
estatus distinto al de los demás. Sin embargo, no se negaba
el acceso a los demás a ser partícipes de la festividad en
honor al santo que veneraban.
Si bien la religiosidad y las creencias de los africanos y
afrodescendientes se fusionó en algún momento, en la
actualidad esas expresiones religiosas y festivas son las que
han mantenido tradiciones que pudieron haberse originado
en la época colonial y que se mantienen vigentes, además
de otros cultos a imágenes relacionadas con estos grupos
étnicos, por medio de cofradías que en su momento fueron
las instituciones que les permitieron reforzar su identidad
en un entorno geográfico distinto al suyo, en una tierra a
la que no pertenecían y a la que poco a poco tuvieron que
adaptarse y sobrevivir, sin olvidar sus raíces culturales. Tal
es el caso de la celebración a San Benito de Palermo en
la zona oriental de El Salvador, territorio que anteriormente
estuvo poblado por los africanos y mulatos que trabajaban
en las haciendas que producían añil, en donde se reunían
y convivían en torno a un santo de origen africano con el
que se identificaban y en el que se reflejaba su condición de
campesinos y de grupo excluido por la sociedad en la que
estaban inmersos.
De las cofradías legales y de las clandestinas:
cultos públicos y privados
Los espacios donde se realizan cultos religiosos son
diversos. Estos pueden tener sus variantes de acuerdo
con la geografía, grupo étnico que lo práctica, año de su
fundación y apropiación del santo venerado, por mencionar
algunos ejemplos. Este es el caso del culto a San Benito de
Palermo en la zona oriental de El Salvador, el cual presenta
particularidades en cada uno de los lugares recorridos
66
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador
durante esta investigación que vale la pena mencionar.
Solo abordaremos cuatro de ellos; sin embargo, todos
estos forman parte de una región que en la época colonial
Figura 1. Mapa de ubicación de sitios que celebran a San Benito de Palermo en el oriente del territorio salvadoreño. Elaborado
basado en el trabajo de campo de la investigación por Heriberto Erquicia, 20011. En: Mapa de Michigan State University, Projection:
Lambert Conformal Conic, Geographic Coordinate System: North American Datum, 1983.
correspondía al Curato de Ereguayquín (figura 1). Esta
geografía sagrada establecida en ese periodo se mantiene
vigente en la actualidad.
67
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador
Los grupos afrodescendientes que mantuvieron en la época
colonial la tradición del culto a San Benito de Palermo, santo
de antepasados africanos, vieron en la música y la danza
una forma de expresión de la identidad heredada de sus
antepasados, aquella fue adaptada a las condiciones de vida
del nuevo lugar de residencia. Desde el inicio del período
colonial, las danzas de los negros acompañaban los cortejos
religiosos y también la celebración de las fiestas reales, en
donde los negros tocaban sus instrumentos musicales —
flautas y sobre todo tambores—, distinguiéndose los grupos
por sus ritmos específicos y su propio estilo (Bernard,
2001, p. 57). Por ello, apunta Giménez (2010), “tenían a la
danza como una forma de comunicación de su concepción
religiosa, alegórica a sus condiciones de vida y medio de
sociabilidad de la comunidad” (Giménez, 2010, p. 1). En este
sentido, las prácticas religiosas fusionadas con elementos
no cristianos les daba un sentido de pertenencia e identidad
como grupo social excluido. En un inicio podría haberse
tratado de reuniones que realizaban los negros esclavizados
que laboraban en las diferentes plantaciones de añil, caña
de azúcar y tabaco de las haciendas cercanas al antiguo
curato de Ereguayquín, manteniendo siempre lo subalterno
como una forma de expresión y resistencia social, que con
el paso del tiempo fue perdiendo ese sentido. Sin embargo,
en la actualidad, aunque es una tradición religiosa aceptada
por la institución de la Iglesia católica, los remanentes se
mantienen vigentes en la práctica, aunque se haya perdido
con el tiempo el verdadero origen de esta tradición, que solo
en contados casos llegó a funcionar como una cofradía de
negros y, en otras, como agrupaciones clandestinas.
El establecimiento de esa institución religiosa no se
encuentra fácilmente en los registros documentales en
la región centroamericana. Lo poco que se localiza de
las cofradías a San Benito de Palermo, para el caso de El
Salvador, nos relatan que en el año:
1651, ya existía una cofradía en el monasterio
franciscano de San Salvador. Veinte años más
tarde, fue fundada otra en una propiedad cerca de
Zacatecoluca, y pronto otras dos fueron reportadas
funcionando en la vecindad de San Diego de la
Gomera, incluyendo a otra clandestina en el cercano
ingenio dominico [éstas últimas vecindades de la
Gomera y el ingenio Dominico se encuentran en
Guatemala]. Los encargados de esta propiedad se
quejaron de que las personas esclavizadas se habían
negado a informar todo lo relacionado con dicha
cofradía. La preocupación de los frailes provino del
miedo de la Iglesia de que la ausencia de supervisión
de una cofradía podría ser naturalmente un asilo
para la práctica de rituales poco ortodoxos, como
probablemente sucedió. Esta cofradía “ilegal”, en
otras palabras, representaba el rechazo, o al menos
la resistencia, al orden colonial prevaleciente, como
lo fueron las actividades de los cimarrones (Lokken
y Lutz, 2008, p. 35).
En este punto, valdría la pena recordar que también
empleaban creencias que hacían que la sociedad viera
con malos ojos esa fusión de elementos de creencias no
cristianas que estaban presentes en la religiosidad de los
negros esclavizados y libertos.
Por otra parte, en los documentos de las Visitas Pastorales,
retomados por Loucel (2011), refieren a que,
en 1670 existió una cofradía fundada en honor a
San Benito de Palermo, a quien también llamaban
moro o el negro, por el color de su piel y ascendencia
africana y la cual fue fundada en el Convento de
Santo Domingo por Luis de Figueroa, indio alcalde
de dicha cofradía y por Manuel Hernández y Juan
Ventura, negros (Loucel, 2011, p.7).
Por otro lado, Santiago Montes menciona que el arzobispo
de Guatemala Pedro Cortez y Larráz documenta, en el
siglo XVIII, que la cofradía de San Benito de Palermo en la
Parroquia de Ozulutan y sus anexos contaba con un capital
de 309 pesos (Montes, 1976, p. 54).
Así, se observa entonces que probablemente las primeras
asociaciones mencionadas anteriormente estaban relacionada
al cimarronaje, mientras las segundas otorgan un estatus
legal distinto de una cofradía fundada por los grupos étnicos
y reconocida por la institución religiosa. Sin embargo,
cabría la posibilidad de que muchas de las funciones de los
miembros de estas asociación fueran similares a los que se
tenían en la cofradía de Veracruz en México y otros países
con similares características étnicas, religiosas, económicas
y políticas.
Estas organizaciones, propias de este grupo étnico, llevan a
verificar que desde el siglo XVII las ideas del uso de espacios
68
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador
permitidos y clandestinos permitían la identificación y
socialización con los diversos grupos étnicos que convivían
en ese territorio. Estos espacios ofrecían hasta cierto punto
un poco de libertad, que implicaba resistencia al orden
social impuesto (Giménez, 2010, p. 8).
Por una parte, tenemos lo público en cuanto al culto mismo
del santo negro; era permitido por la Iglesia por el mismo
hecho de estar legalizada la organización y la protección
a la imagen. Esto implica la puesta en práctica de los
rituales permitidos por la Iglesia, y que poco a poco fueron
adquiriendo elementos culturales de los afrodescendientes;
por otra, el ámbito privado y las practicas “ocultas”
permitieron que se mantuvieran elementos tradicionales
de la cultura africana. No hay un momento que se pueda
identificar como el punto de unión de ambas. Sin embargo,
estas se evidencian en los remanentes religioso-culturales
en la actualidad; por ejemplo, la religiosidad, la música y los
bailes.
En todos los casos del culto en la región investigada, se
relatan historias de actividades cotidianas. Sin embargo, por
el entorno y la representación de las imágenes actuales, es
más representativo de la labor agrícola propia de la región.
Recuérdese que, desde la época colonial, los africanos
y afrodescendientes estaban ligados a estas actividades
económicas. En este sentido, hay un vínculo directo con
las mismas formas de vida. Entonces, la población adquirió
con el tiempo un símbolo propio, al que adaptaron según
sus necesidades y la concepción de la vida. Entonces,
el San Benito de Palermo es el campesino mismo, el que
sana de enfermedades a niños y adultos, donde también
es importante tomar en cuenta las condiciones sociales,
culturales, económicas y políticas que dieron forma a estas
expresiones.
En relación con la organización, llega la hora ritual donde
son los devotos y fieles de San Benito de Palermo los que
se encargan de pagar por los favores recibidos por medio
de la Danza de los Tabales,
3
los acompaña el grupo musical;
que es imprescindible en la tradición, en este caso, es la
Chanchona. Entonces, este es un trabajo colectivo en donde
todas las partes involucradas aportan para mantener viva
la tradición religiosa, misma que es parte de su patrimonio
inmaterial local, que se ha mantenido vigente en el tiempo
y que, según la mayordoma, se va transmitiendo de
generación en generación.
Las experiencias que se viven dentro de la tradición son
el resultado de repetir aspectos pasados, ya sean reales
o inventados, que pueden ser innovados o reinventados,
siempre y cuando estas modificaciones respondan a
elementos similares que permitan la continuidad social.
Esta tradición busca inculcar valores y normas de
comportamiento por medio de la repetición dentro del
contexto social en el que surgió. Quizá en este último
elemento no estén tan claros con los diferentes grupos
étnicos que con el tiempo fueron dando forma al culto a
San Benito de Palermo y, a su vez, a la Danza de los Tabales.
Cada uno de los lugares registrados en esta investigación
presentan particularidades en cuanto a peticiones y exvotos,
ya sea en espacios públicos o privados:
3
Tabal probablemente sea una modificación de Atabal, este es un instrumento árabe de percusión compuesto de dos timbales de diferente dimensión provistos de dos vaquetas,
tiene en castellano sus equivalentes en caja, atambor y tambor, esta viene del árabe tambur y que en otras lenguas se le nombraba tambour, tambor, atabor y también tabal.
Tabla 1. Resumen de elementos religiosos del culto a San Benito de Palermo
Población
donde se
practica
Principal
lugar de
culto
Fechas
rituales
Significado del
culto
Elementos
asociados a la
imagen
Elementos
rituales
Ereguayquín,
Usulután
Iglesia 15 y 16 de
mayo
Culto orientado a la
abundancia de las
cosechas.
Sombrero de
palma, matata,
chorizos, cuma,
tecomate, cruz.
Danza de los
Tabales, misas,
novenarios,
procesión.
69
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador
San Rafael
Oriente, San
Miguel
Iglesia
Día de
pentecostés
Culto orientado a
la agricultura y la
salud de los niños.
Sombrero de
palma, matata,
listón rojo,
tecomate y
cruz.
Danza de
los Tabales,
relaciones, misas,
novenarios,
procesión.
Uluazapa, San
Miguel
Culto
familiar
Día de
pentecostés.
Culto orientado
a la sanación
de enfermos en
general.
Ninguno. La
imagen es
la que más
representa a
los africanos
esclavizados.
Danza de los
Tabales, donde
utilizan trajes
especiales, rezos,
novenarios y altar.
Cantón
La Presa,
Usulután
Culto
familiar
16 de mayo
Culto orientado
a pagar diversos
tipos de peticiones.
Sombrero de
palma y cruz.
Las Zapatetas
o Danza de los
Tabales, rezos,
novenarios y altar.
Santa Elena,
Usulután
Ya no
existe
24 y 25 de
diciembre
Culto orientado a la
agricultura.
Danza de los
Tabales, rezos,
novenarios y altar.
Cuadro 1. Cuadro resumen de los elementos rituales del culto a San Benito de Palermo en la zona oriental de El Salvador. Elaborado basado en el
trabajo de campo de la investigación por, Marielba Herrera, 20011
de organización y reunión, desde lo subalterno, permitía
expresar una resistencia social y participación dentro del
entorno donde se desenvolvían, probablemente surgidas en
contextos del cimarronaje; otras llegaron a ser reconocidas
por la Iglesia católica. Por tanto, eran cultos públicos donde
los negros esclavizados y afrodescendientes vieron una
oportunidad de estatus social.
Así sucedió con las cofradías de negros establecidas en
San Salvador y Usulután. Estas se establecieron en la época
colonial y desaparecieron con el tiempo. Cabría la posibilidad
de que muchas de las funciones de los miembros de dichas
asociaciones fueran similares a las que se tenían en otros
lugares con análogas características étnicas, religiosas,
económicas y políticas.
Por su parte, el culto privado adquiere una connotación
subalterna que se mantiene hasta la fecha en los pueblos
que formaban, en su momento, parte del antiguo Curato de
Consideraciones finales
La historiografía centroamericana ha abordado la temática
de los afrodescendientes para el istmo centroamericano. De
tal cuenta que la mayoría de estudios sobre la ascendencia
africana en El Salvador han sido vistos e investigados
desde la óptica de la historia. Otras ciencias sociales, poco
han desarrollado dicho tópico. Esta exploración formula
la contribución de investigar a los afrodescendientes
salvadoreños desde la antropología, desde la historiografía
y especialmente desde el estudio de una práctica religioso-
cultural.
El culto a San Benito de Palermo, es una de las expresiones
con elementos culturales afrodescendientes que se man-
tienen vigentes en la zona oriental del El Salvador. Cada uno
de ellos representa la forma en que estos grupos realizaban
sus prácticas religiosas dentro de la antigua provincia de
San Salvador y del curato de Ereguayquín. Estas formas
70
El culto a San Benito de Palermo, elementos de la herencia africana en El Salvador
Ereguayquín. En la actualidad, estos mismos poblados abren
espacios para los devotos locales, comparten una tradición
familiar que está compuesta de los mismos elementos que
el culto público; sin embargo, no cuentan con el recurso
económico de instituciones para sus festejos. Dichas
limitantes llevaron a un ritual privado, donde las prácticas
“ocultas” permitieron que se mantuvieran los elementos
tradicionales de la cultura africana. Esta idea de lo
subalterno les permite, como en el pasado, tener un sentido
de pertenencia e identidad como grupo social excluido.
Para ambas tradiciones —la pública y la privada—, la imagen
del santo negro refleja las realidades del campesinado, su
condición de trabajadores del campo. Es por esa razón que
la mayoría de San Benitos de Palermo han sido adaptados
por la comunidad y portan elementos como el sombrero, la
matata, el tecomate y otros que potencializan la identidad
campesina y seguramente del campesinado mulato de la
región, el cual se vio implicado de manera significativa en
la producción ganadera y agrícola de las haciendas añileras;
justamente como lo demuestran las fuentes historiográficas
centroamericanas que abordan el tema de la producción
agrícola en la época colonial.
En general, se trata de rituales de petición, ya sea
por abundancia de los productos agrícolas, la salud u
otros favores donde es importante tomar en cuenta las
condiciones sociales, culturales, económicas y políticas
que dieron forma a estas expresiones que se actualizan
y renuevan con el tiempo, pues estas son el resultado de
reproducir aspectos pasados, reales o inventados, que
pueden ser innovados o reinventados, siempre y cuando
estas modificaciones respondan a elementos similares que
permitan la continuidad social.
Esta tradición busca inculcar valores y normas de
comportamiento a través de la práctica dentro del contexto
social en el que surgió. Quizá en este último elemento no
estén tan claros con los diferentes grupos étnicos que con
el tiempo dieron forma al culto, a la imagen y, a su vez, a la
Danza de los Tabales; prácticas que reflejan la diversidad
étnica que ha sido negada, producto de un blanqueamiento
mental y que lo expresan sus devotos cuando se refieren a
la imagen de San Benito de Palermo como un hombre del
campo que trabajaba en el campo, por eso se volvió negro”.
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71
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 71-82, ISSN: 2218-3345
Programa Psicopreventivo
de Educación para la vida.
Efectividad en adolescentes.
UTEC-PGR
*
Ana Sandra Aguilar
ana.aguilar@utec.edu.sv
Dirección de Investigaciones
Un iversidad Tecnológica de El Salvador
Resumen
Con el objetivo de analizar la intervención preventiva
psicosocial implantada por la Procuraduría General de la
Republica (PGR), a través de la ejecución de un programa
psicoeducativo en centros escolares como respuesta
a los planes institucionales que buscan proteger a la
niñez y la adolescencia, se plantea, específi camente,
identifi car los elementos que fortalecen y obstaculizan
el logro de los resultados del proyecto, analizar su
efectividad a través del cumplimiento de los objetivos
diseñados y proponer un programa psicopreventivo
de educación para la vida. Se seleccionó un diseño
ex post facto, en una muestra de 305 estudiantes de
noveno grado que recibieron el programa durante tres
años, en temas distribuidos anualmente. Se realizaron
análisis descriptivos e inferenciales no paramétricos.
Se validó la e cacia del programa a través del impacto
que tiene sobre la población bene ciaria atendida. Los
estudiantes que recibieron el programa presentaron
cambios perceptivos sobre los temas abordados e
Abstract
With the aim of analyzing the preventive psychosocial
intervention implemented by the Attorney General of
the Republic (PGR), through the implementation of a
programmer psych educational in schools as response
to institutional plans, seeking to protect children and
adolescents, arises specifi cally, identify the elements that
strengthen and hamper the achievement of the results
of the project analyze the effectiveness of it through
the designed objectives and propose a Psicopreventivo
education for life programmer. Selected a design
expostfacto, in a sample of 305 students in ninth grade
students who received the program for three years,
themes distributed annually. Nonparametric inference
and descriptive analyses were performed. Validated the
effectiveness of the program through the impact it has
on the benefi ciary population assisted. Students who
received the program presented perceptual changes
on the issues addressed and identifi ed the risks of life
which are likely to be exposed in his teens. One of the
*
Investigación conjunta entre la Universidad Tecnológica de El Salvador y la Procuraduría General de la República de El Salvador. Bajo convenio específico de investigación
firmado en el 2011 entre las dos instituciones.
72
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
Introducción
El programa de prevención psicosocial implantado por la
Procuraduría General de la Republica de El Salvador ha sido
ejecutado durante cuarenta años aproximadamente, y ha
sido modifi cado en el tiempo de acuerdo con la identifi cación
de necesidades psicosociales que presentan las familias que
la Unidad Preventiva Psicosocial atiende. También, al inicio
de cada año, según la planifi cación institucional, se realiza
un estudio en los centros escolares sobre las necesidades
de los maestros para abordar temas que giran alrededor de
la dinámica familiar de los y as adolescentes, los cuales y las
cuales, a través de convenios y alianzas, permiten que se
trabaje en un programa preventivo cuyo eje transversal es
la maternidad y paternidad responsable.
Las investigaciones previas desarrolladas sobre la
adolescencia evidencian que se abordan temas específi cos
vinculados a su desarrollo, como por ejemplo: programas
de educación sexual en donde los resultados destacan
la importancia de la percepción de la sexualidad en los y
las adolescentes en cuanto al conocimiento, estereotipos,
valores, sistemas de creencias y vivencias (Rodriguez, 2006;
Moreno, León y Becerra, 2006).
En estudios donde se ha abordado la prevalencia de la
violencia durante el noviazgo, se ha identifi cado la utilización
identifi caron los riesgos de vida a los cuales tienen la
probabilidad de ser expuestos en su adolescencia. Una
de las implicaciones en el estudio es que las diferencias
encontradas podrían estar intervenidas por factores
sociales del entorno, de la familia y de la escuela
Sin embargo, podemos inferir que existen variables
psicosociales que signifi can riesgos y que cambios se
han generado en el grupo que ha estado recibiendo la
intervención de la institución.
Palabras clave: Educación para la vida, programa de
prevención, paternidad y maternidad responsables,
conducta colectiva, conducta del adolescente, acción
social, programas sociales, asistencia pública.
implications in the study is that found differences might
be intercepted by social factors of the environment,
family and school, however, we can infer that there
are psychosocial variables that mean risks and that
changes have been generated in the group that has
been receiving the intervention of the institution.
Keywords: Education for life, prevention program,
responsible parenthood, collective behavior, adolescent
behavior, social action, social programs, public
assistance.
de diferentes defi niciones para medir la violencia, y esto ha
implicado que la violencia de género aparezca minimizada
en el ámbito social. (Roscoe y Callahan, 1985; Avery, et al,
1997; citados en Gómez, 2007).
En otros estudios sobre la prevención de la violencia
se ha concluido que existe la necesidad de vincular la
educación con el contexto social y la participación de los y
las adolescentes. En otros estudios sobre prevención de la
violencia de género en un centro escolar de Huelva, España,
se encontraron diferencias signifi cativas en las falsas
creencias sobre culpabilidad de la mujer al ser maltratada,
y también se encontró un incremento en el conocimiento
sobre qué hacer y dónde debe acudir una persona que sufre
de este fenómeno (Hernando, 2007). En estudios similares
sobre programas de este tipo, han sido evidenciados estos
incrementos en los conocimientos (Avery et al, 1997;
Schewe y Anger, 2000; Foshee et al, 1998; citados por
Hernando, 2007).
Para Zavala, et al. (2008), los programas de prevención deben
orientarse a considerar las diferencias tanto individuales
como sociales para facilitar la formación de patrones
cognitivos y conductuales que ayuden en la toma de
decisiones asertivas, aprendan a expresar sus sentimientos
y puedan manejarse dentro del grupo moderadamente. En
estudios realizados por Caycedo et al. (2005) se destaca
73
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
que la resolución de problemas está vinculado con el
desarrollo de habilidades sociales, en donde un fuerte
componente cognitivo puede generar un buen ajuste social
para desaprender, aprender y reaprender patrones de
afrontamiento ante diversas situaciones cotidianas que se
le presentan a los y las adolescentes.
Estudios realizados por Näslund y Binstock (2011) sobre
programas orientados hacia la prevención de embarazos en
adolescentes, concluyen que son importantes los apoyos
familiares antes, durante y después de un embarazo, en
todos los escenarios socioeconómicos y familiares. El apoyo,
según las autoras, debe estar orientado a que la madre
logre las metas futuras que tiene, y evidencia que la escuela
por sí sola no presenta resultados positivos, por lo que
recomiendan involucrar a los padres de familia. La escuela
también debe incluir estrategias para que la adolescente
continúe su formación escolar. En un estudio cualitativo
sobre el significado de la maternidad precoz, se evidencia la
participación del contexto cultural en la formación del papel
estructurador de la identidad de los y las adolescentes
(Nóblega, 2009).
El estudio tiene como objetivos: valorar la intervención
preventiva psicosocial implantada por la PGR, a través de
la ejecución de un programa psicoeducativo en centros
escolares que responda a los planes institucionales en favor
de la protección de la niñez y la adolescencia; identificar
los elementos que fortalecen y obstaculizan el logro de los
resultados del proyecto; analizar la efectividad del proyecto
implantado a través del cumplimiento de los objetivos
diseñados y proponer un programa psicopreventivo de
educación para la vida evaluable a seis meses plazo.
Para el cumplimiento de los objetivos se formuló un sistema
de hipótesis que respondió, si el programa ejecutado es
relacionado con los planes institucionales de protección a
la niñez y la adolescencia y si los temas impartidos inciden
en la percepción selectiva para identificar situaciones
de riesgos comunes de los adolescentes. Para trabajar
la primera hipótesis se realizó un estudio multimodal,
cuantitativo y cualitativo, sobre el funcionamiento del
programa, bajo un marco lógico que permitió caracterizarlo
cualitativamente, y la aplicación de un cuestionario para
realizar análisis cuantitativos sobre la percepción del
personal técnico hacia el programa.
Para trabajar la segunda hipótesis se utilizó un diseño
retrospectivo ex post facto (León y Montero, 2007),
aplicándose un cuestionario de percepciones y actitudes
sobre temas de educación para la vida, tipo escala de
Likert, de elaboración propia y validada por árbitros, al cual
se le realizaron los análisis estadísticos de confiabilidad y
validez en una muestra de 157 estudiantes en similares
contextos culturales y educativos. Realizados los análisis
estadísticos y discutidos los resultados, se elaboró una
propuesta de un programa de prevención ajustada a
las diversas características, necesidades individuales y
factores socioculturales que interactúan en el desarrollo de
los y las adolescentes beneficiarios del programa.
Método
Los participantes del estudio, para analizar la efectividad del
proyecto implementado, formaron una muestra intencional
de 305 estudiantes de noveno grado, que representan el
94% de la muestra total de beneficiarios que terminaron
el programa. La muestra a su vez es representativa para
poblaciones finitas. Aunque no se seleccionó mediante
muestras probabilísticas, se trabajó con el 100% de
adolescentes que terminaron las sesiones preventivas,
con un nivel de confianza del 94% y una estimación de
error del 5%, por lo que la muestra es representativa
en una población de 1.919 beneficiarios del programa.
Se seleccionaron los seis centros escolares que la PGR
terminó el programa, ubicados en áreas geográficas de tres
municipios del departamento de San Salvador: Mejicanos,
Cuscatancingo y Zacamil.
Las técnicas utilizadas por el personal técnico fue la
encuesta, talleres con grupo focal y elaboración del marco
lógico del programa.
Para trabajar con los estudiantes se utilizó la encuesta,
formada por un primer módulo que recogió información
sociodemográfica para perfilar al estudiante; y un segundo
módulo para identificar las percepciones y actitudes sobre
los temas que recibieron durante los tres años que fueron
beneficiarios.
74
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
Entre las características sociodemográficas de los
participantes, se perfila que la media total de edad de los
adolescentes participantes es de 15 años (DT = 1,92, n =
116: 38%), seguido por la edad de 16 años (n = 93: 30,5%),
que hacen un porcentaje acumulado del 74,8%; la muestra
para las adolescentes es de 151 (49,5%), y los adolescentes
es de 154 (50,5%). La muestra es homogénea en cuanto al
sexo.
La procedencia de los participantes es en un 71,8% (n =
219) del área urbana, y el 26,6% (n = 81), proviene del área
rural; el 1,6% (n = 4) no respondió.
Su atmósfera familiar se caracteriza por tener entre uno y
dos hermanos, el 51.1% de los participantes (n = 156); entre
tres y cuatro hermanos, el 27,9% (n = 85); más de cinco
hermanos, el 12,1% (n = 37); ningún hermano, el 8,5% (n =
26). Un participante no respondió.
Su cuidador principal es su madre en un 41,3% de los
casos (n = 126); o ambos padres, con un 39,7% (n = 121);
entre ambos grupos, la madre tiene una participación en
el cuidado de los hijos del 81% solo su padre, el 7,9% (n
= 24) de los casos; los abuelos participan en un 5,6% (n
= 17) como cuidadores principales; los tío(as), participan
en un 3,3% (n = 10) del cuidado de los participantes; siete
participantes no respondieron en estos rangos (2,3%, n =7).
El nivel educativo de su cuidador principal está principal-
mente ubicado en los rangos de estudios a nivel de séptimo
a noveno grado, el 28,9% (n = 88); y bachillerato, en un
28,9% (n = 88). Entre ambos grupos, el nivel educativo de los
padres es mayor o igual a tercer ciclo, en un 57,8%; a nivel
de primaria, un 15,1%( n = 46); con estudios universitarios,
el 14,1% (n = 43); y un grupo considerable que no sabe qué
nivel de estudios tiene su cuidador principal, 13,1% (n = 40).
En los casos en que la dominancia del cuidado de los hijos
está a cargo de su padre y su madre, las diferencias entre
ambos grupos no son significativas.
Las actividades que los y las jóvenes realizan antes
y después de estudiar se caracterizan por ayudar en
los oficios de la casa, en un 52,1% (n = 159); estudiar
solamente, en un 24,6% (n = 75). Entre estos dos grupos,
un 76,7% se mantiene realizando actividades que los
favorecen para realizar actividades académicas fuera del
aula. Los participantes que trabajan fuera de casa como
empleados forman un 10,8% (n = 33); trabajar en negocio
de la familia un 6,6% (n = 20); cuidar hermanos un 4,9 %
(n = 15); entre las otras actividades, un 0,7% (n = 2). Un
participante especificó que hace grafiti como trabajo, y
otro no especificó. Un participante no respondió. El 23,3%
que trabaja fuera de casa realiza diferentes actividades: el
6,9% vende, el 4,6 % es ayudante de taller, el 4,3 % hace
mandados, y el 3% es niñera de otros niños que no son sus
hermanos. El 4,5% no especifica que otra actividad realiza.
Las actividades que realizan en cuanto a su crecimiento
espiritual, respondieron que el 62% profesan la religión
evangélica. Es de hacer notar que para ellos cada Iglesia es
la única evangélica o cristiana (n = 189); los que profesan la
religión católica son un 27,5% (n = 84); un 0,3% que practica
otra religión, que especifica, es rastafari, y un 1,6% no
respondió (n = 5).
En cuanto a las capacitaciones recibidas de la PGR, sobre
los temas de educación para la vida, el 83,3% (n = 254),
respondió sí haberla recibido, y un 14,8% respondió no
haberla recibido; un 1,3% no respondió.
La percepción selectiva sobre las temáticas que
recibieron durante el programa se basó en el módulo II,
que contenía 48 ítems, a los cuales se les realizó el análisis
instrumental aplicándose la medida de adecuación
muestral de Kaiser- Meyer-Olkin, resultando igual a .750,
con un valor en la prueba de Esfericidad de Bartlett
de chi-cuadrado = 3139.361, con gl = 1081, sig. = .000.
Luego se realizó la reducción de componentes en donde
los ítems obtuvieron cargas mayores a 0,4 y menores a 7,05
en la extracción de componentes principales comunales.
La varianza total explicada con ocho factores fijos es del
41,29%, utilizándose el método de rotación: normalización
Varimax con Kaiser.
Resultados
La escala construida midió los factores: disposición
cognitiva a responder, defensas perceptivas, criterios
perceptuales, valoración de consecuencias de los
comportamientos, expresión del yo como percepción
externa de los otros, conocimientos hacia el embarazo y la
crianza futura de sus hijos, decisiones sobre el embarazo
75
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
y razonamiento moral basado en género. A estos ocho
factores se les aplicó la prueba de Kolmogorov-Smirnov,
para una muestra, encontrándose en las relaciones que hay
diferencias significativas en siete factores, exceptuando el
factor disposición cognitiva a responder.
A la muestra también se le aplicó pruebas no paramétricas
para dos muestras independientes según sexo, utilizando
la prueba U de Mann-Whitney y W de Wilcoxon, obteniendo
como resultado diferencias estadísticas en los factores:
disposición cognitiva a responder (sig. = .000) y defensas
perceptivas (sig. = .000), no encontrando diferencias al
resto de los factores.
Se realizaron pruebas de chi-cuadrado según la variable
edad, utilizando Kruskal- Wallis, encontrándose que solo las
defensas perceptivas presentan diferencias significativas
(Chi-cuadrado = 14,139; sig. = .003). En las pruebas
realizadas según variable de agrupación procedencia se
utilizó la prueba U de Mann-Whitney y W de Wilcoxon,
encontrando diferencias significativas en cuanto a la
valoración de consecuencias de los comportamientos (sig.
= .008); la expresión del yo como percepción externa de los
otros (sig. = .028); y las decisiones sobre el embarazo (sig.
= .036).
Utilizando la prueba de Kruskal–Wallis, sí se encontraron
diferencias significativas, según variable de agrupación
asistencia a las capacitaciones en cuanto a los factores:
disposición cognitiva a responder, defensas perceptivas y
decisiones sobre el embarazo. Al igual que la variable de
agrupación capacitaciones recibidas, utilizando la prueba U
de Mann-Whitney y W de Wilcoxon, se encontraron diferencias
significativas en cuanto a las defensas perceptivas, la
valoración de consecuencias de los comportamientos, la
expresión del yo como percepción externa de los otros y las
decisiones sobre el embarazo.
En el análisis descriptivo de la disposición cognitiva a
responder ante una situación referida, se analizaron en
los temas abordados sobre violencia, relaciones sexuales,
y medios de comunicación, encontrando las siguientes
respuestas:
El golpear a alguien para conseguir respeto no es aprobada
por los participantes en un 65.9%. En favor de esta medida,
el 34.1% está dispuesto cognitivamente a responder con
golpes para ser respetado.
El 74,8% de los estudiantes no está dispuesto a tener
relaciones sexuales solo por estar enamorados; y un
25,2% podría estar en la disposición a tener relaciones
sexuales al enamorarse perdidamente de su pareja.
El 68,2% desaprueba que las relaciones sexuales
mejoran las experiencias cuando sean adultos. Por
Gráfico 1.
Si alguien me golpea respondo de igual forma
para que me respeten.
Gráfico 2.
Si alguien me golpea respondo de igual forma
para que me respeten. Según sexo.
el contrario, entre las respuestas que favorecen esta
disposición, el 31,8% cree que las relaciones sexuales
tempranas mejoran las experiencias en la adultez. El
76,7% no está dispuesto a tener relaciones sexuales
antes de los 17 años. Y un 23,3% está a favor de esta
disposición.
76
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
El 79.7% identifica el riesgo de consumir alcohol o tabaco
con los amigos. El 20,3% percibe como favorable la
disposición al consumo de sustancias psicoactivas con los
amigos, sin percibir el riesgo de tener problemas a causa
de este consumo.
En relación con si los medios de comunicación facilitan que
hable más con mis amigos y menos con mi familia, el 58%
percibe que los medios de comunicación no disminuyen
la comunicación con su familia. Y el 42% indica que hay
una leve discrepancia entre si los medios de comunicación
están favoreciendo que haya una mayor facilidad de
comunicación con los amigos que con la familia.
En cuanto a si deben seleccionar programas de televisión
que apoyen los valores y normas, el 81,3% respondió con
cambios positivos en cuanto a la posibilidad cognitiva de
escoger programas que fomenten los valores y normas
sociales. El porcentaje de los que no están interesados
en la disposición de seleccionar programas deseables,
encontramos que el 18,7% de los respondientes no
está interesado en seleccionar programas de televisión
específicos que fomenten valores y normas.
Una disposición que interesaba conocer era si los jóvenes,
al estar expuestos a juegos violentos, pensaban que
fortalecían su valentía. El 85,9% percibe que no fortalecen
su valentía, y un 14,1% percibe que los juegos por
computadora lo vuelve valiente. La disposición de actuar
con violencia en una simulación virtual a través del juego
electrónico, evidencia que el 69,1% de los respondientes, al
jugar, no se sienten excitados, y justifican la aplicación de
violencia aunque sean simuladores, mientras que el 30,9%
si identifica el riesgo de jugar, no justificando la violencia.
El 78,1% presenta un factor protector favorable al cambio
en cuanto a no entusiasmarse si lo invitan a ver películas
que sugieran sexo, y el 21,9% en los cuales sí se identifica
riesgo de disponer cognitivamente sobre la sexualidad. El
66,6% de los participantes indica que hay una probabilidad
Gráfico 2.
El mejor momento para relaciones sexuales es cuando me
enamoro perdidamente de la otra persona.
Gráfico 2.
El mejor momento para relaciones sexuales es cuando me
enamoro perdidamente de la otra persona, según sexo.
Gráfico 3.
Estoy dispuesto/a tener relaciones sexuales
antes de los 17 años de edad.
77
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
de poder tomar una decisión al momento de seleccionar
programas de televisión. El 33.4% de los respondientes
tienen preferencias hacia los programas donde se propone
la libertad sin reglas sociales. Esto indica un riesgo en los
grupos respondientes.
Al realizar los análisis descriptivos en cuanto a las defensas
perceptivas que presentan los participantes del estudio
encontramos a través de los ítems que los participantes
perciben, en un 79,7%, que no están de acuerdo en que los
hombres deban trabajar afuera y las mujeres cuidar a los
hijos, constituyéndose esta percepción un factor protector
que fortalece la equidad de género. En contraposición, se
encontró que un 20,3% de los participantes presenta una
defensa perceptiva que no le facilita el cambio positivo
hacia la equidad de género.
Las defensas perceptivas en cuanto a la significación de
la maternidad como parte de la madurez alcanzada por el
adulto, un 87,6% muestra un cambio cognitivo favorable
en cuanto a que perciben que la maternidad precoz no
necesariamente significa que se ha madurado. A favor
de esta defensa perceptiva, se encontró que un 12,4%
percibe que la maternidad durante la adolescencia significa
que se ha madurado. Estos hallazgos indican que existe
un riesgo en que un grupo de estudiantes piense que el
embarazarse puede formar una identidad del yo personal
en una adolescente y convertirla en adulta. Un participante
no contestó.
La valoración del componente afectivo se analizó en la
defensa perceptiva: la maternidad es un complemento
afectivo para los adolescentes. El porcentaje acumulado
de las respuestas desfavorables fue del 67,9%, lo que
indica que un buen grupo de participantes perciben que la
maternidad no incide en las necesidades de afectividad de
ellos, mientras que el 32,1% presenta la defensa perceptiva
de que existe una probabilidad de que el embarazarse
durante la adolescencia supla alguna necesidad afectiva
que se tenga y pueda significar un riesgo para los y las
adolescentes.
En relación con la defensa perceptiva sobre quien cuida a
los hijos, basado en el que gane menos dinero en una pareja
es quien tiene que cuidar a los niños, el 90,8% reprueba
esta percepción, convirtiéndose en un factor protector
que facilita la equidad de género en la distribución de los
cuidados de los hijos. Mientras que un 9,2% está de acuerdo
con esta afirmación, lo que significa un riesgo de legitimizar
la crianza de los hijos basada en la estructura económica
que facilita la inequidad de género.
Para el caso de que la prevención de la violencia solo le
compete a los adultos, el 86,8% no está de acuerdo con
esta percepción, por lo que se identifica una conducta
favorable al cambio. Por el contrario, el 13,2% percibe que
son los adultos los que tienen que actuar ante la violencia.
Un participante no respondió.
Gráfico 10.
La prevención de la violencia solo les compete a los adultos.
En porcentajes.
Gráfico 9.
Defensa perceptiva sobre el trabajo de los hombres fuera de
casa y el cuidado de los hijos por la mujer. En porcentajes.
Gráfico 11.
La maternidad es un complemento afectivo
para los adolescentes, en porcentajes.
78
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
Los criterios perceptuales encontrados en este estudio
tienen una vinculación con las experiencias previas de
los jóvenes y la deseabilidad social que han tenido los
adolescentes; y estas se analizaron, encontrándose los
siguientes resultados:
En cuanto a que las familias desean que una adolescente
que espera el nacimiento de un bebé asuma las
responsabilidades de crianza del hijo, como lo hace una
mujer adulta, las valoraciones criteriales sobre este
tema identificaron que en un 73,8% de los participantes
considera que un embarazo debe llevar a la adolescente
hacia la adultez, y un 26,2% tiene el criterio de que
las adolescentes no deben pensar como adultas. Un
participante no respondió.
Para valorar la deseabilidad de poder proyectarse al futuro
se exploró si el adolescente identificaba la capacidad que
tenía para elaborar con anticipación su vida futura y se
encontró lo siguiente: el 91.8% respondió favorablemente a
estar de acuerdo en poder elaborar su proyecto de vida, lo
que se convierte en un factor protector para que el joven se
proyecte en su futuro. En cuanto a los que consideran que
no son capaces de planificar su vida a futuro, el porcentaje
acumulado es del 8.2% de las respuestas lo que presenta
para él y la adolescente, el riesgo de formar su identidad sin
antes tratar de planificarlo.
Las experiencias previas de los adolescentes acerca de
los amigos, la planificación de actividades grupales, así
como sus consecuencias, fueron valoradas en el criterio:
Si me expongo a situaciones de riesgo con amigos que
hurtan o dañan la propiedad de otros tendré problemas
Gráfico 12.
Puedo elaborar mi proyecto de vida, en porcentajes.
para enfrentar la vida. Las respuestas encontradas fueron
que el 82,3%, como porcentaje acumulado de estar de
acuerdo, puede identificar el riesgo y seleccionar qué tipo
de actividades puede compartir con sus amigos. En el otro
sentido, hay un grupo de participantes que forman el 17,7%
que no identifica el riesgo y no considera que el exponerse
a situaciones de riesgo con amigos que realizan actividades
que dañan a terceros puede tener problemas para enfrentar
la vida a futuro.
La resolución de los problemas en la adolescencia requiere
de una red de apoyo social. Se pretendió evaluar qué
piensan los y las adolescentes sobre buscar apoyo en
las personas con más experiencia para retroalimentar
las alternativas que tienen en esa etapa de cambios. Las
respuestas encontradas en la afirmación; Los cambios en
la adolescencia deben expresarse para recibir apoyo de
los mayores obtuvo un porcentaje acumulado del 87,9%,
que indica que existe una probabilidad de que los jóvenes
busquen el apoyo para resolver sus problemas en los
adultos que tienen más experiencia, entre los que podrían
estar sus familiares. Opuesto a lo anterior, un 12,1% es
en desacuerdo de buscar apoyo otros pares, pero no
expresarlos a los adultos.
En cuanto a las percepciones que tienen los y las
adolescentes sobre lo que los padres piensan que pueden
ser capaces de hacer sus hijos, basadas en su conducta, el
87,8% de estas respuestas indican que los jóvenes perciben
cuando los padres conocen si un hijo puede salir adelante.
Esto se convierte en un factor protector que genera una
mayor comunicación entre padres e hijos.
Los y las adolescentes perciben que los medios de
comunicación inciden en la toma de decisiones sobre
diversas conductas diarias. El porcentaje acumulado de
ambos grupos es del 74,7%, que indica que los medios
de comunicación no inciden en la toma de decisiones
del adolescente. Esto es favorable en el estudio, lo que
indica que hay un grupo de adolescentes, del 25,3% de los
participantes restantes, que no estima perceptivamente
que los medios de comunicaciones incidan en la toma de
sus decisiones. Por lo tanto, no es necesario ser cuidadoso
al elegir o seleccionar una alternativa.
79
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
Es importante la percepción que tiene el adolescente sobre
el conocimiento de sus padres sobre ellos, en términos
de confiar en que serán apoyados para lograr sus planes
en el futuro. Las respuestas ante este criterio perceptivo
fueron que el 81,3% de adolescentes tiene la probabilidad
de recibir apoyo de sus padres para lograr sus metas.
Para valorar las consecuencias que tienen los
comportamientos de los y las adolescentes basados en
sus experiencias previas relacionadas con su vida social
y compartir actividades con sus amigos, las respuestas
favorables a esta valoración sobre formación de amistades,
el 62,9% percibe que los adolescentes considerados como
agresivos tienen una tendencia a buscar amigos parecidos.
Esta valoración perceptual se contrapone a un 37,1% que no
percibe que esto sea cierto. Esta valoración de consecuencias
abre una posibilidad de identificar la oportunidad que ofrece
la convivencia con pares que no son agresivos, en donde
los adolescentes puedan canalizar sus estados afectivos y
aprender a manejar su ira.
El 92,4% de los y las adolescentes percibe que es necesario
aprender a conocer su pareja, y ese aprendizaje le servirá
para conocer el grado de responsabilidad que asume en la
vida.
En las valoraciones perceptuales de los participantes del
estudio con respecto a los contactos sexuales bajo el
efecto del alcohol, el 64,9% percibe como riesgo el tener
relaciones sexuales bajo efectos del alcohol. Esto se
convierte en un factor protector para evitar embarazos
durante la adolescencia. Por otra parte, existe un grupo
considerable que no han identificado los riesgos que implica
la vulnerabilidad que representa estar bajo la dependencia
de sustancias psicoactivas y no estar consciente de sus
actos al momento de tener contactos sexuales.
En cuanto a la valoración perceptual sobre el abuso
sexual como una relación de poder, se identificó que
los adolescentes no tienen una idea clara sobre las
consecuencias que tienen las relaciones de superioridad en
el género, y no logran percibir que el abuso sexual es una
consecuencia de esos abusos de poder entre los agresores
y las víctimas. En estos resultados podemos analizar que no
hay diferencias significativas entre las respuestas de los que
están a favor de esta valoración perceptual y los que están
en contra: se encontró un 56,7% de respuestas positivas
que favorecen la prevención del abuso sexual. Sin embargo,
el 43,3% de las respuestas restantes no estuvo de acuerdo
con esta valoración. Dentro del grupo se convierte en un
riesgo, puesto que los mitos sobre el abuso continúan
vigentes al no discriminarlo como una consecuencia de los
sentimientos de superioridad generados en los agresores
por diversas causas. Un participante del estudio no contestó.
Gráco1.
Una pareja debe evitar contactos sexuales bajo efectos
del alcohol.
Gráco1.
El abuso sexual es producto de una relación de poder,
no es necesario incitar a alguien.
Se valoró la percepción que se tiene de aprender a seleccionar
los amigos para evitar caer en manos de tratantes. Los
resultados tienen una tendencia en un 81,7% de identificar
el riesgo, y perciben que para no caer en manos de tratantes
tienen que seleccionar sus amigos. Entre las respuestas
también hay un porcentaje del 18,3% que no identifica este
riesgo, y no están a favor de la valoración perceptiva lo que
los vuelve vulnerables.
Se trató de valorar si los y las adolescentes tenían la
capacidad de alertar a sus amigos al identificar una persona
80
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
que tuviera características de tratante. Los participantes
del estudio respondieron, en un porcentaje acumulado del
82,6% que los estudiantes conocen la consecuencia de
que un tratante pueda abordar a uno de sus amigos, y es
capaz de prevenir esta situación alertándolo para que tenga
cuidado. Por otro lado existe un grupo de respuestas del
17,4% que está formado por los que respondieron estar
en contra de esta percepción. Para estos grupos no hay
un interés de estar alerta ante este fenómeno, por lo que
podría haber una posibilidad de no identificar el riesgo.
Discusión de resultados y conclusiones
Se concluye que el programa sí responde a los planes
institucionales como un programa de protección a la niñez
y la adolescencia. Existen diferencias de cobertura de las
sesiones educativas y la capacidad del recurso humano
para atender la demanda de los centros escolares del área
metropolitana de San Salvador. El programa tiene cobertura
solo en este departamento; los adolescentes del resto del
país no reciben el beneficio, por ende, no existe una relación
positiva entre la demanda del programa y la capacidad del
recurso humano para atenderlo. El impacto de un programa
está relacionado con una planificación, implantación y
monitoreo a través de un proceso de gestión eficiente.
(Rodriguez et al, 2008).
La edad promedio de los beneficiarios del programa es de
15 años, existiendo una equidad en cuanto al acceso al
servicio educativo en un 50% para cada sexo; provienen
en su mayoría del área urbana; su atmosfera familiar está
constituida por familias nucleares cuyo cuidador principal
es la madre o ambos. Más del 50% de los participantes tiene
entre uno a dos hermanos; el nivel educativo de su cuidador
principal o su madre es igual o mayor a tercer ciclo; los padres
de los y las adolescentes tienen en su mayoría la capacidad
intelectual para trabajar con sus hijos, transmitirles valores
y apoyarlos en proyectos futuros. Los jóvenes presentan
como actividad principal, antes o después de sus horas
de estancia en el centro escolar, estudiar y ayudar en los
oficios de la casa. Menos del 25% realiza actividades fuera
de casa, como vender, ayudante de taller, hacer mandados
o ser niñera de otros niños que no son sus hermanos. En
su mayoría disponen del tiempo suficiente para realizar sus
tareas escolares y gozan de suficiente tiempo de ocio para
otras actividades favorables o no a su desarrollo. Más del
60% profesa la religión evangélica.
Más del 65% está dispuesto a responder con golpes para que
lo respeten; más del 75% no dispondrá de tener relaciones
sexuales solo por enamorarse; más del 79% identifica el
riesgo de consumir bebidas alcohólicas con sus amigos
y tener problemas. Más de un 85% de los participantes
presenta una disposición cognitiva que facilita jugar sin
pensar que jugar virtualmente con violencia les haga
sentir valentía. En cambio, la sensación de excitación que
ocasiona el juego violento en la persona no los identifica
y la violencia es justificada como normal. El adolescente
está aprendiendo a vivir en contextos donde la violencia es
justificada. La violencia instrumental siempre es legitimada
por las acciones que se perciben como normales. (Baró,
2003; citado por Blanco, Caballero, De la Corte, 2005).
Los estudiantes que han recibido el programa tienen
cambios favorecedores en donde han trabajado sus defensas
perceptivas, siendo una oportunidad para involucrarlos en
sensibilizar a otros pares dentro de los centros escolares.
El modelamiento de los padres en situaciones similares
combinados con el contexto familiar y su atmosfera familiar
es fundamental para formar procesos cognitivos que
reduzcan sus defensas perceptivas. Shapiro, (1998, citado
por Zuk, 1998).
Los criterios perceptuales de los adolescentes se evidencian
a favor de la deseabilidad social, pero entran en disyuntiva
en cuanto a la sinceridad. Estos criterios se encuentran
más débiles en los temas de paternidad y maternidad
responsable y fuertes en cuanto a la convivencia familiar.
Esto tiene una vinculación con las experiencias propias
y del contexto de los y las adolescentes. El riesgo puede
ser percibido, y lo hace percibir cómo debe de protegerse;
pero existe una contradicción al ponerlo en práctica por las
presiones del contexto social, y en la realidad no lo deseen.
(Rodriguez, 1993).
Se identificó un cambio en la defensa perceptiva sobre la
prevención de la violencia. Los jóvenes perciben que son
ellos los que tienen que participar en los programas de
prevención. En cuanto a la significación de la maternidad,
no consideran que a través del embarazo se llegue a la
madurez o que sea un complemento afectivo.
81
Programa Psicopreventivo de Educación para la vida. Efectividad en adolescentes. UTEC-PGR
El arraigo familiar tiene que ver con los apoyos familiares.
Los jóvenes perciben que, cuando los padres confían en
ellos a través de la conducta mostrada por el hijo, sí pueden
salir adelante; perciben con facilidad los apoyos paternos.
En cuanto a las consecuencias del noviazgo, valoran el
aprender a conocer la pareja; identifican los riesgos que
conllevan los contactos sexuales bajo los efectos del
alcohol; no discriminan si el abuso sexual es una relación
de poder o no; pueden estar frente a un riesgo de abuso o
acoso y no darse cuenta. Más del 70% de los participantes
perciben, que los nacimientos de madres adolescentes son
rechazados por sus familiares; más del 50% está de acuerdo
con que las madres adolescentes ven sin amor a sus futuros
hijos; más del 49% desconoce cómo cuidar un bebé; el 60%
considera que los embarazos no son una decisión propia. El
perfil muestra a una adolescente que no tiene claridad en la
toma de decisiones sobre embarazarse o dejarse embarazar.
Se concluye que los temas impartidos por la PGR, en el
programa de prevención psicosocial que implanta a nivel de
tercer ciclo en los centros educativos, incide en la percepción
selectiva para identificar situaciones de riesgos comunes de
los adolescentes y lograr cambios perceptivos favorables
al desarrollo de los adolescentes, pero que los resultados
de impacto son parciales y se necesita un programa más
focalizado y consistente para lograr los cambios favorables
hacia una adultez sana.
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Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 83-90, ISSN: 2218-3345
Violencia y programación infantil
en la televisión salvadoreña
Camila Calles Minero
camila.calles@utec.edu.sv
Dirección de Investigaciones Universidad Tecnológica de El Salvador
Resumen
Este trabajo evidencia la violencia que se transmite
en las franjas infantiles de la televisión salvadoreña
y canales infantiles de cable. Para ello se utilizó el
método cuantitativo-cualitativo en la observación de
112 franjas televisivas que contienen 593 programas
infantiles, en los cuales se encontró que las niñas, niños
y adolescentes en El Salvador están expuestos a claras
acciones de violencia física, verbal y psicológica. En el
78% de los programas que se analizaron existen una o
más acciones de violencia. Solo el 2% de la programación
infantil es producida en el país, el resto es creada en el
extranjero con realidades nada cercana a la salvadoreña,
puesto que la mayor parte de los protagonistas de los
programas son blancos y masculinos; el país tiene
población mestiza, y la mayoría es del sexo femenino.
La programación infantil difunde estereotipos como el
hombre fuerte y la mujer débil; la belleza centrada en la
gura delgada y la tez clara; y la disputa de grupos como
inteligentes contra tontos, bellos contra feos.
Palabras clave: Medios de comunicación, programación
infantil, violencia en televisión, violencia infantil,
programas de televisión para niños, investigación
científi ca.
Abstract
This study demonstrates the violence that is broadcast
in El Salvador´s child prime time channels and also in
child cable programming. The method used on this
research was a quantitative-qualitative one. A total
of 112 TV bands were watched and analyzed. These
contained a total of 593 television programs for children.
It was found out during the analysis that the Salvadorian
girls, children, and adolescents are totally exposed to
physical, verbal, and psychological violence. In 78% of
the programs, there is one or more violence display. Only
2% of children’s programming is made in the country; the
others are made abroad with realities that don´t have
anything to do with the Salvadorian real life. Most of the
main characters are Anglo-Saxon and male; however,
El Salvador has a mixed race population, being female
the majority of it. Children’s programming broadcast
stereotypes like the strong man vs. the weak woman.
The beauty is focused on a slim shape and a fair skin
complexion. Finally, there is also groups’ dispute in the
content of each of the programs, for example: fool ones
vs. smart ones, good looking ones vs. ugly ones, and
stronger vs. weaker.
Keywords: Media, children’s programming, violence on
television, childhood violence, television programs for
children, scientifi c research.
84
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
Introducción
La televisión, un invento de inicios del siglo pasado, permite
a varias generaciones vivir sus fantasías por medio de una
pantalla, en donde se presenta un mundo ideal y en oca-
siones hasta trágico; un mundo de ficción con elementos
sociales y cotidianos, que son muy reales y cercanos a la po-
blación. Bajo esa premisa, y contemplando que la violencia
en El Salvador es parte de la dinámica social diaria, para esta
investigación se planteó como objetivo general evidenciar
la violencia que se transmite en las franjas infantiles de la
televisión salvadoreña y canales infantiles de cable. Para lo
cual se establecieron como objetivos específicos el identi-
ficar las formas de violencia y las diferencias entre la señal
abierta y la señal cerrada de televisión.
Según el avance de la vigésima tercera edición del dicciona-
rio de la Real Academia de la Lengua Española, televisión es
un sistema de transmisión de imágenes a distancia a través
de ondas electromagnéticas. Pero en ese traslado de ondas
no solo tienen que ver elementos de la electrónica, física y
otras ciencias exactas, más bien están decoradas y arregla-
das con elementos culturales y cotidianos, en la recepción
interviene en gran medida el contexto social de quienes
transmiten los mensajes y de quienes los reciben.
Un grupo importante, en cuanto a número y sensibilidad,
de receptores de esos mensajes de la “caja mágica” son los
niños y las niñas que se sientan frente a ella y que asumen
lo que ven como su mundo más próximo y real. El tema de la
violencia en la televisión está en la palestra mundial desde
hace varias décadas, al punto de plantearla como enemiga
de las familias y como lo más nocivo de los medios de co-
municación.
Tur y Grande (2009) establecen que la violencia ingresó a la
programación infantil desde los años 70, cuando aparecen
las creaciones japonesas para la televisión. La programación
infantil se nutre en un 70% del género de dibujos animados,
y la industria nipona era la mayor suministradora en ese mo-
mento, según Matilla (2005; citado por Tur y Grande, 2009).
Por su parte, Gutiérrez (2011) asegura que los programas
con contenidos violentos se han incrementado en las últi-
mas dos décadas en El Salvador. Esto se evidencia en la pro-
gramación televisiva que actualmente está al acceso de los
menores de edad.
Los mensajes televisivos tienen su propio lenguaje y carac-
terísticas específicas para llegar a cada persona que los ve.
Ese lenguaje es el que utiliza la imagen en movimiento para
establecer una conexión entre el receptor y el emisor. Spie-
lberg (1993) aseguró que las escenas violentas en el cine
o la televisión estimulan mucho más a los espectadores a
imitar lo que ven que las escenas reales que aparecen en los
noticieros. Para este cineasta estadounidense, “en las pelí-
culas, la violencia se filma con una iluminación perfecta, un
escenario espectacular y a cámara lenta, lo que la convierte
incluso en algo romántico”.
La televisión es, tal vez, uno de los medios de comunica-
ción de masas más analizados. Varias investigaciones se
han centrado en su influencia, sus contenidos, su naturaleza
técnica, su incidencia en los comportamientos de la pobla-
ción. Las posturas al respecto son opuestas. Hay quienes
aseguran que los actos de violencia por parte de los meno-
res de edad son impulsados por las escenas que ven en la
pantalla; otros aseguran que los menores de edad que se
sientan frente a la “caja mágica” no son autómatas, y los
actos de violencia tienen que ver más con la problemática
estructural que la sociedad enfrenta.
Levine (1997) apunta que el debate sobre los efectos per-
judiciales de la televisión en los niños y niñas ha termina-
do. Plantea que no hay que teorizar tanto al respecto, pues
los más de cuarenta años de investigación demuestran
que “la exposición repetida a niveles altos de violencia en
los medios de comunicación les enseña a algunos niños y
adolescentes a resolver los conflictos interpersonales con
violencia, “y que a muchos otros” a ser indiferentes a esa
solución” (Levine, 1997).
Diversos autores apuntan a que la televisión influye en las
acciones, los valores y las creencias de sus espectadores,
pero no de la misma manera sobre todas las cosas. Depen-
de de cuánto tiempo se pase frente a la pantalla y del con-
tenido de los programas que se vean. El conocimiento del
espectador y su ambiente social, en particular del contexto
social o familiar, es factor determinante para paliar el influjo
de la “pantalla chica”. “Gracias a la televisión, un niño es-
85
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
tadounidense presencia un promedio de 8 mil homicidios
y 100 mil actos de violencia antes de haber terminado la
escuela primaria” (Popper y Condry 1998, pág. 96).
La televisión puede verse como un servicio de telecomuni-
caciones, es decir, diversas posibilidades de comunicación
sometidas a diversas exigencias técnicas, dotadas unas de
mayor autonomía gramatical, sintáctica y expresiva; mien-
tras que otras están más ligadas a exigencias inmediatas de
comunicación para usos de consumo. (Eco, 1984).
En El Salvador se cuenta no solo con señal abierta, se tiene
también opción del sistema de cable. Carranza, Rosales y
Carbajal (2000) establecen que la televisión por cable tiene
ventajas sobre la televisión libre. Una de ellas es que puede
entregar muchos más canales; además, es de costo relativa-
mente bajo; el campo receptor es delimitado y depende de
qué tan sofisticado sea el aparato receptor, se puede esta-
blecer interactividad ente emisor y receptor.
Hay que tomar en cuenta que en El Salvador existen norma-
tivas que pretenden regular los contenidos televisivos. La
principal es la Constitución de la República; existe además
el Reglamento para Teatros, Cines, Radioteatros, Circos y de-
más Espectáculos Públicos de la Dgepryt (2011) y con el que
controlan los contenidos que ve la infancia salvadoreña y el
público en general, que data de 1948, y su última reforma
se realizó en 1976.
Otras leyes de la República que tienen disposiciones para
controlar los contenidos televisivos son: la Ley de Protec-
ción Integral de la Niñez y Adolescencia y la Ley por una Vida
Libre de Violencia para las Mujeres en El Salvador. La progra-
mación televisiva y cinematográfica también está controla-
da por el Decreto legislativo N° 647, y a escala internacional
existen convenios y declaraciones en las que se establece
el respeto a los derechos de la infancia, la adolescencia y
la mujer, tales como la Declaratoria Universal de Derechos
Humanos, los pactos internacionales de derechos humanos
y el Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Dere-
chos Civiles y Políticos, la Declaración de los Derechos del
Niño, la Declaración Americana de Derechos y Deberes del
Hombre y la Convención interamericana para prevenir san-
cionar y erradicar la violencia contra la mujer, o denominada
Convención de Belém do Pará (ONU, 1994).
Para esta investigación se tomó la violencia como la ex-
presión abierta de comportamientos que implican forzar o
hacerse daño físicamente a otra persona (o a uno mismo,
como en el caso del suicidio), y por tanto incluye cualquier
acción, en contra del deseo de uno, que cause heridas, la
muerte (asesinatos), o la amenaza de herir, golpear o asesi-
nar (Gerbner y Gross, 1976).
Además, la OMS (2002) la define como el uso deliberado
de la fuerza física o el poder, ya sea en grado de amena-
za o efectivo, contra uno mismo, otra persona o un grupo
o comunidad, que cause o tenga muchas probabilidades
de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos
del desarrollo o privaciones. Existen tres tipos básicos de
violencia: física, verbal y psicológica. Dentro de esas expre-
siones de violencia, se tiene que retomar la que se ejerce
contra la mujer.
Metodología
Se analizaron ocho canales de televisión cerrada o por cable
exclusivamente dirigidos a la infancia y ocho canales de la
televisión abierta, que son los únicos que contemplan en
su programación franjas infantiles exclusivamente. En los
canales salvadoreños se analizaron programas transmitidos
durante el horario de las franjas infantiles; en el caso de los
canales de cable se vio el prime time.
Se midió la frecuencia de variables como: golpes, empujo-
nes, gritos, humillaciones, malos tratos, estereotipos, entre
otras. Se analizó cualitativamente con los resultados de dos
grupos focales; uno con menores de edad y otro con padres
y madres de familia. Los programas televisivos se some-
tieron a una observación estructurada y se grabaron para
guardarlos como evidencia y análisis. Se tomó una muestra
semanal para cada canal.
Se consideraron a los personajes, la presencia de estereo-
tipos culturales y las escenas en cuanto a la temática que
trataron. Para el procesamiento de los datos, se utilizó el
programa de análisis estadístico SPSS.
Para la observación estructurada, las entrevistas y los gru-
pos focales se construyeron guías de observación, validadas
por expertos.
86
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
Resultados
De las 112 franjas infantiles analizadas, 56 son de la señal
abierta y 56 de la señal cerrada; en total se registraron 593
programas. No todos los canales salvadoreños tienen pro-
gramación infantil. El estudio logró identificar las formas de
violencia, las cuales pertenecen a los tipos de violencia físi-
ca, verbal y psicológica.
Se encontraron 2.914 acciones violentas físicas, verbales y
psicológicas, además de daños al medio ambiente y presen-
cia de armas. En el 78% de los 593 programas de televisión
vistos, hay al menos una acción de violencia. Solamente en
32 de las 112 franjas infantiles, es decir el 28%, están lim-
pias de violencia. La distribución de las acciones violentas
en los programas fue de 67% de violencia física, 21% de vio-
lencia verbal y 12% de violencia psicológica.
En total se encontraron 1.921 muestras de violencia física, y
la que mayor frecuencia presentó fue los golpes, de los que
se observaron 431; la segunda con mayor frecuencia fueron
escenas en donde se tiran objetos, de las que se contabili-
zaron 391; los empujones fue la tercera acción de violencia
física más observada, 320. Cabe hacer notar que el estudio
detectó la presencia de un homicidio en un programa de los
593 analizados.
En cuanto a la violencia verbal, la acción más presente son
los gritos; y se da en contextos que varían desde peleas,
hasta escenas de alegría y entusiasmo, en donde los perso-
najes tienden a reaccionar con uno o varios gritos. La segun-
da acción en frecuencia son los insultos; se dan tanto contra
otros personajes o hacia sí, además suelen presentarse no
solo en contextos de peleas, amenazas o provocaciones,
también aparecen en conversaciones entre personajes o
escenas de convivencia cotidiana entre los diferentes per-
sonajes. Este tipo de violencia no siempre está acompañado
de otro tipo de violencia como golpes o gritos. El tercer tipo
de violencia verbal en frecuencia son las provocaciones; es-
tas se presentan cuando un personaje insta a una pelea,
o es el primer paso para una escena en la que se obser-
van también golpes y gritos; las provocaciones suelen estar
acompañadas de algún tipo de violencia psicológica, como
la humillación y el daño la autoestima.
Para el caso de la violencia psicológica, se observaron hu-
millaciones, chantajes y daños a la autoestima. De estas, la
mayor en frecuencia son los daños a la autoestima y se da
en contextos sutiles y de cotidianidades de los personajes;
aparecen acompañadas de risas de público, o celebraciones
por parte de otros personajes. Algunos personajes suelen
mostrar a otros como inútiles, poco inteligentes, simulan
ser animales en su comportamiento; y esto es elogiado por
otros, sirve de burla y en varias ocasiones quien recibe el
daño a la autoestima no reacciona negativamente a ello,
por el contrario, también se ríe de la situación. La segunda
acción en frecuencia son las humillaciones que están muy
asociadas con los daños a la autoestima; y la tercera en fre-
cuencia son los chantajes, que se observaron incluso en es-
cenas de ambientes escolares ejercidas por los profesores
a los estudiantes.
De total de programas analizados, el 6,7% registra al menos
una escena en la que se ve algún tipo de daño contra el me-
dio ambiente. Las acciones de violencia contra el medio am-
biente muestran a personaje talando y destruyendo árboles;
tirando basura al piso y al mar; maltratando a los animales,
este maltrato ronda en negar la comida y golpear mascotas;
haciendo explosiones que destruyen bosques y montañas,
estas explosiones se dan en contextos de luchas y batallas
con la utilización de armas.
Como resultado de los grupos focales, se tiene que los me-
nores de edad reconocen con mayor facilidad la violencia fí-
sica. Al dárseles una explicación del significado de violencia,
los más grandes (10 años en adelante) reconocen la violen-
cia psicológica y verbal; al dárseles la clasificación los tipos
de violencia, todos identifican las acciones de violencia.
El estudio, además, caracterizó a los protagonistas en cuan-
to a su sexo, grupo étnico, si provoca conflictos o los resuel-
ve. Hay que aclarar que no existe igual número de protago-
nistas que de programas, pues existen casos en donde hay
más de un protagonista. En total se registraron 614. Además,
hay que tomar en cuenta que los personajes se repiten; eso
significa que un personaje fue contado en varias ocasiones.
Del total de protagonistas de los programas infantiles que se
transmiten en El Salvador, 64% (380) son masculinos y 36%
(213) la o las personajes son de sexo femenino. El predomi-
87
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
no de los hombres como principales está acompañado, en
muy pocas ocasiones, por los personajes secundarios feme-
ninos; en cambio, los programas infantiles en donde son de
sexo femenino las protagonistas, en la mayor parte de las
ocasiones aparecen personajes secundarios de sexo mas-
culino. Según la observación, existen 30 de las 112 franjas
infantiles analizadas que contienen hasta cuatro protago-
nistas masculinos; las franjas que tienen igual cantidad de
protagonistas femeninas, son nueve.
En cuanto a los grupos étnicos de los protagonistas, el es-
tudio arrojó que en el 80% de las 112 franjas infantiles ob-
servadas hay uno o más personajes de la etnia blanca; en
el 68% hay uno o más personajes no humanos (animales,
robots, alienígenas, etc.); en el 25% hay uno o más persona-
jes de la etnia latina; en el 15% hay uno o más personajes
afrodescendientes; en el 10% de las franjas hay personajes
de otras etnias (china, japonesa, india); no apareció la etnia
indígena en alguna de las franjas de programación infantil.
Dentro de esta clasificación se colocó como grupo étnico a
los personajes no humanos para poder clasificarlos.
La observación de las franjas infantiles contempló, además,
establecer si los protagonistas provocaban conflictos y ade-
más, si resolvía conflictos. El 52% de los protagonistas re-
suelve conflictos. El 29% provoca conflictos en el desarrollo
de la trama del programa; y el 19% protagonistas ni resuel-
ven ni genera conflictos. La generación de conflictos se da
en cuanto a que los personajes son los que inician disputas
con otros personajes, establecidas por luchas de grupos y
defensa de intereses. La mayor parte de los protagonistas
son los encargados de resolver los conflictos provocados
por los antagonistas; los personajes principales tienen a
comportarse como líderes y voz de mando ante la resolu-
ción de los conflictos que se desarrollan en la trama de los
programas.
Otro de los elementos observados en el análisis de las fran-
jas infantiles fue la presencia de estereotipos dentro de las
tramas. Se buscó la presencia del estereotipo hombre fuerte
mujer débil, es decir, de mostrar a los personajes masculi-
nos como fuertes, inquebrantables, no perdedores, y a los
personajes femeninos como delicados y fácilmente doble-
gables, cuidadosos.
Otros estereotipos que se buscaron fue el de belleza, co-
locando a los personajes principales con características
de tez clara, cabello rubio y liso, de complexión delgada; la
disputa de grupos, que se refiere a la presentación dentro
de las tramas de los programas infantiles de grupos opues-
tos que luchan entre ellos, inteligentes contra tontos, bellos
contra feos, fuertes contra débiles, entro otros.
El análisis estableció que el 61,30% del total de los progra-
mas tiene al menos un tipo de estereotipo; de ese porcen-
taje, el 21,20% corresponde al estereotipo de disputa de
grupos; el 20,70% corresponde al estereotipo de hombre
fuerte/mujer débil, y el 19,40% al estereotipo de belleza.
El estudio, además, Identificó la diferencia entre la señal
abierta y la señal cerrada de televisión en la cantidad de
escenas de violencia que se transmiten en ellas. En total
se vieron 16 canales de televisión, ocho de la señal abierta
nacional (solamente esa cantidad de canales en esa señal
transmite programación infantil), y ocho de la señal cerrada,
número de canales de la señal cerrada que son exclusiva-
mente infantiles y para adolescentes. De las 112 franjas ana-
lizadas, 56 corresponde a la señal abierta y 56 a la cerrada.
De las 112 franjas analizadas, 45 se concentran solamente
en horario de la tarde y 45 solamente en la jornada de la
mañana, y 22 en ambas.
Los análisis estadísticos se realizaron aplicando las pruebas
no paramétricas U de Mann-Whitney y Kruskal-Wallis para
comparar las dimensiones relacionadas con la cantidad de
programas y las señales por las cuales se transmiten las
franjas infantiles de televisión. Se encontró mayor cantidad
de programas en la señal cerrada.
En cuanto a la violencia física, se determinó que existe ma-
yor frecuencia de golpes, heridas, peleas, empujones, ob-
jetos tirados, objetos arrebatados en la señal de cable. Al
contrastar las acciones de la violencia física con los días
en los que se transmiten las franjas de televisión en donde
aparece (día de semana o fin de semana), se registraron 80
franjas de programación infantil durante los días de semana;
y para los fines de semana, 32. El análisis estadístico arrojó
que golpes, objetos tirados, heridas, peleas, empujones, ob-
jetos arrebatados aparecen con mayor frecuencia durante
las franjas de los fines de semana.
88
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
En cuanto a las franjas en las que se transmiten, el estu-
dio no establece diferencia del número de golpes, heridas
y acciones de tirar objetos que se ven tanto por la mañana
como por la tarde. En cambio, sí registra mayor cantidad de
objetos que se arrebatan y el número de empujones tanto
por la mañana como por la tarde.
En relación con la violencia verbal, se encontró igual can-
tidad de insultos en las señales abierta y por cable. La pre-
sencia de los gritos, provocaciones y amenazas es mayor
en la señal por cable. A excepción de los gritos, las demás
formas de violencia verbal aparecen con igual frecuencia los
días de semana y los fines de semana. Los gritos se ven más
durante los fines de semana. El análisis establece que no
hay diferencias en la cantidad de este tipo de violencia por
la mañana y por la tarde.
Para el caso de la violencia psicológica, el estudio establece
que se transmiten más humillaciones, acciones con daños a
la autoestima y acciones que contiene chantajes en la señal
cerrada. Las humillaciones se ven más durante los fines de
semana y los daños a la autoestima y chantajes se ven igual
cantidad en ambas jornadas. Se observan más humillacio-
nes y daños a la autoestima durante la jornada de la tarde,
en cambio, hay igual cantidad de chantajes mañana y tarde.
Se analizó la presencia de armas en los programas infantiles
de televisión, y se encontró que, del total de las franjas de
televisión observadas, en el 51,40% de ellas se presentan
armas de algún tipo. Se registraron más armas en la televi-
sión por cable; se ven con igual frecuencia tanto los días de
semana como los fines de semana, y ya sea por la mañana
o por la tarde.
Otro de los temas estudiados fue la presencia de acciones
contra el medio ambiente que aparecen en las franjas de
programación infantil. Estas aparecen con igual frecuencia
en las dos señales de televisión, y ya sea por la mañana o
por la tarde. Los días en donde se registran más acciones en
contra del medio ambiente son los de fin de semana.
En cuanto a los estereotipos buscados, se encontró que el
hombre fuerte/mujer débil, la belleza, entendida como al-
guien rubio, delgado y tez clara, así como la disputa de gru-
pos, aparecen más en la señal por cable. En relación con los
días en que aparecen los estereotipos, solo hay diferencia
en la disputa de grupos que se observan más durante los
fines de semana; los de más estereotipos aparecen por igual
durante los siete días de la semana.
El estudio establece además que existe mayor cantidad de
protagonistas que generan conflictos en la señal cerrada.
Este tipo de protagonistas aparece en igual cantidad los días
de semana y los fines de semana. Se ven con mayor fre-
cuencia durante la jornada de la tarde.
Por su parte, los protagonistas que resuelven los conflictos
aparecen con mayor frecuencia en la señal cerrada o por
cable; los días de semana son en los cuales se observó ma-
yor cantidad de protagonistas que resuelven conflictos, y
durante las jornadas de la tarde.
Los grupos focales arrojaron elementos como el que los
padres de familia, en un primer momento, no asumen su
condición de reguladores de la televisión que ven sus hijos.
Para aquellos el principal responsable es el Estado. Sin em-
bargo, al conocer formas de ayudar a controlar la violencia,
asumen la posibilidad de inculcar en sus hijos e hijas valores
que les ayuden a enfrentar y procesar los elementos que
visualizan frente al televisor.
Las niñas, niños y adolescentes están claros de que existe
violencia en las franjas infantiles que ven desde sus casas;
están conscientes de que es incorrecto golpear a las per-
sonas y burlarse de ellas; pero les causa gracia y se ríen de
situaciones que incluyen acciones de violencia.
Conclusiones
En las franjas de televisión con programación infantil que
se pueden ver en El Salvador, ya sea por señal de cable o
televisión abierta, contienen acciones de violencia (física,
verbal o psicológica), armas (de fuego y blancas), daños al
medio ambiente, estereotipos y protagonistas con predomi-
nio del grupo étnico blanco, además de ser personajes que
generan conflicos; y la mayor parte de los protagonistas son
masculinos.
En el 78% hay una o más acciones de violencia. Estos pro-
gramas no se muestran como únicos, eso quiere decir que
89
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
el mismo programa se repite en varias ocasiones dentro de
la misma franja. Al comparar la señal cerrada con la abierta,
esta última tiene menor cantidad de programas; sin embar-
go muchos de ellos son repeticiones de tramas y del progra-
ma en sí, por lo que hay mayor cantidad de escenas que se
pueden ver en la televisión cerrada. El cable es una opción
para muchos salvadoreños, sobre todo en la capital, pese a
que tiene un costo monetario. Según la Superintendencia
General de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget), para el
2006 (dato más reciente obtenido) existían 608.58 aparatos
de televisión entre los hogares salvadoreños; y para el 2010
cuatro de cada diez habitantes del área metropolitana de
San Salvador tendrían en sus televisores el servicio de cable,
sobre todo en los municipios de Antiguo Cuscatlán, Nueva
San Salvador, en el departamento de La Libertad; Soyapan-
go, Ilopango, Ayutuxtepeque y San Salvador Siget, 2006)
Es importante ver el porcentaje de violencia verbal y psico-
lógica. Esta última con menor frecuencia, pero que, a juicio
de Gómez, Salazar y Ocampo (2005), es riesgosa, pues es
muy difícil de detectar. Muchas de las expresiones de vio-
lencia física pueden producir, también, un daño psicológico.
Los dos grupos étnicos que más se difunden a través de
las franjas infantiles de televisión son los blancos y los no
humanos. No hay registro de protagonistas indígenas y los
latinos son muy pocos. Esto indica que las acciones que se
transmiten a través de la televisión y que se pueden ver en
El Salvador están alejadas de la realidad inmediata de la in-
fancia del país.
En la programación infantil existe invisibilización de la mu-
jer, en el sentido que más de la mitad de los protagonistas
(64%) son del sexo masculino, eso hace recrear un mundo
en el que los que tienen el papel principal y características
diferentes son los hombres. El no mostrar a la mujer como
igual ante los hombres se refuerza ante la aparición del es-
tereotipo de hombre fuerte/mujer débil en los programas
infantiles y de los cuales se encontraron 123.
El 61% de los programas presentan al menos un estereotipo,
entre lo que se mencionan hombre fuerte/mujer débil, be-
lleza y disputa de grupos. El estereotipo que más presencia
tiene es la disputa de grupos, por lo que se concluye que los
infantes que ven esos programas se están formando la idea
de que siempre habrán grupos contrarios entre ellos y, por
ende, conflictos.
Del estudio se concluye que sí hay diferencias para algunos
tipos de violencia en la cantidad de acciones que se trans-
miten a través de la señal abierta y la de cable. Esta última
es en donde se registra mayor cantidad de los tres tipos
de violencia analizados (física, verbal y psicológica), mayor
presencia de armas y estereotipos culturales. Sin embargo,
no hay diferencia en cuanto a los daños contra el medio
ambiente.
Muchas de las acciones de violencia que se observaron en
las franjas de programación infantil se combinan con humor
o alta densidad emotiva, sobre todo en los programas para
adolescentes, y con la violencia psicológica.
Estos resultados se suman a la percepción de que la mayo-
ría de la población salvadoreña (76,5%) considera que las
noticias que se transmiten por televisión, prensa escrita y
la radio, sobre la violencia delincuencial (lesionados, muer-
tos, robos, extorciones, etc.), afectan su estado emocional
y mental. En este mismo sentido, una mayoría calificada
(70,1%) de la muestra en estudio expresó que la televisión y
los juegos de video promueven las conductas violentas en
los salvadoreños (Gutiérrez, J.R., 2011).
La programación de señal abierta, a la que se tiene mayor
acceso por su no pago, es mucho menos en relación con la
por cable, en cuanto a cantidad y variedad de programas.
Son pocos los programas que se producen en el país; los
programas que se transmiten son hechos en el extranjero.
Por parte del Ministerio de Gobernación, desde la Dirección
General de Espectáculos Públicos, Radio y Televisión, hace
uso de un reglamento no acorde a la realidad actual, puesto
que fue creado en la década de los 70, y desde entonces
los cambios que ha recibido son mínimos. Haría falta nue-
va normativa para regular la programación televisiva que se
transmite en el país a través de la señal abierta.
Existen pocos proyectos en el país que apunten a contri-
buir a crear una mejor cultura de consumo de televisión, al
igual que a controlar el tipo de programas televisivos que se
transmiten en el país, pese a que actualmente en El Salva-
dor el 40% de sus habitantes son menores de 18 años, es
decir 2.4 millones de salvadoreños son niñas, niños y ado-
lescentes (Unicef, 2011).
90
Violencia y programación infantil en la televisión salvadoreña
El ver constantemente acciones de violencia, tanto en la
vida cotidiana como por la programación televisiva, la salud
mental de la infancia salvadoreña se vulnera. En el artículo
25, literal “h”, de la Ley de Protección Integral de la Niñez y
la Adolescencia (2011) se establece que se deben de desa-
rrollar programas permanentes para la prevención, atención
y tratamiento de la salud mental de la niñez y adolescencia.
Muy poco se invierte en la población menor de 18 años en
el país. Según Unicef (2007), para el 2007 solamente $3.4 de
cada $100 del PIB van para la niñez salvadoreña. El 17% del
Presupuesto General de la Nación va para la niñez. Unicef
(2007) recalca que anualmente el Estado salvadoreño gasta
$317 por cada niña, niño y adolescente. En cuanto a los go-
biernos locales, estos invierten $2.80 anualmente por cada
menor de 18 años.
Queda abierta la posibilidad de otro estudio que, basado en
estos resultados, evalúe el comportamiento de los infantes,
luego de ser expuestos a programas televisivos con mues-
tras de violencia explícita como los analizados en esta in-
vestigación.
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91
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 91-100, ISSN: 2218-3345
La televisión y pautas de conducta
de los jóvenes salvadoreños
Edith Ruth Vaquerano de Portillo
edit_portillo@utec.edu.sv
Domingo Orlando Alfaro Alfaro
Escuela de Comunicaciones, Universidad Tecnológica de El Salvador
Resumen
Este artículo es producto de una investigación
correlacional descriptiva realizada entre 1.207 jóvenes
salvadoreños, con el objetivo de determinar si existe
relación entre sus hábitos de consumo televisivo y sus
pautas de conducta. Los resultados apuntan a la televisión
como medio dominante —en el que se busca sobre todo
entretenimiento—, con la Internet afi anzándose en un
sólido segundo lugar. Sin embargo, esa preferencia por
el medio, aun y cuando los datos obtenidos permiten
percibir una asociación entre su consumo y la manera en
la que los jóvenes hablan, se comportan, lucen o piensan,
no llegan a establecerse correlaciones estadísticas, con
lo que habría que virar la vista hacia los hechos de que
los receptores tienen un papel activo, de que la infl uencia
de la televisión no es una variable unidimensional, y de
que las interacciones sociales y el contexto deben ser
considerados en profundidad. Para ello, es necesario
recurrir a otros enfoques en la investigación, al estudio
cualitativo. No obstante, la adopción de estrategias
de educación para los medios, y especialmente para
el consumo de la televisión, es una necesidad que se
impone.
Palabras clave: Conducta del adolescente, televisión,
investigación científi ca, estudio de los medios, educación
para medios, mediación televisiva, pautas de conducta.
Abstract
This paper is the result of a descriptive correlational
research, conducted among 1,207 young Salvadorans,
in order to determine whether a relationship exists
between television consumption habits and patterns of
behavior. The results point to television as the dominant
medium —seeking specially entertainment— followed
by the Internet in a strong second place. However, this
preference for television, even when the data allow us
to perceive an association between consumption and
the way young people speak, act, look or think, fail to
establish statistical correlations, which should make
us turn our eyes to the facts that the receivers have
an active role, that the infl uence of television is not an
unidimensional variable, and that social interactions
and context must be considered in depth. For this it is
necessary to resort to other approaches in research, to
qualitative study. However, the adoption of strategies for
media education, especially for television consumption,
is an unavoidable necessity.
Keywords: Adolescent behavior, TV, scientifi c research,
studies of the Media, education for the Media, televise,
ion mediation, conduct guidelines.
92
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
Introducción
Los medios de comunicación masiva, especialmente la
televisión, son señalados frecuentemente como actores
principales en la adquisición de pautas de conducta por
parte de niños, adolescentes y jóvenes,
1
al considerarlos, en
tanto actores destacados de la llamada “escuela paralela,
2
como responsables de la transmisión tanto de valores como
de contravalores.
Este impacto de los medios de comunicación en la
formación de los jóvenes se explicaría por los volúmenes
de información que comunican, superiores en cantidad a la
que proviene del sistema de educación formal, lo que se
vería favorecido además por la ausencia de sentido crítico
en los jóvenes, así como por la falta de una educación en
medios de comunicación. Con o sin intención, los medios
de comunicación social se han vuelto el referente y vehículo
por medio de los cuales las personas construyen su visión
de la sociedad en que viven y las normas que la rigen, en
una acción de socialización que no necesariamente coincide
con las realizadas por la familia y la escuela.
No puede ignorarse el papel socializador de los medios de
comunicación social, por lo que, conocer de qué manera y
qué tanto influyen en la conducta de los jóvenes, reforzando
o contradiciendo la labor realizada en la familia y en el
aula, posibilitaría la toma de decisiones e impulso de
acciones desde el hogar y la escuela, tendientes en esta
última a incorporarlos sistemáticamente como recursos de
aprendizaje.
En ese contexto, esta investigación se planteó como
objetivo general determinar si existe relación entre los
hábitos de consumo televisivo de los jóvenes salvadoreños
y sus pautas de conducta. Como objetivos específicos se
1
Críticas provenientes del enfoque conductista y su visión del reflejo condicionado, según las cuales los medios de comunicación en general ejercen una
influencia sobre una audiencia pasiva.
2
El potencial educativo de los medios de comunicación empezó a valorarse en los años 60 y 70 del siglo XX, con la radio y la televisión educativas
utilizadas con fines escolares. El término paralelo se agrega luego al vislumbrar el potencial como medios de aprendizaje que tenían, no siempre en línea
con los propósitos y contenidos del sistema de educación formal.
3
Pionero de la ciencia política y de las teorías de la comunicación, cuya visión fue superada luego por otras corrientes de pensamiento; pero que hoy,
con el advenimiento y crecimiento de la Internet y las redes sociales, retoma protagonismo.
4
Español, doctor en ciencias de la información, especialista en comunicación audiovisual y educación; ha centrado sus trabajos en los temas de la
socialización mediante comunicaciones inadvertidas y el de la educación en una cultura del espectáculo.
5
No resulta difícil pensar en “negociaciones” familiares para definir el programa por verse –si no se ha llegado a la opción de un televisor para cada
uno–, así como en la ausencia de conversaciones familiares mientras está encendido; o en los programas que se ven como único tema de conversación.
establecieron tres: el primero, identificar los hábitos de
consumo televisivo de los jóvenes salvadoreños; el segundo,
identificar la percepción que tienen los jóvenes salvadoreños
sobre los contenidos de sus espacios televisivos preferidos;
y el tercero, identificar la relación existente entre el consu-
mo televisivo y las pautas de conducta de los jóvenes
salvadoreños.
El estudio de los medios masivos de comunicación —y
dentro de ellos, de la televisión— giró en la primera
mitad del siglo XX en torno a una visión psicosociológica
conductista del efecto e influencia directos, que Laswell
3
inmortalizó en la figura de la “aguja hipodérmica”, en un
modelo en el que los medios actuaban como inyecciones
en las mentes de una audiencia pasiva y producían ciertos
tipos de comportamientos.
En esa línea de pensamiento, la influencia de la televisión
depende de dos aspectos: la exposición y el contenido,
entre los cuales llega a establecer una relación directamente
proporcional: cuanto mayor es la exposición del espectador
al espectáculo televisivo, tanto mayor es, en general, la
influencia ejercida por el medio (Condry, 2002, p. 71).
Para otros, como Ferrés
4
(1994), la televisión viene a sustituir
la función materna y llega incluso a ocupar el lugar central
en el diseño del hogar, y se convierte en punto de referencia
obligado en la organización de la vida familiar.
5
Además,
—afirma—, sus efectos son inconscientes, inadvertidos,
producidos sobre las emociones, y no sobre la razón de los
individuos, por medio de estímulos que no son percibidos de
manera consciente, ya sea por haber sido camuflados por
el emisor, por existir desconocimiento de los códigos o una
gran excitación emotiva en el receptor, por saturación de
informaciones o porque las comunicaciones son indirectas
(Ferrés, 1996, p.16).
93
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
Según Maigret (2005, p. 93), por el contrario, “no se ha podido
demostrar ninguna causalidad entre series de contenidos y
de actitudes, y aun si en algunas investigaciones se pudieron
obtener correlaciones (muchas veces contradictorias), estas
no dicen nada de los factores complejos implicados allí, tales
como el medio familiar y los valores sociales”. Para Maigret,
“el paradigma de los efectos fuertes es un paradigma débil
porque aporta una información muy limitada sobre la
realidad de la interacción social”.
Otra de las grandes corrientes para analizar el efecto de
los medios de comunicación sobre las personas es la
denominada teoría crítica, desarrollada e impulsada por la
Escuela de Frankfurt,
6
que introduce el gran aporte de una
reflexión sobre la ideología en el campo de la investigación
sobre los medios, cambiando el reflejo condicionado por el
efecto ideológico (Maigret, 2005).
La teoría crítica tiene entre sus tesis principales la existencia
de una cultura de masas basada en el “bombardeo
permanente de entretenimientos que afectan el juicio
y adormecen la razón” a través de una industria de los
medios de comunicación, que seducen porque “alivian,
relajan, permiten soñar y tener esperanza”, que transmiten
estereotipos que simplifican el mundo y gustan por su
“monotonía tranquilizadora”. “Los medios forman una
cortina de humo, un vapor que embrutece: la comunicación
de masa conduce al silencio de la masa” (Maigret, 2005, pp.
110-111).
Para Eagleton (1991, en Stevenson, 1995, p. 144), más
importante políticamente hablando que el efecto ideológico
de la televisión durante el tiempo que se le mira, es el hecho
de que, durante el tiempo que mira televisión “la gente no
se compromete en una actividad política más seria”, y que
la televisión es “más una forma de control social que un
aparato ideológico”.
7
El enfoque empírico para estudiar el efecto de los medios
de comunicación en las audiencias aparece con Lazarsfeld,
8
quien supera los métodos de análisis puramente reflexivos
especulativos, incorporando la recolección de información y
el análisis del comportamiento del público en estudios que
dieron origen al término Mass Communication Research,
9
que lo llevaron a confirmar el peso de las relaciones
interpersonales por encima de los medios en decisiones
sobre bienes de consumo, la moda, el cine y asuntos
públicos.
10
Para él, “los efectos de los medios son indirectos
y limitados, filtrados por las capacidades cognitivas de los
individuos, difundidos horizontalmente al interior de las
redes y no verticalmente del emisor hacia el receptor”
(Maigret, 2005, p. 131).
El hasta aquí ignorado papel activo del receptor aparece con
Hall (citado por Maigret, 2005), con quien el estudio deja de
ser sobre los medios en sí mismos, o sobre su influencia
como una variable de una sola dimensión, para pasar a ser
sobre la recepción de los medios por parte de los públicos,
sobre las interacciones sociales involucradas y sobre el
contexto en que se desarrollan.
En el ámbito latinoamericano, Orozco (1996) plantea que
es necesario precisar algunas situaciones relacionadas
con las interacciones de la teleaudiencia, en un proceso de
mediación múltiple. En ese contexto, se refiere por ejemplo a
la “duración”
11
del proceso de ver televisión, que él sostiene
va más allá del tiempo transcurrido desde que una persona
enciende el televisor hasta que lo apaga o se aleja de él.
El papel activo de las audiencias y el principio de la
mediación múltiple está presente también en la obra de
Fuenzalida (citado por Lozano, 2007, p. 192), quien realizó
estudios que demostraban la importancia de la influencia
grupal en el significado que las personas dan a los mensajes,
destacando la influencia que la familia y los amigos ejercen
6
Integrada por filósofos judíos alemanes, en su mayoría obligados a emigrar a Ginebra en 1933, y luego a Nueva York en 1934, debido a las
persecuciones de los nazis. Sus figuras preponderantes son Theodor Adorno y Max Horkheimer..
7
Comillas de Stevenson.
8
Paul Félix Lazarsfeld, sociólogo y psicólogo austríaco quien, al igual que los representantes de la Escuela de Frankfurt, se exilió en Estados Unidos
después que aquellos, en 1935.
9
Investigación sobre medios de comunicación masiva.
10
Trabajo que realiza con el apoyo de Eliu Katz, uno de sus estudiantes.
11
Comillas de Orozco.
94
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
en los hábitos y preferencias televisivas de los jóvenes,
así como la de las organizaciones de todo tipo, como
fuentes de información y de elaboración de significaciones
socioculturales.
En suma, el estudio de los medios está marcado por
diferentes enfoques, contrapuestos entre sí algunos de
ellos. Lo que no está en discusión es el hecho de que los
medios de comunicación masiva, y, en el caso que atañe a
este estudio, particularmente la televisión, son parte integral
de la vida del ser humano de estos tiempos y, por tanto,
su estudio —y el de su interacción con la audiencia— es
relevante; pero con un sentido crítico desideologizado, que
supere ideas preconcebidas y/o convenientes a intereses
propios.
Ineludiblemente, la existencia de un “problema” alrededor
del consumo de la televisión en la vida “cotidiana”
12
lleva a
la cuestión del qué hacer. Y es aquí donde surge la opción
de la llamada educación en medios, educación para la
recepción, pedagogía crítica de los medios o educación para
la televidencia, si se quiere ser más específico en cuanto al
medio televisivo; términos que, esencialmente, se refieren
al hecho de proporcionar a los individuos las herramientas
para lograr un consumo crítico de los contenidos que
ofrecen los medios de comunicación.
Al igual que el estudio de los medios, la educación, para su
consumo, ha generado variados estudios y propuestas, como
la de Fecé (2000), para quien los medios no actúan como
espejos de la realidad, sino que producen construcciones de
ella, por lo que “la enseñanza de los medios audiovisuales
no se puede entender sin el complemento de otras
acciones: las audiencias, estructura y funcionamiento de las
industrias de comunicación, las prácticas periodísticas y el
uso estético o creativo de los medios” (Tyner, 1996; citado
en Fecé, 2000, p. 141).
Si de lo que se está hablando es de un acto educativo,
sin duda es la escuela, en todos sus niveles, la llamada a
construir nuevas relaciones con los medios de comunicación,
ya que, como bien señala Buckingham (2005), los medios
representan un “nuevo” ambiente de aprendizaje, un tipo
de escolaridad informal, que para los jóvenes resulta mucho
más atractiva que la obligatoria y aburrida aula tradicional.
Lo que se propone es un uso pedagógico creativo y crítico
de los medios y las nuevas tecnologías, que dé la posibilidad
de “aprender de los medios” en lugar de “aprender por los
medios”, lo que permitiría apropiarse críticamente de sus
contenidos y descifrar los cambios que conducen (González,
2000, p. 188).
Diseño metodológico
El estudio realizado es de tipo correlacional exploratorio, y
constituye una aproximación al tema de la relación entre
la televisión y las pautas de conducta entre los jóvenes
salvadoreños, desde la perspectiva de los jóvenes mismos.
La investigación se realizó con un enfoque cuantitativo, sin
profundizar en las motivaciones detrás de dicha relación.
La técnica de investigación utilizada fue la encuesta, para
la que se diseñó un cuestionario estructurado de diseño
propio, que incluía 21 preguntas cerradas de opción múltiple,
orientadas a obtener datos acerca de hábitos y preferencias
de consumo del medio televisivo, así como de las conductas
asociadas.
El instrumento de investigación fue validado con un
investigador social y por medio de una prueba piloto, además
de hacerlo con los encuestadores, previo a la capacitación
que recibieron para su aplicación. El trabajo de campo
estuvo a cargo de un equipo de 51 encuestadores, todos
ellos estudiantes de comunicaciones de la Universidad
Tecnológica de El Salvador, que fueron a su vez supervisados
por el equipo investigador y docentes de la misma área,
para cubrir todo el territorio nacional, utilizando los mismos
criterios con los que trabaja el Centro de Investigación de la
Opinión Pública Salvadoreña, CIOPS
13
.
12
Comillas del equipo investigador. El término adquiere dimensiones sumamente complejas en tanto se refiere a un hecho materialmente invisible, pero
presente; un hecho marcado –según Silverstone– por tensiones entre angustia y seguridad, entre actividad y pasividad, entre creatividad y adicción,
entre lo público y lo privado, entre la dependencia y la independencia, y entre consumo y producción.
13
El CIOPS es el centro de investigación de la Universidad Tecnológica de El Salvador, que cuenta con más de veinte años de experiencia en la realización
de sondeos de opinión pública a escala nacional.
95
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
Como participantes del estudio se seleccionaron 1.207
jóvenes de ambos sexos, con edades comprendidas entre
15 y 24 años (según la definición aceptada por Naciones
Unidas), localizados en las áreas urbanas y rurales del
país, de los cuales, y en correspondencia con los números
oficiales del último censo de población,
14
53,6% pertenece
al sexo femenino y el 46,4% al masculino, mientras que el
78,6% habitan en el área urbana. En cuanto a la edad, el
55,3% están en el grupo etario entre 15 y 19 años, y el 44,7%
restante entre 20 y 24.
Para el cálculo de la muestra se utilizó la fórmula para
poblaciones finitas. El tipo de muestreo utilizado es aleatorio
no probabilístico para este subgrupo de la población. Los
1.207 jóvenes fueron ubicados y entrevistados en lugares
públicos en 47 municipios de los catorce departamentos del
país, representativos por su cantidad de habitantes.
Para el procesamiento de los datos se utilizó el programa
SPSS, a través del cual se obtuvieron las frecuencias
ya que se está frente a una población joven que tampoco
lee —el medio informativo y analítico por excelencia—:
recuérdese que la prensa escrita no destaca ni en la primera
ni en la segunda preferencia mediática, y no es sino hasta
en la tercera preferencia que puntúa en segundo lugar.
14
Proyecciones de la Dirección General de Estadística y Censos, Digestyc.
respectivas, así como las correlaciones de interés del equipo
investigador.
Resultados
Evidentemente, la televisión domina las preferencias
mediáticas, ya que aparece como el primer y el segundo
medio preferido por los jóvenes, aunque sin ejercer un
dominio absoluto, ya que su preferencia se presenta un
poco por debajo de la mitad, mientras que la Internet
destaca como la primera opción para una tercera parte
de los jóvenes sujetos de estudio, y como segunda
preferencia para dos de cada diez. La radio se ubica en
el tercer lugar de las preferencias, para que los medios
que implican el hábito de la lectura (prensa escrita y
revistas) aparezcan como las últimas preferencias, salvo
en el caso del tercer medio preferido, cuando la prensa
escrita se posiciona en segundo lugar, por detrás de la
radio (tabla 1).
TABLA 1.
Medio preferido, según orden de importancia
Opciones % Primera preferencia % Segunda preferencia % Tercera preferencia
Prensa escrita 7,4 11,7 25,2
Radio 15,3 28,6 30,0
Televisión 44,5 37, 3 14,0
Revistas 0,9 3,0 9,4
Internet 31,8 19,4 21,4
Sobre los motivos para encender el televisor, la búsqueda de
entretenimiento es la razón que prevalece, con el 65,6% de
las menciones. No llegan a una cuarta parte quienes afirman
que esperan encontrar información, y apenas uno de cada
diez busca educación. Estos resultados son preocupantes,
96
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
En cuanto a los hábitos de consumo de la televisión, la sala
es el lugar mencionado por siete de cada diez jóvenes como
el lugar de la casa en el que suelen ver la televisión, seguido
del dormitorio, con el 26,4% de las menciones. El dato
anterior sería positivo, si se rescata el supuesto de que la
sala es el lugar de la casa que propicia el encuentro familiar.
No obstante, no siempre la televisión la ven acompañados
por alguien, y la tendencia a ver televisión en soledad es
significativa.
Los padres, quienes se supone son los llamados —por
edad, experiencia y responsabilidad natural y social— a
guiar el proceso formativo de sus hijos, no son la compañía
preferida por los jóvenes para ver la televisión, lo que
podría explicarse por la diferencia de gustos que la brecha
TABLA 2.
Interferencia de la televisión con otras actividades
Opciones Porcentaje
Frecuencia con que dejan de hacer otras actividades para no perderse programas
favoritos de televisión.
Siempre 8,6
Casi siempre 16,2
De vez en cuando 48,8
Nunca 26,0
Tipo de actividades que dejan de hacer para no perderse programas
favoritos de televisión.
Estudiar 17,8
Labores del hogar 35,4
Familiares 7,8
Estar con amigos 27,7
Otros 7,8
generacional impone. Sumado a lo anterior, cerca de seis de
cada diez jóvenes reconocen que es poco lo que conversan
con quienes los acompañan mientras ven televisión. Pero
conversar no implica en sí mismo el acto de analizar con
esas mismas personas los contenidos de los programas que
se ven, y no llega a la mitad (46,9%) el número de quienes
dicen hacerlo de vez en cuando, y solamente una cuarta
parte (27,0%) afirma hacerlo casi siempre.
Motivo de atención son las cifras de más de siete de cada
diez jóvenes a quienes la afición —¿o adicción?— por
algunos programas de televisión los lleva, en mayor o menor
medida, a dejar de realizar otras actividades, tales como
labores del hogar, estar con amigos y estudiar (ver tabla 2).
97
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
Sobre la relación que pueda existir entre el consumo de
televisión por parte de los jóvenes y sus pautas de conducta,
merecen verse en detalle los resultados que se refieren
Los datos de la tabla 3 permiten afirmar que es innegable
que existe una relación entre el consumo de televisión por
parte de los jóvenes y la manera en que estos hablan y
piensan. Si se trata de una influencia directa, los mismos
jóvenes valoran esa influencia como positiva, calificativo
que la mitad de los entrevistados dio a la influencia de la
televisión en su vida diaria.
De lo que se habla en el párrafo anterior es en definitiva de
procesos de aprendizaje, y recuérdese que: “El aprendizaje
no requiere de intencionalidad. El aprendizaje puede ocurrir
sin el objetivo de aprender… Aprender no se restringe al
uso de elementos racionales. Gran cantidad de lo que los
educandos aprenden es a través de las emociones” (Charles,
1990, p. 71).
Si se analizan los datos a la luz de la estadística, es posible
establecer correlaciones positivas significativas entre
sí, aunque entre débiles y moderadas
15
solamente entre
a la incorporación de palabras al hablar cotidiano y a los
cambios de opinión sobre temas específicos como efecto
de la televisión (Ver tabla 3).
TABLA 3.
Incidencia de la televisión en pautas de conducta y opiniones
Opciones Porcentaje
Repetición de palabras escuchadas a personajes de la televisión.
50,3
No 47,0
Sin opinión 2,0
Cambio de opinión sobre algo luego de ver un programa de televisión.
57, 2
No 40,3
Sin opinión 2,2
aquellos aspectos que tienen que ver con la aceptación
de incorporar a su vida diaria expresiones, conductas,
apariencia y cambiar de opinión, en relación con el consumo
de televisión.
16
En ese sentido, el estudio no encontró asociación entre
variables sociodemográficas como la zona de residencia,
el sexo, la edad, condición social, religión, ocupación y
nivel educativo, y los hallazgos en términos de hábitos
de consumo de televisión, como son las preferencias
por quiénes se supone son los llamados —por edad,
experiencia y responsabilidad natural y social— a guiar el
proceso formativo de sus hijos canales y programas, lugar y
condiciones en que se ve televisión, así como la discusión
que pueda generarse alrededor de sus contenidos.
Tampoco hay asociaciones entre esas mismas variables y
las motivaciones para el consumo del medio con el hecho
de dejar de realizar otras actividades para no dejar de ver
15
El nivel de correlación es débil si la correlación es de 0.0 a 0.2, y de débil a moderada si es de 0.2 a 0.4.
16
Preguntas de la No. 18 a la No. 22 del formulario utilizado.
98
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
televisión, o con la repetición de palabras o expresiones,
comportamientos, apariencia o, incluso, cambios de opinión
producidos luego de ver televisión. La misma ausencia de
relación se da con la valoración —positiva para la mitad
de los jóvenes, como se señaló antes— que hacen de la
influencia de la televisión en su vida diaria.
Conclusiones
Evidentemente, alguna relación existe entre el consumo de
la televisión por parte de los jóvenes salvadoreños y sus
pautas de conducta, relativas a incorporar en su vida diaria
expresiones, conductas, apariencia y cambios de opinión
sobre temas específicos, pero no se llegaró a establecer
asociaciones entre ellas. Esta situación permite concluir que,
tal como sostiene Maigret (2005), para analizar el fenómeno
de la influencia de la televisión en la vida de los jóvenes hay
que considerar las interacciones sociales involucradas y el
contexto en que se desarrollan.
Los resultados apuntan a que la interacción entre la televisión
y las audiencias no es unidimensional, y, por el contrario,
es compleja; que, tal como sostiene Orozco (1996), esa
mediación puede originarse en la cultura, en la política, en la
economía, en la clase social, en el género, en la edad, en la
etnicidad, en los medios de información, en las condiciones
situacionales y contextuales, en las instituciones y en los
movimientos sociales, así como en la mente del sujeto, en
sus emociones y en sus experiencias.
Sobre las preferencias mediáticas, se confirmó el dominio
de la televisión como fuente de entretenimiento; pero es
un hecho el crecimiento de la Internet. Lo que sí debería
ser motivo de preocupación es el bajo nivel de consumo de
la prensa escrita por parte de los jóvenes, en tanto medio
informativo y reflexivo por excelencia. Predomina el gusto
por lo liviano y la menor exigencia de espíritu crítico en
jóvenes que están destinados a buscar su sobrevivencia en
un ambiente laboral en el que pudieran estar en desventaja,
por su carencia de competencias vitales para la toma de
decisiones.
Nótese también la hora en que los jóvenes acostumbran
ver televisión —en la noche— y la relación que podría
tener con un tema de salud, tanto física como mental,
dada la posibilidad de estarle “robando horas al sueño”.
Recuérdense los problemas de salud mental que sufre el
país y los criterios médicos que recomiendan ocho horas
de sueño como una de las medidas para conservarla. Y qué
decir de la costumbre arraigada de comer al tiempo que se
ve televisión, lo que expertos en nutrición señalan como
posible causa de trastornos alimenticios y de obesidad.
En otro contexto, se señala a la televisión como capaz de
congregar a toda la familia, lo que se complementa con su
ubicación en la sala del hogar, que se supone es el lugar de
encuentro familiar. Al aparente distanciamiento entre padres
e hijos, expresado en el compartir o no el consumo de la
televisión, súmense los conflictos que pudieran generarse
de las actividades que los jóvenes dejan de hacer —labores
del hogar y estudiar— para no perderse sus programas
favoritos de televisión, que fácilmente tensionarían las —
en algunos casos— frágiles relaciones familiares y de poder
construidas al interior de los hogares.
Hay que aclarar, sin embargo, que no se está planteando
aquí que la televisión en sí misma sea el origen de los
probables conflictos familiares o de la ausencia de
comunicación. Como bien señala Grande (1999, p.148), “el
probable problema primario de la TV está no tanto en el
comportamiento que produce, aunque hay algún peligro
en eso, sino en el comportamiento que evita: las pláticas
intrafamiliares, los juegos e incluso las riñas familiares, a
través de los cuales tiene lugar el aprendizaje del niño y con
los cuales va formando su carácter”.
Independientemente de las múltiples variables ligadas
a la relación existente entre el consumo de televisión y
algunas pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños,
la dimensión del fenómeno es tal que cae por su peso la
necesidad de impulsar estrategias que posibiliten que los
jóvenes “aprendan de los medios” y no “por los medios”
(González, 2000).
Hasta aquí, es evidente que los resultados ilustran, pero falta
profundidad en el estudio de las mediaciones televisivas. Su
carácter cuantitativo, y el depender de respuestas frías de
parte de los sujetos de estudio, no permite profundizar en
su origen y motivaciones. Y ante esa deuda pendiente, se
impone la necesidad de seguir profundizando en el análisis y
99
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
17
Con base en el concepto de proyección social asumido por la Universidad Tecnológica de El Salvador.
explorar la posibilidad de continuar y ampliar este esfuerzo
investigativo con un enfoque cualitativo.
En otro orden, los autores se pronuncian por la promoción
de una cultura de consumo de medios —y de la televisión
en particular— que permita una participación “más activa”
de la audiencia, en términos de decisiones y análisis; se
habla de una iniciativa para proporcionar a los jóvenes
las herramientas para lograr un consumo crítico de los
contenidos que ofrecen los medios de comunicación, que
no está reñido con las posibilidades de entretenimiento,
ni supone el consumo exclusivo de espacios considerados
educativos. “Se trata de aprender sin negar el placer. O, si
se prefiere, de aprender desde el placer y gracias al placer”
(Ferrés, 1994).
Si se trata de un esfuerzo sistemático de tipo educativo,
la organización llamada a trabajarlo es la escuela,
entendida esta como la instancia formal que, en todos
los niveles (desde la educación inicial hasta la superior)
y sectores (público y privado), propicia el aprendizaje
para la vida personal y profesional de los individuos. Sin
embargo, no se oculta tampoco el hecho de que, hoy
por hoy, la escuela salvadoreña, desde sus máximas
instancias rectoras hasta los llamados naturalmente a
implantarla —los docentes—, no está preparada para
asumir este reto.
Y es que no debe olvidarse que la adquisición de sentido
crítico —cualidad que se aprende en la práctica— es
inherente a un proyecto de educación en medios que,
si bien es cierto se centra en el alumno, implica para el
docente la obligación de ser crítico consigo mismo, de
las prácticas comunicativas que utiliza, de los métodos y
recursos didácticos que emplea (Charles, 1990). De ahí que,
el sentido crítico frente a los medios debe ser adquirido
primero por el docente.
Lo colosal de la tarea descarta esfuerzos institucionales
aislados. Lo que se requiere es una política y un plan de
nación que se cuide de caer en los riesgos de la regulación
o, peor aún, de la censura. Se habla entonces de un esfuerzo
estatal, por la cobertura y alcance que le son propios como
por el poder institucional que detenta; que sume a todos los
actores involucrados, los medios mismos incluidos.
Punto álgido de la propuesta es el cómo educar para los
medios, por cuanto este es un aspecto que no puede
dejarse a la casualidad, y requiere —por lo menos— la
incorporación del tema al currículo, la definición de un
método y la formación del docente. Para pensar en una
propuesta de educación en medios hay que virar la vista
hacia las experiencias previas en ese sentido. Europa y
Suramérica son ejemplos que se deben analizar, ya que, más
allá de las obvias diferencias culturales, el camino recorrido
es guía para aquel que se inicia en esta ruta.
Por lo planteado hasta aquí, se sobreentiende que este
programa de educación en medios no puede ser producto
de la casualidad, de la improvisación o del solo entusiasmo
de alguno de sus actores. Si como sociedad se ha satanizado
y acusado a los medios, especialmente a la televisión, de ser
el origen de algunos de sus problemas, esa misma sociedad
debe asumir con responsabilidad y seriedad la manera de
relacionarse con ellos, no de enfrentarlos. Es el momento de
trascender la simple crítica y la censura.
Desde las universidades, como espacios generadores de
conocimiento, y con responsabilidades con su entorno,
pudieran generarse propuestas concretas en este sentido y,
atendiendo a su cometido de proyección social, relacionarse
activamente con sus diferentes contextos y trabajar con
una calidad vinculada con la pertinencia y responsabilidad
con el desarrollo sostenible de la sociedad, impulsando un
modelo académico que se caracterice por la indagación de
los problemas en distintos contextos.
17
100
La televisión y pautas de conducta de los jóvenes salvadoreños
Referencias
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aprendizaje y cultura contemporánea. Barcelona, España:
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Ferrés, J. (1996). Televisión subliminal. Socialización mediante
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Maigret, É. (2005). Sociología de la comunicación y de los medios.
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Stevenson, N. (1995). Culturas mediáticas. Teoría social y
comunicación masiva. Buenos Aires, Argentina: Amorrortu
Editores S.A.
101
Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 101-109, ISSN: 2218-3345
Formación ciudadana en jóvenes
y su impacto en el proceso
democrático del ps
Saúl Campos Morán
campos.saul@utec.edu.sv
Dirección de Investigación, Univers idad Tecnológica de El Salvador
Resumen
El objetivo de la investigación fue conocer el nivel
de formación política, la formación ciudadana, el
conocimiento hacia la participación y la actitud hacia
la participación ciudadana existente en los jóvenes
salvadoreños. La investigación fue de tipo ex post facto
con diseño transversal. Los sujetos del estudio son la
población joven de El Salvador, siendo representados
con una muestra probabilística de 482 sujetos,
distribuidos entre los catorce departamentos del país.
Entre los resultados principales de la investigación se
tiene que, de acuerdo al nivel escolar de los sujetos, se
encuentran diferencias signifi cativas en la participación
política, la formación ciudadana y la actitud hacia la
participación, y que el disponer de un trabajo infl uye
en la actitud que se tiene hacia los procesos políticos
nacionales.
Palabras clave: Formación política, formación ciudadana,
actitud hacia la participación, participación política,
participación juvenil, política, juventud, El Salvador.
Abstract
The aim of this research was to determine the level
of political education, civic education, awareness
towards participation and attitude toward the existing
citizen participation in Salvadoran youth. The research
design was cross-sectional ex post facto. The subjects
of the study were young people of El Salvador, being
represented with a probability sample of 482 subjects,
distributed among the fourteen departments of the
country. The main results of the investigation are, that
according to educational level of subjects, there are
signifi cant differences in political participation, civic
education and attitude towards participation, and also
that having a job infl uences the attitude you have to
participate in the national political processes.
Keywords: Political education, citizenship education,
Attitude towards participation, political participation,
youth participation, policy youth, El Salvador.
102
Formación ciudadana en jóvenes y su impacto en el proceso democrático del país
Formación política en jóvenes y su impacto
en el proceso democrático del país
Un dicho popular es que “la gente de hoy va a resolver los
problemas del mañana”. Las escuelas generalmente proveen
la preparación esencial para dicha tarea (Westheimer &
Kane, 2004). Aún sobre esta retórica, un currículo que
considere la naturaleza de los problemas sociales y las
formas en las que un ciudadano puede enfrentarlos
raramente logra atención alguna. En vez de enfocarse en
enseñar formas en las que la juventud puede participar a
través de las instituciones democráticas para construir una
mejor sociedad, los currículos actuales se enfocan en la
adquisición de habilidades académicas y vocacionales.
La democracia, contrario a lo que una primera idea nos
podría sugerir, no es una cualidad humana, sino que es una
cualidad social (López, 2007). Es decir, habrá democracia
solo si hay sociedad; por tanto, al igual que un humano debe
desarrollar sus cualidades para ser integral, así la sociedad
debe desarrollar la democracia hasta su máximo para
considerarse en verdad como tal.
En el país se han realizado investigaciones previas abordando
temáticas similares, destacando la ejecutada por Córdova,
Cruz y Seligson (2007), realizada en colaboración con Lapop,
Fundaungo, el Iudop, el Americas Barometer y la Universidad
de Vanderbilt, que aborda la cultura de la democracia en
El Salvador a escala general. También cabe mencionar el
estudio realizado por Alas, Cabrera y Montoya (2011), en
el que se describe la situación actual de la juventud en El
Salvador, siendo sus hallazgos una referencia importante en
la realización de este.
Actualmente el sistema educativo salvadoreño, desde
la educación primaria hasta la media, tiene dentro de la
malla curricular de estudios sociales contenidos sobre el
funcionamiento del Estado, su organización y sus diferentes
clasificaciones, así como los diferentes modelos que existen
de este contenidos básicos de economía y similares. Sin
embargo, y a pesar de tener una formación académica que
le proporciona dichos conocimientos, la población juvenil del
país mantiene una participación en el ámbito político que va
de baja a nula hasta apática en estos procesos, lo cual se
refleja en la vida política del país, donde los jóvenes todavía no
han podido deshacerse del estigma de niñez, inexperiencia
e irrelevancia que tradicionalmente ha caracterizado a este
sector. Lo anterior, dado como resultado de la cultura de
adultos que todavía domina la sociedad salvadoreña, de la
imagen que los mismos jóvenes proyectan de sí mismos
como miembros de esta, y de una educación que transmite
conocimientos pero que no proporciona las herramientas
necesarias para que el educado, sea capaz por sí mismo, de
asumir un papel activo en la democracia de la cual es parte.
Este conjunto de factores excluye de forma tácita a la
juventud de la democracia del país, relegándola a poder dar
su opinión en espacios de pseudoparticipación ciudadana
dirigidos exclusivamente a los jóvenes, entre los cuales
se encuentran los foros y congresos que se realizan cada
cierto tiempo, y cuyo objetivo es dejar que los participantes
expresen sus ideas con total libertad, algo que, dentro
de un país verdaderamente democrático, puede hacerse
recurriendo a los canales apropiados y teniendo un impacto
verdadero.
El sistema actual del país históricamente no se ha prestado
para una verdadera formación política que permita nuevos
actores que transformen a la sociedad. Así, siguiendo esta
línea, cabe preguntarse: ¿Cuál es el impacto de la formación
ciudadana de los jóvenes en la democratización del país?
De tal forma, se estableció como objetivo general de la
investigación el determinar el grado de formación ciudadana
de los jóvenes salvadoreños, y el impacto que esta tiene en
el proceso democrático del país. Para cumplir esta meta,
hubo que diseñarla en los siguientes objetivos específicos:
1. Determinar el nivel de formación ciudadana de los
jóvenes salvadoreños.
2. Identificar si existen diferencias significativas en el
nivel de formación ciudadana de los jóvenes en cuanto
a su sexo.
3. Conocer si el nivel educativo incide en el nivel de
formación ciudadana que los jóvenes salvadoreños
poseen.
4. Comprobar si existe relación entre formación política y
formación ciudadana.
103
Formación ciudadana en jóvenes y su impacto en el proceso democrático del país
5. Determinar la relación entre conocimiento respecto
a la participación ciudadana y las actitudes que los
jóvenes tienen hacia la participación.
De esta forma, se hace necesaria la definición de un marco
conceptual sobre el que trabajar dichas variables. Así, se
hace necesario definir la democracia como una forma de
gobierno en la cual todos los ciudadanos adultos tienen
igual oportunidad de decisión en los aspectos que afectan
sus vidas (Diamond y Plattner, 2006). Idealmente, esto
incluye participación igualitaria en la proposición, desarrollo
y concreción del proceso de legislación. También abarca
condiciones sociales y culturales que permiten la libre e
igualitaria práctica de autodeterminación política.
Juventud y democracia
Para el European Youth Forum (2010), la gente joven de
hoy tiene más y mejores oportunidades para el acceso a
la información y para ganar conocimiento de la sociedad.
Sin embargo, existe una división cada vez más marcada
entre las instituciones democráticas y partidos políticos,
por un lado, y la sociedad civil, por el otro. El desencanto
con la política, la desconfianza con los partidos políticos y la
complejidad de los procesos de decisión están creando un
déficit democrático.
Los jóvenes de América Latina y el Caribe sufren las
consecuencias de estilos de desarrollo excluyentes (Alas,
Cabrera y Montoya, 2010). Los modelos económicos
adoptados por nuestros países privilegian la inmediatez de
la mano de obra, en detrimento de una formación adecuada
para las nuevas generaciones que llegan a un mundo para el
que no se las prepara para enfrentar.
Donoso (2010), al respecto de la participación ciudadana,
considera que la ciudadanía es la expresión de una
construcción colectiva que configura las relaciones entre las
personas, pero que, al mismo tiempo, son formadas en ese
mismo proceso. Vista de este modo, la práctica ciudadana
sería el espacio de confluencia entre el individuo y la
comunidad. Asimismo, si se entiende que la ciudadanía es
una construcción histórico-cultural, esta se trasforma con
el transcurrir del tiempo y responde a estructuras sociales
diversas.
Molloy (2002) identificó una serie de posibles razones para
la apatía de los jóvenes hacia los procesos democráticos,
incluyendo:
- las limitadas oportunidades para participar en el
proceso político;
- desconocimiento acerca de cómo participar;
- sensación de que tiene mejores cosas que hacer;
- la percepción de que hay una falta de interés en sus
puntos de vista, y
- creer que no tiene sentido la votación debido a que
aunque se vote, ningún cambio va a darse.
La vinculación de las personas jóvenes con la dimensión
política y ciudadana, necesariamente, involucra preguntarse
en torno al lugar desde el cual ellos se sitúan en la
sociedad (Donoso, 2010). Esto, en tanto se entiende que la
participación político-social y la ciudadanía son expresiones
de la implicación de los sujetos en el devenir de la comunidad
de la que son parte, del papel que individual y colectivamente
se asume en dicho devenir y de los derechos que aquella
pertenencia comporta. De la misma forma, Tejeda (2010)
menciona que la gobernabilidad democrática se refiere a la
capacidad de las sociedades para orientar y organizar sus
instituciones públicas y sociales, de modo que ofrezcan a
las personas más y mejores oportunidades para llevar el
tipo de vida que valoran, incluyéndolas en las decisiones
que las afectan.
Condiciones para la formación ciudadana
La formación ciudadana debe entenderse como la
adquisición de conocimientos, el desarrollo de habilidades
y la incorporación de valores que permitan al estudiante
participar, incidir y mejorar la vida de su grupo, su comunidad
y su país. Esta formación implica, además, desarrollar su
capacidad para la reflexión y el cuestionamiento.
Bermúdez (2008) agrega que el fin de la ciudadanía es el
goce efectivo de los derechos humanos de las personas,
más allá de los conceptos de caridad, beneficencia y ayuda
para la pobreza en el marco de los modelos económicos
de desigualdad. Evolucionar en el concepto de ciudadanía
104
Formación ciudadana en jóvenes y su impacto en el proceso democrático del país
social, en el marco de la igualdad social, consiste en la
realización de los derechos sociales: derecho a un estándar
mínimo de bienestar e ingresos, que comprende desde el
derecho a una renta mínima hasta el derecho a compartir la
riqueza social. Estos derechos garantizarían el sentido y las
capacidades para la participación democrática.
Método
Participantes
Para la realización del estudio se tomó en cuenta a
representantes de la población joven de El Salvador, la
cual, utilizando una clasificación estandarizada, comprende
la población joven entre los 18 y los 30 años de edad. De
este grupo se entrevistó a hombres y mujeres con grados
de escolaridad variados, desde educación parvularia hasta
educación superior, incluyendo a aquellos con ingresos
propios o mantenidos por sus padres, de los catorce
departamentos de la República de El Salvador.
En cuanto a las frecuencias de los datos sociodemográficos
(ver tabla 1), se tiene que 234 encuestados (48,5% de la
muestra) son del sexo masculino, mientras que 248 (51,5%)
corresponden al sexo femenino. Asimismo, respecto a los
rangos de edad, se tiene que 177 participantes (36,7%)
están entre los 17 y 20 años de edad; 193 (40%) están entre
21 y 25 años, y 112 (23,2%) se ubican en el rango de entre
26 y 30 años cumplidos. Para el nivel educativo, entre los
valores más bajos se tiene que tres encuestados (0,6%)
solo contaban con educación parvularia, mientras que 15
(3.1%) solo tenían educación primaria, mientras que los
valores mayores en esta variable incluyeron a la educación
secundaria con 42 encuestados (8,7%); 153 para educación
media (31,7%) y superior (55,8%).
A estas variables se les agregó si el encuestado trabaja o
no. Dentro de esta variable, se tiene que 218 encuestados
(45,2%) están en el grupo de los que sí trabajan, mientras
que 264 (54,8%) manifiestan no contar con un empleo fijo.
Universo y muestra
El universo del estudio lo conforman los jóvenes salvadoreños
de entre 18 y 30 años, quienes, de acuerdo con el Censo
Nacional de Población y Vivienda (2007), suman más de
500 mil habitantes. De tal manera que, para el cálculo de
la muestra, se utilizó la fórmula para poblaciones finitas,
asignándose un nivel de confianza del 97% y un margen de
error del 5% (Z = 1.96), obteniéndose un valor de 482, mismo
que fue utilizado para un muestreo estratificado entre los
catorce departamentos de El Salvador.
Diseño y tipo de estudio
La investigación fue de tipo ex post facto con diseño
transversal (Montero y León, 2007), constituida del
diagnóstico de una situación ya existente a partir de una
hipótesis dada, sin tener la oportunidad de manipular la
variable independiente utilizando un post-test sin grupo
control.
Instrumento de recolección de datos
El instrumento utilizado fue un cuestionario de tipo
encuesta construido en escala de Likert con cinco niveles
que incluyeron desde 1 = nada, 2 = un poco, 3 = suficiente,
4 = bastante y 5 = completamente. La prueba estuvo
constituida por treinta ítems construidos para medir cuatro
factores que incluyeron la formación política, la formación
ciudadana, el conocimiento de la participación y la actitud
hacia la participación. Sobre estos ítems se hizo un análisis
inicial que mostró que todos tienen un coeficiente de
correlación de ítem total corregido adecuado, siendo el valor
de media más bajo el del ítem 8: Ha participado alguna vez
en procesos de elaboración de propuestas de ley (M = 1.65;
DT = 1.099), y el valor más alto el correspondiente a Guarda
respeto hacia las demás personas (M = 3.93; DT = 1.188).
Al realizarse la prueba de confiabilidad al instrumento, se
obtuvo un valor para alfa de la escala total de 0.922, con
un valor para el factor formación política de .915, mientras
que para formación ciudadana se obtuvo .831. Por otro lado,
para la escala de conocimiento ciudadano se obtuvo un alfa
de .870 y para la de actitud hacia la participación se obtuvo
un valor de .843.
Al realizar el análisis factorial para los cuatro dimensiones
y aplicarse la prueba de medida de adecuación muestral de
Kaiser-Meyer-Olkin, se obtuvo un valor de 0.919, que indicó
la adecuación de los datos y el grado de correlación entre
105
Formación ciudadana en jóvenes y su impacto en el proceso democrático del país
ellas como positivo, complementándose con una prueba de
esfericidad de Bartlett (x2 = 6988.20; p = 0.000). El análisis
se realizó respecto a los cuatro factores previamente
prefijados, utilizando una rotación de tipo Varimax para
obtener la solución de los componentes. Del resultado, se
obtuvo que los cuatro factores utilizados explican el 58,6%
de la varianza total.
Procedimiento
Se hizo la recolección de datos en lugares públicos que
incluyeron plazas, parques y colonias de las ciudades en
las que se aplicaron los cuestionarios. Como discriminación
a priori de los sujetos, los encuestadores preguntaron la
edad a los participantes antes de proceder con la aplicación
de pruebas, procediendo a explicar a los participantes
el propósito del cuestionario y dándoles la opción de
contestarlo ellos mismos, o que el encuestador les
preguntara los ítems en voz alta para rellenar los datos. La
mayoría de la población se inclinó por la segunda opción, al
manifestar que se tenía poco tiempo para la participación
en el proceso. Para el procesamiento de la información,
se construyó una base de datos en el programa IBM SPSS
Statistics v.19. Los datos fueron tabulados por el equipo
de estudiantes miembros del programa de ayudantes de
investigación de la Utec.
Resultados
De acuerdo con los resultados obtenidos del contraste
de medias entre los valores de cada una de las variables
medidas por los diferentes ítems, se tiene que, para el
factor de formación política, tanto mujeres como hombres,
manifiestan sentirse medianamente identificados con los
ideales de los diferentes partidos políticos. Sin embargo, la
tendencia es baja respecto a la participación en actividades
políticas en general. De acuerdo con las estadísticas
obtenidas, no existe diferencia en cuanto al sexo en ninguno
de los cuatro factores explorados, ya que ítems, como siente
entusiasmo de votar, muestran comportamientos similares
entre hombres (M = 2.56; DT = 1.373) y mujeres (M = 2.53;
DT = 1.301), mostrando ambos tendencias de un entusiasmo
entre moderado y bajo por el ejercicio del sufragio.
Respecto a la edad, para el factor de formación política,
existe una tendencia al aumento del interés en esta
conforme es mayor la edad de los individuos. Así, el ítem
Se siente identificado con los ideales de un partido político
en específico, para el grupo de 17 a 20 años, la población
manifiesta poco interés (M = 1.77; DT = 1.040); mientras
que para la misma pregunta, los grupos de 21 a 25 años
(M = 2.24; DT = 1.365); y 26 a 30 (M = 2.40; DT = 1.402).
muestran sentirse identificados moderadamente con los
ideales de su partido político. Comportamiento inverso
muestra el ítem de Ha aprendido sobre sus derechos y
deberes como ciudadano en la escuela, donde el valor más
alto apareció en el grupo de 17 a 20 años (M = 3.78; DT =
1.209).
Diferencias entre factores
según variable sociodemográfica
Para establecer diferencias entre grupos, y de concordancia
con los resultados de la prueba K-S para una muestra,
se procedió a realizar la prueba de hipótesis por medio
de pruebas no paramétricas. Así, para contrastar las
variables Sexo y Cuenta con un trabajo con los diferentes
factores identificados, se utilizó la prueba U de Mann-
Whitney complementada con W de Wilcoxon, que permiten
establecer si existen diferencias significativas entre dos
grupos; masculino y femenino para Sexo, sí trabaja y
no trabaja para Cuenta con un trabajo. De tal forma, se
encontró que el sexo no tiene incidencia en ninguno de los
factores estudiados, mientras que para Trabaja, se obtuvo
que existen diferencias en cuanto a la formación política (p
= 0.002), a la formación ciudadana (p = 0.05), y actitud hacia
la participación (p = 0.015), siendo el factor de conocimiento
sobre participación el que no reflejó diferencias significativas
(p = 0.551). De tal forma, se infiere que la condición de
trabajo de los jóvenes salvadoreños incide en su nivel de
participación política, formación ciudadana y en una mejor
actitud hacia la participación en el proceso democrático de
El Salvador (ver tabla 1).
106
Formación ciudadana en jóvenes y su impacto en el proceso democrático del país
Tabla 1.
Resultados de prueba U de Mann Whitney en función de sexo y condición laboral
Variable
agrupación
Factores U de Mann Whitney W de Wilcoxon Sig.
Sexo
Formación política
27152.500 58028.500 0.285
Formación ciudadana 26258.00 57134.00 0.098
Conocimiento de participación
27618.500 54646.500 0.448
Actitud hacia la participación
27930.00 58806.00 0.581
Condición
laboral
Formación política 23859.500 58312.500 0.02
Formación ciudadana 25594.500 60047.500 0.05
Conocimiento de participación 27656.500 51527.5 0 0 0.551
Actitud hacia la participación 24871.500 59324.500 0.01
*La diferencia de medias es significativa a p < 0.05
Para el análisis de las variables de tres o más niveles, que
incluyen la edad y la escolaridad, se recurrió a la prueba
de Kruskall-Wallis, que permitió comparar los grupos que
las conforman. Esta prueba se corroboró por medio de un
Anova de factor con una prueba post hoc de tipo Scheffé
para establecer entre qué grupos existen las diferencias. Así,
para la edad, se obtuvo que la variable edad es significativa
respecto a la formación política (X
2
=
14.430; p = 0.001),
formación ciudadana (X
2
=
26.604; p = 0.000) y la actitud
hacia la participación (X
2
= 30.068; p = 0.000); es decir, el
grupo de 17 a 20 años mostró menos interés por la política
y la formación ciudadana que los individuos de 21 a 25 años,
quienes muestran actitudes y comportamientos similares a
las de los individuos en el rango de 26 a 30 años. Los datos
de la prueba paramétrica confirman dichos hallazgos (ver
tabla 2).
107
Formación ciudadana en jóvenes y su impacto en el proceso democrático del país
Tabla 2.
Prueba de significación Kruskall-Wallis y Anova para factor edad
Kruskal-Wallis Anova
Factor
X
2
Sig. F Sig.
Formación política
14.430 0.001 15.456 0.00
Participación ciudadana
26.604 0.000 13.193 0.00
Conocimiento sobre
participación
3.484 0.175 1.696 0.185
Actitud hacia la participación
30.068 0.000 16.099 0.00
*La diferencia de medias es significativa a p < 0.05
Discusión
En una primera aproximación, los resultados de la
investigación sugieren que en la población encuestada existe
poco interés hacia la participación política, lo cual confirma
lo propuesto por Preciado (2009), donde se encontró que
entre los jóvenes mexicanos existe una tendencia similar.
Por otro lado, al analizar los resultados de las pruebas
inferenciales, se tiene que un aspecto fundamental de dicha
relación es la existencia de diferencias en cuanto a los
aspectos de formación política y ciudadana entre aquellos
jóvenes que poseen un empleo y aquellos que no.
Este fenómeno es consistente con los hallazgos del
Instituto Nacional Demócrata para Asuntos Internacionales
(NDI, 2009), que dice que, en el caso de los nicaragüenses,
existe un menor interés en la política y menos confianza,
también manifestaron menor interés en participar en sus
comunidades y menor grado de actividad en la política; sin
embargo, difieren en parte de aquellos presentados por la
Encuesta de Juventud de Chile (2010), donde los jóvenes
manifiestan tener un papel importante en la consolidación
de la democracia de su país.
Los hallazgos también difieren con los datos presentados
por Córdova, Cruz y Seligson (2006), que encontraron
diferencias entre hombres y mujeres en cuanto a la
concepción de democracia, mostrando los hombres una
Factor
definición normativa de la democracia que se repetía más
veces que en las mujeres. En el estudio no se encontraron
diferencias significativas entre hombres y mujeres en cuanto
a ninguno de los factores analizados. Sin embargo, si apoyan
los hallazgos en cuanto a la definición de democracia, de
acuerdo con el nivel educativo, mostrando una tendencia a
considerarla más compleja mientras mayor nivel educativo
se posee.
Por otro lado, la formación política orientada al partidismo
imperante en el país incide levemente en la formación de
valores ciudadanos, pero no es la que los define como tales;
y esta relación genera en los jóvenes una apatía leve hacia
los procesos de participación, la cual se evidencia en el
factor de actitud hacia la participación.
El factor que ha mostrado menos resultados favorables es
el de conocimiento hacia la participación, que solamente ha
mostrado ser significativo respecto a la escolaridad. En los
resultados se manifiesta que solo los jóvenes con niveles
más altos de educación son los que perciben tener algún
nivel de capacidad para ejercer la participación ciudadana,
mientras el resto, a pesar de contar con los mismos
derechos fundamentales, no se consideran capaces de
participar, y, de hecho, están incapacitados para ello; lo que
también incide en la actitud hacia la participación que la
mayoría demuestra.
108
Formación ciudadana en jóvenes y su impacto en el proceso democrático del país
De tal forma, el estudio ha arrojado datos de una juventud
ávida de participar en el rumbo de su país, pero que no
cuenta con las herramientas conceptuales para hacerlo, lo
que trunca dichos ánimos. La actitud hacia la participación
ciudadana mejorará, en tanto que las condiciones sociales
y económicas de los jóvenes sean garantizadas, y que
el sistema de partidos políticos se oriente menos a la
formación de militantes y más a la formación de ciudadanos
salvadoreños que trabajen por mantener el país.
Recomendaciones
- Es conveniente fortalecer los programas de inclusión
social juvenil orientados a la difusión del conocimiento
sobre derechos y deberes ciudadanos. Un mayor
conocimiento de estos es necesario para el fomento
de una actitud positiva hacia la participación, condición
necesaria para la generación de una verdadera cultura
democrática.
- La Política Nacional de Juventud es un instrumento de
los jóvenes salvadoreños para asegurar una inserción
social y económica efectiva. Aquella detalla múltiples
propuestas para asegurar la posibilidad de los jóvenes
de ejercer una participación ciudadana plena. Sin
embargo, ante un amplio desconocimiento de los
medios, alcances y tipos de participación e incidencia
democrática que los jóvenes sufren, estas propuestas
no pueden llegar a concretarse para los grandes
sectores de la población. De tal forma, se recomienda
incluir expandir la formación en derechos y deberes
ciudadanos que actualmente contempla el currículum
de los diferentes niveles educativos nacionales.
La investigación refleja que existe una tendencia
generalizada en la población juvenil a confundir
la participación potico-partidista con la formación
ciudadana. Existe un sector dentro de la población estudiada
que ha nacido y crecido dentro de una línea ideológica
determinada, hecho que genera determinadas actitudes
y preconcepciones hacia la participación ciudadana
en general. Es recomendable establecer un sistema
de formación/información que regule a las juventudes
partidistas y que privilegie la preferencia política por criterio
y no por herencia.
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Revista Entorno, Universidad Tecnológica de El Salvador, www.utec.edu.sv, Julio 2012, número 51: 110-119, ISSN: 2218-3345
Responsabilidad legal
en el manejo y disposición
de desechos sólidos en hospitales
de El Salvador
Carolina Lucero Morán
clucero@utec.edu.sv
Docente Derecho Ambiental
Facultad de Derecho, Universidad Tecnológica de El Salvador.
Resumen
El objetivo de esta investigación es determinar la
responsabilidad legal que tienen los hospitales en el
manejo de los residuos sólidos, peligrosos y bioinfecciosos.
Estos desechos, provenientes del aparato nosocomial,
a menudo no son tratados según las normas técnicas
estipuladas para ello, por lo que no solo se convierten en
amplios fómites transmisores de enfermedades, sino que
han pasado a formar parte de las grandes acumulaciones
de basura que día a día se observan en diferentes partes del
país. A su vez, generan desbalances en el medio ambiente,
considerando que se suman a la gran acumulación de
residuos sólidos en el entorno, transformándose, desde
sus vertederos, en generadores de gases de efecto
invernadero, sumándose a los problemas ambientales
existentes. A menudo esos desechos no son manipulados
con el cuido y las recomendaciones estipuladas por el
Ministerio de Salud y a la luz de las recomendaciones
internacionales. Ha perseguido además establecer si los
hospitales están cumpliendo con las medidas de seguridad
recomendadas para el manejo de los desechos sólidos, a
efecto de delimitar la frontera de su responsabilidad y el
inicio de la responsabilidad del recolector.
Palabras clave: Responsabilidad legal, residuos sólidos,
residuos peligrosos, impacto ambiental, residuos de
hospitales, basura.
Abstract
The aim of this research is to determine the legal
responsibility that hospitals have in the management of
solid, hazardous and biological waste. These wastes from
nosocomial dirty contaminated clothing systems often
are not treated according to standards set for it, so not
only become large f for transmitting diseases, but have
become part of large accumulations of trash that are
observed daily in different parts of the country. In turn,
generate imbalances in the environment, considering that
in addition to the large accumulation of solid waste in the
environment, becoming, from their landfi lls in generating
green house gases, adding to existing environmental
problems. Often, these wastes are not handled with
care and the recommendations issued by the Ministry of
Health and in light of international recommendations. It
also sought to determine whether hospitals are meeting
the recommended safety measures for handling solid
waste for delimiting the frontier of their responsibility
and the start of the responsibility of the collector.
Keywords: Legal responsibility, solid waste, hazardous
waste, environmental impact, Hospital waste, garbage.
111
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos en hospitales de El Salvador
Introducción
La generación de basura es un corolario ineludible de la
vida de las sociedades modernas. El ser humano consume
recursos para subsistir, lo que implica, pero no está limitado
a, alimento, vestimenta, educación, seguridad, transporte
y salud, entre otros. Méndez (2004) menciona que en la
tierra existen miles de especies vivientes, pero solamente
una, el ser humano, consume el 40% de los recursos del
mundo. Diferentes actividades generan varios tipos de
desechos, los cuales afectan de forma particular el medio
ambiente al que son arrojados. De tal forma, una planta
cosechadora de verduras generará desechos orgánicos,
los cuales pueden ser utilizados en un círculo virtuoso de
recursos renovables, mientras que otras instancias, como
los hospitales, generan residuos que van desde basura
convencional hasta materiales peligrosos y bioinfecciosos,
cuyo tratamiento inadecuado puede poner en peligro la
salud de los diferentes organismos que componen el medio
ambiente en el cual son expuestos (Ejlertsson, Karlsson,
Lagerkvist & Hjertberg, 2003).
Dentro del amplio espectro de temas que guardan relación
con la protección ambiental, el manejo inadecuado de
residuos sólidos y residuos peligrosos ocupa un renglón
importante en la definición de políticas y prácticas
ambientales sostenibles. (Medina & Jiménez, 2001).
Balderas, Soto, Medina, J. & Lira (2007) sostienen que
los desechos sólidos merecen estudios de generación y
composición de la población que los sirven, con proyección
para la vida útil del sitio de disposición final, además de
realizar estudios de generación de biogas, mediante análisis
estequiométricos que tomen en cuenta la composición
química de los residuos, cumpliendo así con la norma sobre
la disposición final e información para la toma de decisiones
para un buen manejo integral de los residuos sólidos.
En el caso de los hospitales, a escala internacional existe un
consenso sobre el manejo y disposición de los residuos que
estos generan, siendo principalmente materiales peligrosos
y otras sustancias bioinfecciosas que ponen en riesgo la
salud de la población. Instituciones como el Ministerio de
Salud Pública y Asistencia Social de El Salvador, MSPAS
(2007) y el Departamento de Salud Humana de Estados
Unidos, UDHSS (2011), entre otros, día a día impulsan
políticas para el tratamiento adecuado de las diferentes
sustancias generadas por los hospitales, y promueven el
cumplimiento de los diferentes códigos aprobados a escala
internacional para su correcto manejo y disposición.
Figura1.
Depósitos diferenciados para desechos comunes
y desechos bioinfecciosos.
Los hospitales en El Salvador son unos de los principales
productores de desechos sólidos no degradables, muchos
de los cuales son residuos de material potencialmente
infeccioso y dañino para el medio ambiente y sus
habitantes. La investigación ha perseguido determinar si en
verdad existe un manejo adecuado de estos desechos, en
concordancia con las disposiciones legales sobre su manejo,
y en qué medida los hospitales se adscriben a dichas leyes.
Los conceptos de residuos sólidos
Del Val (1998) menciona que la cuestión de los residuos
afecta en general y de forma horizontal a todas las
actividades, personas y espacios, convirtiéndose en
problema no solo por lo que representa en términos de
recursos abandonados, sino por la creciente incapacidad
para encontrar lugares que permitan su acomodo correcto
desde un punto de vista ecológico.
Para el MSPAS (2007), la gestión de residuos o desechos,
se refiere a la recolección, transporte, procesamiento,
tratamiento, reciclaje o disposición de material de desecho,
112
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos en hospitales de El Salvador
generalmente producida por la actividad humana, en un
esfuerzo por reducir los efectos perjudiciales en la salud
humana y la estética del entorno. Esta misma instancia
refiere que, en el país, la gestión de los desechos es una
responsabilidad compartida entre Ministerio de Medio
Ambiente y Recursos Naturales (MARN) y MSPAS como entes
normativos, y los gobiernos locales como entes operativos;
también actúan en los municipios empresas privadas
prestadoras de servicios de recolección, tratamiento y
disposición final de desechos.
Es necesario, entonces, establecer un marco conceptual
respecto a los residuos y sus diferentes tipos. Para Dimaté
(2005), un residuo es cualquier objeto, material, sustancia
o elemento sólido, semisólido, líquido o gaseoso resultante
del consumo o uso de un bien en actividades domésticas,
industriales, comerciales, institucionales o de servicios,
que el generador abandona, rechaza o entrega y que es
susceptible de aprovechamiento o transformación en un
nuevo bien, con valor económico de disposición final.
Para Galdámez (2000), los residuos pueden clasificarse
de acuerdo con el estado físico en que se encuentren.
Para este autor, los residuos pueden ser sólidos, líquidos
y gaseosos. Es importante notar que el alcance real de
esta clasificación puede fijarse en términos puramente
descriptivos o, como es realizado en la práctica, según
la forma de manejo asociado: por ejemplo, un tambor
con aceite usado, y este que es considerado residuo, es
intrínsecamente un líquido, pero su manejo va a ser como
un sólido, pues es transportado en camiones y no por un
sistema de conducción hidráulica. Muñoz & Bedoya (2004)
dicen que los desechos son desperdicios o sobrantes de
las actividades humanas. Se clasifican en gases, líquidos y
sólidos; y, por su origen, en orgánicos e inorgánicos.
Medina (1999) aporta la definición de residuos peligrosos,
que son los que generalmente causan mayor expectativa.
Estos comprenden desechos desde los de tipo patógeno,
que son los que se generan en los establecimientos de salud
o de atención hospitalaria, hasta los de tipos combustible,
inflamable, explosivo, radioactivo, volátil, corrosivo, reactivo
o tóxico, asociados a los procesos industriales de los países
en desarrollo. Esta clasificación se corresponde con la
propuesta por Dimaté (2005), donde llama a esta gama de
residuos peligrosos como residuos especiales.
Este último autor considera que los riesgos más
comúnmente asociados al mal manejo de estos desechos
incluye la proliferación de vectores y enfermedades, la
contaminación del agua, la contaminación atmosférica, la
contaminación de los suelos, los problemas paisajísticos y
el riesgo de salud mental. El MSPAS (2007), considera que
los establecimientos de salud tienen un importante papel en
la gestión de los desechos, ya que en sus instalaciones se
generan desechos peligrosos y bioinfecciosos.
Figura 3.
Cuarto de residuos infecciosos y bioinfecciosos.
Hospital Rosales. (Foto Cristel Aguilar).
Figura 2.
Vertedero Navarra. (Foto Juan Romero, El Salvador, 2012)
113
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos en hospitales de El Salvador
Las diversas clasificaciones varían de acuerdo con los grados de
peligrosidad que se les aplique a los desechos bioinfecciosos.
La clasificación más aceptada y usada por el Ministerio de
Salud Pública y Asistencia Social de El Salvador (MSPAS) y la
Organización Panamericana de Salud (OPS), y que se detalla
a continuación, considera el nivel máximo de peligrosidad
para los bioinfecciosos, basándose en el criterio de la
Organización Mundial de la Salud (OMS), que establece que:
“La sangre y los líquidos corporales de todos los pacientes
deben ser considerados potencialmente infectantes”.
Entre los ejemplos más comunes de desechos bioinfecciosos
están los análisis de sangre, drenos, jeringas, apósitos,
y aquellos instrumentos potencialmente contaminados,
como agujas y bisturís. Los desechos infecciosos a menudo
se incineran, y suelen ser esterilizados para que sean
almacenados en un vertedero. Buenrostro (2003) señala que
una de las formas más seguras en que podría producirse la
esterilización es a través de la autoclave. (Ver figura 4). Este
es un recipiente metálico de paredes gruesas con un cierre
hermético que permite trabajar a alta presión para realizar
una reacción industrial, una cocción o una esterilización
con vapor de agua. Su construcción debe ser tal que resista
la presión y temperatura desarrollada en su interior. La
presión elevada permite que el agua alcance temperaturas
superiores a su punto de ebullición. La acción conjunta de
la temperatura y el vapor produce la coagulación de las
proteínas de los microorganismos, entre ellas las esenciales
para la vida y la reproducción de éstos, cosa que lleva a su
destrucción.
Figura 4.
Autoclave para esterilizar desechos Bioinfecciosos,
Hospital Merliot.
Además de los hospitales, médicos locales pueden producir
una variedad de residuos peligrosos, como productos
químicos, incluidos los materiales radiactivos utilizados
en las radiografías y otros procesos médicos. Si bien esos
desechos normalmente no son infecciosos, pueden ser
clasificados como desechos peligrosos, y requieren su
eliminación adecuada (Buenrostro 2001).
Los desechos sólidos a través de la historia
Ante estos elementos, debemos contrastar la situación
actual de nuestro país. Según Umaña (2004), a principios
de la década, en El Salvador se producían 3.200 toneladas
de basura al día, al menos 3.000 toneladas producidas en
las cabeceras departamentales, y del total producido en las
áreas urbanas, al menos 2.000 toneladas con acceso a un
relleno sanitario. Sin embargo, solo se están depositando
1.500 toneladas diarias en éstos.
Dentro de esta estructura, el manejo de desechos sólidos
está a cargo, en el ámbito interno, de los diferentes
hospitales que conforman el sistema de salud nacional
(MSPAS, 2007), mientras que el manejo externo, es decir, el
proceso que se lleva a cabo desde que el hospital entrega
el residuo previamente clasificado hasta su disposición
final, lo realiza la instancia autorizada para administrar esos
desechos, siendo este en el caso de El Salvador, el Mides.
También colaboran en esta tarea Servirecolección, S.A. de
C.V., Corporación HR, S.A. de C.V. y Transae, S.A. de C.V.
Los desechos sólidos desde el lente jurídico
El Derecho Ambiental es una disciplina transversal; afecta
a todas las ramas del ordenamiento jurídico y se revela en
el objeto de cada una de ellas. Por eso, cada rama tiene
que asumir el compromiso y luchar porque el derecho
fundamental a un ambiente sano y equilibrado sea una
realidad y se transmita a las generaciones futuras (Ulate,
1997.)
La defensa del ambiente y el derecho a un ambiente sano
constituyen intereses legítimos que han de ser protegidos
y defendidos por el sistema jurídico, teniendo su reflejo, de
esta forma, en una tutela judicial efectiva (Cafferatta, 2005).
114
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos en hospitales de El Salvador
Pérez (2000), indica que el derecho ambiental
internacional ha desarrollado los principios necesarios
para establecer importantes parámetros en la defensa
legal del ambiente. Cafferatta (2005) agrega que el
Derecho Ambiental no se dirige a un grupo específico,
sino a la colectividad; la sostenibilidad que se
asocia directamente con el desarrollo sostenible; la
globalidad que hace una reflexión entre la necesidad
de relacionar las ciencias naturales y sociales con los
sistemas terrestres; la solidaridad que es vital para la
tutela del ambiente porque opera en una dimensión
intergeneracional y entre países; por ello, Pérez
(2000) aporta los principios de impacto directo en las
legislaciones de América Latina, que son: el principio
preventivo, el principio precautorio, el principio de que
quien contamina paga, el principio de responsabilidad
y el principio de corrección o solución en la fuente.
La evolución en la Constitución de El Salvador.
La defensa legal del ambiente, si bien constituye
obligatoriedad por cuanto emana de los diversos tratados,
convenios, protocolos y conferencias firmadas por la región
centroamericana, es de reciente adopción en El Salvador.
Poco antes del 2003, el Art. 117 se leía así:
Art. 117. “Se declara de interés social la protección,
restauración, desarrollo y aprovechamiento de los recursos
naturales. El Estado creará los incentivos económicos
y proporcionará la asistencia técnica necesaria para el
desarrollo de programas adecuados”.
La protección, conservación y mejoramiento de los recursos
naturales y del medio serán objeto de leyes especiales.
Luego de la firma de convenios importantes para la
disminución de los gases de efecto invernadero, sustancias
transfronterizas, Kyoto, Basilea, Conferencia de Río, hacia
2003, El Salvador decide reformar este artículo, quedando
de la siguiente manera:
Art. 117. “Es deber del Estado proteger los recursos
naturales, así como la diversidad e integridad del medio
ambiente, para garantizar el desarrollo sostenible” .
Se declara de interés social la protección, conservación,
aprovechamiento racional, restauración o sustitución de los
recursos naturales, en los términos que establezca la Ley.
Se prohíbe la introducción al territorio nacional de residuos
nucleares y desechos tóxicos.
Claramente se observa, cómo el Estado se compromete a
través de la nueva letra. Ya no serán simplemente las leyes
especiales las que responderán por el medio ambiente, sino,
desde el enfoque de derecho fundamental, el Estado mismo.
Cabe señalar, también, que ha sido agregado el concepto de
desarrollo sostenible, proveniente del informe Brundtland,
el cual discretamente obliga a hacer uso de los recursos sin
afectar los de las futuras generaciones.
Desde este punto, todo el aparato legal deberá estar
orientado a la protección del medio ambiente. Por ello, la
forma en que se están manejando los desechos sólidos
provenientes de los hospitales está íntimamente relacionada
con estos artículos, por cuanto no solo protegemos el medio
ambiente, en sentido estricto, sino el medio ambiente que
propicia la vida, en sentido amplio.
Contribuyen también a ampliar esta protección, la Agenda
21 de Río, que exhorta a la minimización de la producción
de residuos, el reciclaje, la recolección y el tratamiento y
disposición final adecuados. El Convenio de Basilea y los
desechos sólidos, que establece que “los residuos peligrosos
que deban ser objeto de un movimiento transfronterizo
deben embalarse, etiquetarse y transportarse con arreglo
a las normas internacionales e ir acompañados de un
documento de movimiento desde el lugar de origen hasta
el lugar de eliminación”, situación que incluye a las baterías
transportadas como chatarra.
Existen artículos en la Constitución y en los diferentes
códigos del país que se refieren directamente a la salud
pública.
En la Constitución de la República, toda la sección cuarta,
de Salud Pública y Asistencia Social, se refiere a ello,
específicamente en el Artículo 68 se faculta al Consejo
Superior de Salud Pública como la institución encargada de
velar por la salud del pueblo y vigilar a todas las personas y a
115
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos en hospitales de El Salvador
todos los organismos, instituciones y empresas que presten
servicios de salud. Asimismo, en el Artículo 77 del Código de
Salud vigente, se determina que: “El establecimiento que
produzca desechos que por su naturaleza o peligrosidad
no deben entregarse al servicio público de aseo, deberá
establecer un tratamiento autorizado por el MSPAS”.
El Código Municipal establece que: “Es competencia de las
alcaldías municipales la prestación del servicio de barrido de
calles, de la recolección y disposición final de las basuras”.
Sin embargo, no tienen un sistema que separe los desechos
peligrosos de los residuos domésticos y de los industriales.
A escala nacional, en los diferentes botaderos de basura
se han encontrado desechos hospitalarios peligrosos,
incumpliendo esta normativa. Al respecto, la Ley del Medio
Ambiente señala normas que las instituciones hospitalarias
deben cumplir. Los artículos 60, 85, 255, 256, 257, 262,
278, etc. nos remiten a diversos delitos que incurren en
responsabilidad penal y civil, así como de la responsabilidad
de funcionarios y empleados públicos.
En los últimos años, El Salvador también ha visto la luz de
los siguientes cuerpos legales relacionados a los desechos
sólidos:
- Reglamento especial de normas técnicas de
calidad ambiental.
- Reglamento especial en materia de sustancias,
residuos y desechos peligrosos.
- Reglamento especial sobre el manejo integral de
los desechos sólidos.
Adicionalmente, el MSPAS, ha producido, para coadyuvar
al correcto manejo de los desechos sólidos, las siguientes
guías (Minsal, 2006):
- Guía técnica para el manejo de los desechos
sólidos hospitalarios bioinfecciosos, generados en
establecimientos del sector salud. (Para áreas que
cuentan con sistemas de recolección, transporte,
tratamiento y disposición final sanitaria).
- Guía técnica para el manejo de los desechos
sólidos hospitalarios bioinfecciosos, generados
en establecimientos del sector salud. (Para áreas
que NO cuentan con sistemas de recolección,
transporte, tratamiento y disposición final
sanitaria).
Responsabilidad por daños al ambiente
La efectividad, como reto del Derecho Ambiental, ha sido
reconocida por el principio 11 de la Declaración de Río,
que proclama el deber de los Estados de promulgar leyes
efectivas sobre el medio ambiente. El Derecho Ambiental
conlleva al tema de la responsabilidad de restaurar el daño
ocasionado, y, al efecto, existen mecanismos en instancia
civil, penal, administrativa y constitucional. “La posibilidad
de desarrollar una instancia procesal especializada para
la materia ambiental está por definirse en El Salvador, a
efecto de poder hacer cumplir los servicios públicos como
de la colectividad, y no derechos subjetivos, individuales o
exclusivos de los ciudadanos o usuarios” (Urbina, 2010).
De tal forma, y a la luz de la responsabilidad con el medio
ambiente que los actores expresados deben tener, es
conveniente preguntarse: ¿Cuál es la responsabilidad legal
de los hospitales de El Salvador en el manejo y disposición
de desechos sólidos que producen?
Para responder esta pregunta, se planteó como objetivo
general de la investigación determinar la responsabilidad
legal de los hospitales de El Salvador en el manejo y
disposición de desechos sólidos que producen. Para el
logro de este objetivo, se plantearon los siguientes objetivos
específicos:
- Identificar los mecanismos de manejo y disposición
de desechos sólidos por parte de los hospitales.
- Determinar el tipo de desechos sólidos producidos
por los hospitales y el manejo de estos por las
instituciones de salud.
- Averiguar las disposiciones legales y reglamentarias
que se respetan y las que no en el manejo de
desechos sólidos de los hospitales.
De acuerdo con los objetivos propuestos, se procedió a
delimitar la investigación para abarcar el espectro más
116
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos en hospitales de El Salvador
relevante y pertinente, con impacto en la realidad nacional
salvadoreña. Así, se estableció la siguiente delimitación de
la investigación:
- Teórica: Derecho ambiental. Código de Salud.
Guía técnica para el manejo de los desechos
sólidos hospitalarios bioinfecciosos generados en
establecimientos del sector salud.
- Temporal: De Agosto a noviembre de 2011.
- Espacial: Hospitales pertenecientes al sector
público de salud, representativos de algunos
departamentos de nuestro país, incluyendo San
Salvador, Sonsonate, La Libertad y Cuscatlán.
- Unidades de análisis: Hospitales del sector de
salud pública de El Salvador bajo el mando del
MSPAS de El Salvador.
- Contexto: La investigación se realizó bajo un
contexto jurídico ambiental.
Método
Participantes, universo y muestra
Se seleccionó una muestra que comprende el 20% de
los hospitales registrados en el sistema de salud pública
nacional, escogiéndose de acuerdo con su tamaño y
ubicación geográfica los siguientes hospitales: Hospital
nacional general “Dr. Jorge Mazzini Villacorta”, de Sonsonate;
Hospital Nacional general “Nuestra Señora de Fátima”, de
Cojutepeque; Hospital Nacional especializado “Rosales”;
Hospital Nacional especializado de maternidad “Dr. Raúl
Arguello Escolán”; Hospital Nacional especializado de niños
“Benjamín Bloom”; Hospital Nacional general de neumología
y medicina familiar “Dr. José Antonio Saldaña”; Hospital
Nacional general “San Rafael”, de La Libertad.
Proceso de recolección de datos
Para recolectar los datos se utilizó metodología cualitativa
de acuerdo con la descripción proporcionada por Montero
y León (2007) y Hernández, Fernández y Baptista (2006),
utilizándose la técnica de observación no participante
para recolectar los datos, así como la utilización de grupos
de enfoque para recabar experiencias de los médicos
que laboran en dichos hospitales acerca de los procesos
de manejo y disposición de los desechos. Se hizo dicho
procedimiento de forma longitudinal con doctores externos
de dichos hospitales, al tener este grupo la característica de
turnos rotativos entre los diferentes centros de salud.
Resultados
Para la recolección de datos se procedió a contrastar la
información proporcionada por el MSPAS (2007) con la
información obtenida de las entrevistas y observaciones
de campo. De tal forma, se obtuvo que, según cifras de
la institución, el MSPAS cuenta con tres vehículos de su
propiedad autorizados para las actividades de transporte
de desechos bioinfecciosos, con los cuales se recolectan y
se transporta un promedio de 4.320 lbs/día. La presencia
de dichos vehículos, sin embargo, no fue constatada en
ninguno de los hospitales en los que se hizo la evaluación,
a excepción del Hospital Nacional “Rosales” y el Hospital
“Saldaña”. Es posible que en los demás hospitales también
exista dicho procedimiento; sin embargo, de los grupos
focales realizados se infiere que no existe una difusión
adecuada de los procedimientos que sigue dicho tipo de
sustancias, ya que la mayoría de los entrevistados manifestó
que el hospital en el que laboran utiliza al Mides como
instancia principal de manejo y disposición de desechos
tanto seguros como infecciosos, y no se conoce intervención
directa del MSPAS dentro de dicho procedimiento, más que
como ente regulador.
Por otro lado, un estudio realizado por el MSPAS (2005),
determinó que un total de trece hospitales del país (555. 61
Ton/año) utilizan un sistema de tratamiento y disposición final
a escala nacional que cuenta con los permisos necesarios
de acuerdo al marco legal vigente, a través de un sistema
de autoclave propiedad de una empresa privada, mientras
que los dieciocho hospitales nacionales restantes utilizan
el tratamiento in situ y la codisposición sanitaria en celdas
de seguridad dentro de cada hospital nacional. Estos datos
fueron confirmados en los hospitales evaluados, resultando
que cinco de los seis centros explorados utilizan el sistema
de disposición en conjunto con el Mides, mientras que solo
uno de estos utiliza procedimientos in situ. Sin embargo,
117
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos en hospitales de El Salvador
hospitales como los de Sonsonate y Cojutepeque, tienden a
utilizar ambas modalidades, dependiendo de la disposición
de los recursos que se tenga.
Agregado a esto, se ha detectado el cumplimiento, de
moderado a alto, de las estrategias propuestas por el MSPAS
(2005) en cuanto a las estrategias de manejo y disposición
de los desechos sólidos, entre las que se encuentra que en el
80% de los hospitales evaluados en la investigación existen
comités nosocomiales. Este programa funciona con estos
comités como figura de vigilancia sanitaria de las infecciones
nosocomiales, epidemiológicas y enlace institucional, el cual
está integrado por un equipo conformado por un médico
director, un epidemiólogo, una enfermera, el jefe servicios
generales, mantenimiento y el inspector de saneamiento
ambiental.
Por otro lado, en cuanto a la estrategia del MSPAS de
reducción, reaprovechamiento y reciclado, uno de los
principios elementales del proyecto contempla la reducción
y separación en la fuente de los desechos comunes e
infecciosos. Se pudo constatar que en el 100% de los
hospitales evaluados se tiene por lo menos conocimiento
y práctica mínima de dicho procedimiento, corroborándose
que en hospitales como el “Bloom” y el “Argüello” se
utiliza al máximo cajas de cartón, envases plásticos
rígidos, recipientes metálicos, garrafas y bolsas, todo lo
que presentan características similares a lo plasmado
en la propuesta de Norma del manejo de los Desechos
Bioinfecciosos.
Finalmente, en cuanto al sistema de tratamiento y
disposición final, se encontró que en el 100% de los
hospitales evaluados se manejan los desechos hospitalarios
tomando en cuenta los principios sanitarios de tratamiento
in situ de los desechos bioinfecciosos y la codisposición
sanitaria controlada dentro de cada establecimiento de
salud. En evaluación realizada a los hospitales “Dr. Jorge
Mazzini Villacorta”, “Nuestra Señora de Fátima”, “Rosales”;
Hospital Nacional especializado de Maternidad, “Dr. Raúl
Arguello Escolán”; Hospital Nacional especializado de
niños “Benjamín Bloom”; Hospital Nacional general de
neumología y medicina familiar “Dr. José Antonio Saldaña”
y Hospital Nacional general “San Rafael”, de La Libertad,
se encontró que en todos se efectúa la separación en el
origen, se envasan y se acopian, para que posteriormente
sean recolectados, transportados, tratados y dispuestos
adecuadamente en los rellenos sanitarios correspondientes.
Discusión
Los resultados obtenidos en el estudio reflejan que
las estrategias propuestas por el MSPAS (2005, 2007),
demuestran que los centros de salud tomados en cuenta
en el estudio cuentan con las estructuras y procedimientos
mínimos necesarios para el cumplimiento de las normativas
trazadas en la Guía para la gestión de desechos sólidos
(2007) y las estrategias contempladas en la política de
Desechos sólidos hospitalarios (2005), donde se detalla
el papel de dichas instituciones en este procedimiento
de disposición. Sin embargo, se detectó que, si bien los
hospitales tienen sistemas de disposición eficientes, no
existe una articulación real entre los entes de disposición
interna y la institución encargada de su disposición final en
los rellenos sanitarios correspondientes (Mides). El estudio
nos ha confrontado con la mala disposición de estos
desechos, que son abandonados en los diversos botaderos
de nuestro país, constituyéndose en una preocupación por
la posibilidad de contagio de enfermedades a través de
estos desechos hospitalarios. Basta tener a la mano los
mapas de pobreza de nuestro país, con lo cual abordamos
de inmediato que son muchas las personas que viven en
estos botaderos, y cuyas economías convergen alrededor
de la basura. Niños pepenadores, personas de toda edad,
enfrentándose todos los días a engrosar la proporción de
pacientes con diagnóstico de Vih/Sida, hepatitis B o C y
cuadros de enteritis, etc, producto del contacto con jeringas
usadas encontradas en estos lugares. Son muchos los
desechos bioinfecciosos que van a parar a los diferentes
vertederos de basura de nuestro país. El verdadero impacto
ambiental de los desechos sólidos hospitalarios es, en gran
medida, dependiente entonces de dicha institución, y no de
las que generan los desechos en primer lugar. Sin embargo,
la responsabilidad de un embalaje y clasificación adecuada
sí recae en los hospitales.
Un aspecto relevante de los datos obtenidos es que
no existe un conocimiento amplio de los protocolos de
disposición en la población laboral de los hospitales; de lo
que se infiere que el tratamiento de dichas sustancias es
118
Responsabilidad legal en el manejo y disposición de desechos sólidos en hospitales de El Salvador
especializado. Las respuestas de los encuestados varían
respecto a que algunos consideran que son las enfermeras
las que se encargan del procedimiento, mientras que otros
se lo atribuyen al personal de limpieza. Así, es importante
apuntar que de nada sirve una estrategia bien construida
si no se toma en cuenta a los actores de primera mano y
no se instruye adecuadamente sobre esos procedimientos a
todo el personal de los hospitales, condición necesaria para
minimizar el riesgo en dicha población, que es la que está
más en contacto con estos desechos. Si bien el Código de
Salud en su artículo 77 dice que el MSPAS autorizará sistemas
de tratamiento de desechos de naturaleza peligrosa, estos
desechos no tienen el seguimiento adecuado, ya sea por
insuficiencia de espacios en los mismos nosocomios o por
descuido de los responsables.
Esta investigación permite darle seguimiento para comple-
tar un diagnóstico del proceso de disposición de desechos
sólidos peligrosos por parte del ente designado para ello. Solo
en esa medida se podrá determinar el verdadero impacto
que tienen los residuos generados por los hospitales en el
ambiente de nuestro país. Por otro lado, el objetivo trazado
de determinar el tipo de desechos sólidos producidos por
los hospitales y el manejo de estos por las instituciones de
salud se ha cumplido. La responsabilidad legal del manejo de
desechos depende del manual correspondiente propuesto
por el MSPAS, y los tipos de desechos más comunes
generados por los hospitales de nuestro país incluyen los
análisis de sangre y aquellos instrumentos potencialmente
contaminados, como agujas, catéteres y bisturís.
La responsabilidad del manejo de desechos, tanto de
hospitales como de la basura en general no debe ser
responsabilidad únicamente del Estado o de una institución
en particular, sino de todos. Si aquellos generadores de
desechos no adquieren una conciencia activa de la relación
que la sociedad debe tener con el entorno, ninguna ley
podrá salvar a la sociedad salvadoreña de vivir en el futuro
árido que la irresponsabilidad de hoy está ayudando a forjar.
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NOTA: En la edición anterior de Entorno se omitió involuntariamente la bibliografía correspondiente al artículo
“El Salvador: la transición inconclusa de Roberto Rubio-Fabián, páginas 35-45, que es la siguiente:
- Iglesias, Enrique; Conde, Rosa y Suárez Pertierra, El Momento Político de América Latina, Siglo XXI
Editores y Fundación Carolina, Madrid, España, 2011.
- Rubio, Roberto, El Salvador: la transición inconclusa, páginas 343-362.
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CONVOCATORIAS Y REQUISITOS PARA LA PUBLICACIÓN DE ARTÍCULOS
REVISTA “ENTORNO” - UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE EL SALVADOR
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